Detrás de la Tragedia [Temporada 2]

Capítulo 5 Lady Venom

El viento resoplaba con poca fuerza barriendo un poco la interminable estepa, aquel día.

Se podía ver a cierta persona caminar sin rumbo por el lugar, dentro de sí misma se recordaba que debía volver a su hogar pero su mente solía divagar en ocasiones haciéndola olvidar de lo importante.

Sus ojos brillaban con un color verde potente, sus colmillos siempre estaban presentes y listos para atacar, su cabello era largo hasta la cintura y había conservado aquella tintura rubia que llevó en su juventud. Su piel era tan blanca como la nieve y eso se debía a las escamas que habían hecho desaparecer parte de su poca humanidad.

Vestía con una prenda corta y rasgada que cruzaba su pecho, lo que le daba la apariencia de una toga romana pero a diferencia de que su única manga era tan larga que cubría el brazo de la mujer. Sus antebrazos, piernas y abdomen estaban bien protegidos con metal y bajo todo esto llevaba el fondo negro de su antiguo traje. En su cuello llevaba una tela roja que también la protegía de los intensos y peligrosos rayos del sol.

¿Armas? Llevaba su viejo Tanto en su espalda a la altura de la cintura, y al costado una Katana que atada al mango tenía un pedazo de tela azul que se agitaba por el viento.

Además, ella estaba llena de sorpresas y está demás decir que quien no portara algo para defenderse sería un blanco perfecto para cualquiera.

El parche en su ojo la limitaba a mucho, el brazo robótico bajo su manga le daba grandes ventajas pero le traía horribles recuerdos.

La perdida de estas dos partes de su cuerpo habían sido producto de dos escenas que le causaban pesadillas noche a noche.

Su brazo fue cruel y brutalmente arrebatado en su intento por reclamar justicia al Rey de la estepa y su ojo la había dejado el día que su vida cambió para siempre.

¿Quién era ella? Bueno, incluso ella anhelaba saberlo

...🌱...

Aquel día...
Sus ojos se abrieron dándole una nueva oportunidad de vivir o en realidad... Forzándola a vivir ya que aquello tal vez era lo último que hubiera querido.

"No puedo creerlo.... ¡Doc! ¡Rápido! ¡Ven a ver esto!"

"Es increíble..."

Un par de voces que le eran desconocidas llegaron a sus oídos mientras ella aún luchaba por reaccionar o al menos por abrir los ojos por completo.

-Karai- la mirada de la mencionada estaba perdida y aún un poco nublada- Karai ¿Me escuchas?

La chica pelinegra pestañeó varias veces con la esperanza de poder concentrarse, lo que más le preocupaba era no recordar siquiera su nombre.

-¿En dónde estoy?- preguntó ella llevando una mano a su sien al sentir un ligero dolor

-Estás a salvo y eso es lo que importa- respondió uno

La pelinegra se miró a sí misma percatándose de que vestía solo con el fondo negro de su traje de Kunoichi; aunque no recordara haber tenido un traje o ser una Kunoichi.

Miró también a su entorno y examinó con la mirada todo lo que podía.

Era una habitación bastante chica y con poca iluminación, lo que podía alcanzar a ver era una mesa con un gran desorden de cosas encima, al lado de eso una puerta a otra habitación y el lugar donde estaba que era sobre una camilla frente a dos mutantes.