K R A C K ¹ 【TAEJIN】

C I N C O

Toc, toc, toc, toc, toc.

El sonido fuerte e incesante proviene de algún recóndito lugar en sus sueños oscuros y logra fastidiar el grandioso descanso.

Toc, toc, toc, toc, toc.

Comienza a despertar y escucha el sonido más claro. Debe ser la puerta, alguien está llamando. No sabe que hora es pero de alguna forma, debido a la rutina diaria, abre los ojos pensando que debe ser muy tarde y que no logrará llegar a tiempo a su trabajo. Seokjin se vuelve a su derecha y observando su teléfono en el suelo.

Sábado 28, 7:35am

Toc, toc, toc, toc, toc.

Se preguntó quién podría ser quién llama a la puerta tan temprano.

Entonces se da cuenta de que sobre su cuerpo hay una maraña de brazos y piernas, no se molesta en quitárselo de encima porque reconoce los cabellos rizados y oscuros que amenazan con hacerle cosquillas.

Cerró los ojos pensando en la noche pasada en que Taehyung llegó moribundo a su departamento, murmurando algunas palabras, para después terminar inconsciente sobre su cama. Pensó que estaba herido, pero no encontró sangre u otra herida que le diera razones por las que estaría indispuesto para una explicación, aunque no estaba molesto ante su inesperada intrusión.

––Kim Taehyung, se que estás ahí, grandísimo hijo de puta.

Aquellas palabras bastaron para alertar a Seokjin. Trató de levantarse, pero Taehyung se lo impidió, abrazándolo con más fuerza.

––No abras... Duérmete.

––Pero...

––¡Juro que si no abres la puerta, la voy a derrumbar!

Jin no sabía que hacer. La renta le costaba demasiado dinero como para esperar a que derrumbaran su inmueble para que el dueño del edificio llegara a cobrarle el doble por quién sabe cuando tiempo, por lo que despabiló su sueño y batallando con su compañero de cama -en el buen sentido de la palabra- lo dejara salir.

Se acercó a la puerta escuchando las quejas de Taehyung y abrió de par en par, mientras tallaba uno de sus ojos.

Notó a un grupo considerable de personas mirándolo, usaban trajes policíacos, salvo por dos personas, a quienes reconoció como el jefe de Taehyung, E'Dawn y la rubia, Hyuna. Todos ellos lo miraron de pies a cabeza, bajó la mirada hacia su cuerpo y solo así se dió cuenta de que estaba medio desnudo, salvo por su camisón cubriendo hasta la mitad de sus muslos.

En un segundo sintió el calor de una sábana cubriéndolo de pies a cabeza, para después ser cargado y depositado en la cama.

E'Dawn y Hyuna sonrieron al ver a Taehyung actuar en menos de un segundo para cubrir a Seokjin y recostarlo en la cama mientras murmuraba un par de improperios.

––¿Qué hacen aquí?

Preguntó Taehyung.

––La misma pregunta te hago a ti–– E'Dawn entró al departamento con su séquito. ––Escapaste a media noche, justo cuando estabas recuperandote de tu tratamiento.

––¿Qué tratamiento?

Seokjin sintió curiosidad.

Taehyung, quién en ése momento usaba una polera blanca y unos pantalones de pijama, colocó sus manos en su cintura evaluando su situación.

––Es confidencial, jovencito.

Seokjin hizo un puchero de forma inconsciente, aunque para Taehyung no pasó desapercibido y guardaría aquella acción en su memoria.