09.

3.3K 155 10
                                    

Mara:

Me encuentro sentada en mi cama bebiendo un café.

Estoy pensando...

La verdad desde el viernes, me siento distinta.

Rara.

Esto que me pasó con Joe, me hizo cambiar todo.

Y la verdad siento que lo pienso no va salir de mi mente por unos días.

Es que ¿por qué se fijaría en mí?

Él tiene una mala reputación. Y no creo que quiera cambiar a las miles que se folla por día, por mí .

No soy nadie ¿por qué lo haría?

Y por esa misma razón me siento así de rara.

Porque no creo estar al nivel de Joe.

Él es tan... tan... Joe.

Y bueno, yo soy la típica que nadie sabe de su existencia.

Aparte ¿qué va a pensar Hope?.

Somos mejores amigas desde la infancia, no quiero que se lo tome mal.

Quiero volver al viernes, y hacer que ésto no haya pasado nunca.

No me sentiría así.

Necesito tanto a Amelia.

Quiero un simple abrazo y escuchar que todo va a estar bien.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo de pies a cabeza.

Hija ¿te sientes bien?– habló mi madre mientras entraba a la habitación.

¿Por qué preguntás? yo estoy perfecta– mentí. No me gustana mentirle, pero no me quedaba otra opción.

–No saliste en todo el día de la habitación. Aparte es domingo y no quisiste ni cocinar, no sé... galletas– Es una costumbre madre hija, los domingos es nuestra tarde y cocinamos cosas dulces.

Es qué... No, no me pasa nada–

–Hija, te conozco, ¿qué ocurre?–

–No, mamá. No me ocurre nada– mi voz se entrecortó – De enserio...– dije en un susurro.

Mi madre se acercó a mí y me abrazó.

Lo único que quería era eso.

Un abrazo.

Un aliento.

Una muestra de alguien está aquí.

Conmigo.

Unas lágrimas pasaron por mis mejillas y terminaron en la ropa de mi madre.

Siempre voy a estar para tí mi chiquita...–

–Te amo mamá

De a poco me fuí tranquilizado.

Si necesitas hablar, acá estoy–

–Te contaré... solo porque te tengo confianza– mi mamá rió.

te escucho...–

–¿te acuerdas de Hope?–

–si... como olvidarme– una risa salió de mí por el comentario de mi mamá .

Ok, seré más específica ¿Te acuerdas de Joe?–

–El niño simpático... ¡si! – yo reí y ella también...

Bueno, pues ese niño creció... y cambió. Pero... el otro día pasó algo que no sé... Me dejó confundida

–¿Ya no eres virgen? OMG–

–¡No mamá!– me reí a carcajadas.

Es que me besé y me dijo que se sentía bien conmigo

–y ¿cuál es el problema?–

–Él tiene novia. Aparte... ya no es el típico "niño simpático" él cambió

– y si piensas eso ¿Por qué estás mal? No te tendría que importar –

No sabía si decirle la razón principal, es decir, la de mi baja autoestima.

En realidad, el problema principal es... es que me siento mal por... porque no me siento suficiente para él, ni para nadie– mi voz se quebró y simplemente lloré otra vez.

Hija ¿sabes?...  Cuando te vi por primera vez luego de que nacieras, vi a la niña más hermosa y perfecta que mis ojos vieron antes.
Y no lo digo porque sea tu mamá, lo digo como mujer.
Eres hermosa, y no te tienes que sentir menos por nadie, menos por un chico... Y... si de verdad te gusta, tienes que tratar de aceptar que alguien que no sea yo, te quiera.

– Ay, mamá eres la mejor– dije entre lágrimas.

Siempre voy a estar para tí cariño– me abrazó.

Con ella a mi lado sentía que nada iba a estar mal.

A pesar de que tengo a  mis mejores amigas con las cuales vivo prácticamente, la persona que más está conmigo a pesar de todo es ella.

Mi mamá.

El timbre sonó por lo cual ella bajó y yo me puse a ver un poco de mis notificaciones.

Todas eran de mis amigas. Me había ido sin avisar, estaban preocupadas.

Les contesté que estaba bien y al instante me llegó un mensaje del chat grupal que tenemos las tres diciendo que venían a casa.

Le avisé a mamá y ella me dejó.

Llegaron las chicas a casa, saludaron a mamá y subimos a la habitación.

¿por qué no avisas?– dijo Sam mientras agarraba unas galletas que habían en mi escritorio.

Exactamente eso iba a preguntar Dijo Hope– supuse que ibas a estar en casa, como te volviste con Joe–

Mmm, sí... es qué mamá me pidió que venga a casa–

–de hecho Joe preguntó por tí...– Dijo Hope.

– ¿qué preguntó? –

–si nos habías hablado o mandado mensaje, estaba  preocupado

– que..  raro–

Estuvimos toda la tarde juntas... Cocinamos junto a mamá e incluso vimos una película.
.
.
.

𝐞𝐥 𝐡𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐦𝐢 𝐚𝐦𝐢𝐠𝐚 || 𝐉𝐨𝐞 𝐖𝐚𝐮𝐝.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora