El día ya había acabado, Aquino veía una película, la bebé dormía en la cama de Duxo, era una noche silenciosa, el castaño revisaba constantemente su reloj mientras la hora avanzaba y no había rastros del chico de lentes, Aquino comenzaba a caer dormido en el sofá pero se mantenía firme ante el sueño solo por esperar a Duxo. La puerta comenzó a abrirse, Y la silueta del peli-negro se hizo presente, cuando la luz del interior de la casa lo iluminó, Aquino notó los rasgos que una persona ebria tiene, pero esta vez en su mejor amigo.
— ¡Duxo!, por fin llegas —. Dijo Aquino un poco temeroso de que su amigo reaccionara de una manera agresiva hacía él—. Y estás ebrio... —. Aquino enojado comenzó a regañar al contrario—. ¡No puedo creerlo! —. Gritó — ¡Me mentiste solo para poder ir a una fiesta, tienes una hija! —. Volvió a decir, antes de que pudiera seguir con su regaño Duxo lo calló.
— Shh... no querrás despertar a la niña ¿verdad? —. Habló de una manera picara, algo que el castaño notó de inmediato por lo que fue retrocediendo intentando alejarse del de lentes pero este en cuanto Aquino daba un paso atrás el se acercaba más hasta acorralarlo en la pared.
—¿Du-duxo...? —.Dijo enrojecido pero a la vez intentando no estallar de la risa, ya que Duxo es más bajo de estatura que Aquino, el peli-negro tuvo que pararse de puntas para poder estar a la misma altura que el castaño y poder "intimidarlo".
Duxo ignoró eso, se acercó lentamente al cuello del castaño y plantó varios besos ahí a lo que el castaño gimió un poco, el de lentes volvió mirar al contrario a los ojos mientras se acercaba más y más a su boca apunto de darle un beso, pero en vez de eso Duxo tomó a Aquino de la camisa y lo tiró al sofá, tirándose encima de el castaño y sentándose en el miembro de Aquino mientras daba pequeños saltos sobre este.
— ¿Te gusta? —. Musitó Duxo con una voz ronca y siguió con esa acción hasta sentir como el bulto del pantalón de Aquino comenzaba a levantarse poco a poco.
Aquino cubría su rostro mientras pensaba "si no lo miro no soy gay" varias veces, mientras soltaba pequeños gemidos que al peli-negro comenzaban a encantarle. Aquino sintió como Duxo intentaba bajar su pantalón así que descubrió su rostro y cruzó miradas con Duxo.
— Lo siento, es que me estorba.
Duxo siguió con lo suyo mientras Aquino volvía a cubrir su rostro, el peli-negro tocaba de una manera delicada el miembro del contrario; unos momentos después Aquino sintió la respiración de Duxo en su miembro, el castaño estaba preparado para lo que duxo iba a hacer pero no pasó, Descubrió nuevamente su rostro y encontró a duxo dormido en su estomago, este lo movió un poco, volvió a ponerse los pantalones y cargó a Duxo como una princesa hasta su habitación dejándolo en la cama junto a Jaiden, los miró unos segundos y decidió dormir junto a ellos, abrazando a Duxo.
Yo dije que en esta historia no habría delicios0 así que así se va a quedar uwU.