Four

Capítulo 5: Amigos

- ¡Kageyama! ¿Qué haces aquí?- preguntó un confundido akiteru

- Vine a ver a tu estúpido hermano - se le era difícil tratar bien al rubio, al menor de los tsukishima

- Por favor deja de insultar lo - pidió él mayor

- Pero no lo insulte

- Claro que sí

- Mmmm - volteó a ver a otro lado luego volvió a ver al mayor - Quiero hablar con él ¿En dónde está?

- Kei no se encuentra ahora

- ¡Mentira!- exclamó molesto - Iré a patear esa maldita puerta y le voy a dar unos buenos golpes - , somato con fuerza la mesa y se dió la media vuelta para ir en busca de la bacteria

- ¡Espera! Kei me matará

- Sigues teniéndole miedo a esa sabandija, se supone que eres el mayor de los dos . Bueno me enteré de que será una nena, compré esto - le extendió una bolsa - Por favor entregase lo y felicidades, ahora quítate o te pateó - amenazó

Akiteru obedeció, si algo sabía era que Tobio no siempre era tranquilo y cuando se enojaba el mundo ardía en llamas :v

- Nos vemos - Kei corto la llamada y al abrir la puerta fue golpeado con algún objeto ya que cayó al suelo - ¿¡Quién demonios....- cerro la boca al ver de quién se trataba - Tobio - susurro

- El otro día no me dejaste ver a mi hijo - hablo soltando un jarrón de cristal que se quebró al caer al suelo, asustando al rubio quien se hizo hacia atrás para no ser lastimado por los pequeños fragmentos de cristal

-¡¿Estás loco?!- grito algo molesto pero el azabache le lanzó agua de un vaso que había jalado. Abrió sus ojos pues al momento de que le lanzaron el agua los cerro - Eres un animal

- Animal si, si como sea, vamos al grano maldito poste andante

- Te demandaré si vuelves a hacerme algo - le amenazo levantándose

- A mi no me amenaces - y con su mano le pegó en la espalda -¡¡¿Tienes idea de lo difícil que fue estar lejos de mi bebé?!!- con sus dos manos lo jalo de los cabellos - ¡¡Maldito desgraciado!!- lo jalo y lo golpeó contra el escritorio del rubio

- ¡¡Suéltame!! ¡¡Eres un animal Tobio!! - el tsukishima menor tenía cerrados los ojos, sus lentes estaban quebrados y manchados de unas cuantas gotas de sangre

- ¡¡Maldito poste !!

- ¡¡K-kageyama detente!!- llegó akiteru y algo asustado tratado de apartar al azabache

- ¡¡Si me tocas te va peor a ti!!- le amenazó Tobio

Él pobre akiteru no sabía que hacer, realmente le temia a su ex cuñado

-¡¡Nee-san ayúdame!! - le pidió Kei -¡¡¡Ahg!!! ¡¡Suéltame Tobio me lastimas!! ¡¡Nee-san llama a alguien!!

-¡¡Akiteru no te muevas!!- grito muy molesto kageyama - ¡¿Crees que porque tienes dinero me asustas?! ¡¿Eh?!- con mucha más fuerza le apretó los cabellos rubios - mírate das pena - se rió burlón- Vengo por mi hijo me lo llevaré

- Tatsunari ya tiene a una madre - hablo burlón ahora Kei

Él azabache lo miro serio y lo golpeó con fuerza contra el piso

- ¡¡Wah h!! ¡¡¡Kageyama detente, Kei!!! - grito asustado él mayor

Tobio se levantó y dejó tirado al rubio, quien estaba adolorido

- Haré que te odie - le dijo Kei mirándolo fijamente y riendo

- Kei no hables - llegó su hermano

Tobio estaba a punto de llorar por las palabras que él rubio le dijo

- Mi hijo solo odiara a la puta que tienes de esposa

-¡¡¡Tobio!!!- grito molesto tsukishima

- Nos vemos, ahora no podrás escapar tsukishima Kei - le escupió en la cara y luego se giró para irse 

Al llegar a su casa suspiro, trato de calmarse no le hace bien a su bebé

Se quitó su abrigo y sus zapatos y empezó a caminar hacia la sala

Antes de llegar miro las escaleras y decidió subir las estas. Con pereza abrió la puerta y entró, se encontraba bien ya que había abrazado a su pequeño niño pero...

¿Quién era la mujer con la que Kei se casó?

Aún no lo sabía, pero aunque sea mujer está dispuesto a golpearla también, ambos ella y Kei son unas malditas sabandijas que le hicieron daño

A pesar todo posiblemente aún siente algo de amor por él rubio, suspiro cansado

- Quiero comer un pastel - hablo para sí mismo, debía ir y bajar las escaleras para comer el pastel que había comprado el día anterior

La luz del día le lástimaba los ojos azul marino que tiene, se levantó y miro la hora aún tenía tiempo

Tenía tanto sueño que no quería ir a trabajar, pero por su hijo debía hacerlo pero...

También debía cuidar a su pequeño que aún estaba en su vientre, ser padre era difícil

Había pagado un taxi para ser llevado hasta esa escuela

Se quedó parado en la gran entrada para saludar a cada niño y padre que entraba, aunque los padres no entraban solo los bajaban del vehículo un beso y se van

-¡¡Tobio-chan!!- escucho esa voz

Esa voz que no había escuchado desde hace tiempo volteó a ver hacia el frente y fue abrazado

-¡¡¡Tobio-chan tiempo sin vernos!!!- gritaba feliz

- Oi-oikawa-san espere- pidió

- Oikawa déjalo - hablo con orden iwaizumi

- Papá ten cuidado él esta esperando un bebé - hablo un niño castaño -¡¡ Buen día sensei!!- grito alegre él pequeño castaño

- ¡¡Tobio-chan pero no está grande!!

- Vayanse - ordenó iwaizumi a sus dos hijos que obedecieron -¿Cuando llegaste?- preguntó

- Es cierto tobio-chan, ¿cuando llegaste?- preguntó ahora él castaño

- Iwaizumi-san usted...

-¿Huh?

- ¿Porqué no me dijeron que mi hijo estaba aquí? ¿Porqué no me llamaron? ¿Porqué no me ayudaron? Ustedes....- la pareja solo guardaron silencio

- Kageyama nosotros... No sabíamos cómo decírtelo

- Tobio-chan debes calmarte

- Pero no estoy gritando - aclaro algo molesto - Ya me voy, la campana ya sonó

- No escuché nada

- Adiós iwaizumi-san y a usted también oikawa-san - hizo una reverencia y se giró para irse

- ¡Tobio-chan por que no me amas!

- Oikawa cállate