- ¡𝔇𝔞𝔡𝔡𝔶 𝔈𝔰𝔠𝔞𝔫𝔬𝔯! [NNT/YAOI]

"Chapitre 07"

Su rostro estaba pegado en ese peludo pecho firme que olía a pino, ese olor varonil que solo el mayor podía darle honor.

Había despertado hace ya media hora encima del pelirrojo que dormía sin perturbaciones; y sinceramente cuando se despertó tenía la mente vacía. Pasó toda esa media hora solo viendo un punto fijo sin moverse para nada, sin pensar en nada. Seguía reiniciándose el cerebro, procesando toda la información obtenida.

Estaba tan ido que de la comisura de sus labios había comenzado a escurrir un poco de saliva, pero los cerró de inmediato y tragó. Ya recordaba todo.

Su cara se tornó rojo tomate mientras millones de pensamiento y emociones comenzaban a juntarse dentro de su pequeña cabeza. Sonrió con una mezcla de nervios y alegría; su corazón le latía como loco hasta llegar a dolerle en el pecho, respiro hondo.

Lo había hecho, había tenido- hasta la palabra le daba vergüenza pero emoción a la vez, había tenido su primera vez. Y vaya primera vez. Eso fue el cielo, ahora le dolía terrible el culo pero a quién le importaba; además había sido con el sujeto que le gustaba aunque todavía le costaba admitirlo. A él le gustaba ese pelirrojo orgulloso, prepotente y dominante, le gustaba con cada fibra de su ser; gustar, porque no lo consideraba amor, no aún.

Sus pensamientos se cortaron cuando el ardor en su trasero se hizo presente fuertemente y por primera vez se percató que la semilla del más grande estaba fusionado con hilachas de sangre que escurrían por sus nalgas. Por todos los cielos, ¿cuántas veces lo hicieron? Él no sabía, no estuvo totalmente consciente la gran mayoría del tiempo.

Acaricio con su mano el pecho de Escanor y contó hasta tres para levantarse. Logró medio sentarse pero a que costó, soltó un gemido lastimero cuando el dolor se intensificó por lo que cerró los ojos y trató de regularizar su respiración más no pudo cuando una fuerte mano lo tomó por la cintura y lo atrajo hacia aquel ser. Subió su mirada y se topó con la penetrante mirada azulada de Escanor.

En sus labios apareció una sonrisa nerviosa al ver al pelirrojo que no apartaba su vista del rubio. El más alto con una mano se revolvió los rojos cabellos luego bajo a sus ojos donde los rasco un poco para luego finalizar pasando por su bigote siendo peinado por sus dedos. Fue en ese momento en que Meliodas volvió a ver al ser más caliente en la faz del mundo. Escanor recién levantado con su pelo revuelto, sin ropa dejando ver sus marcados y muy bien formados músculos, cubierto con una ligera capa de pelo rojo por todo su cuerpo, contrastando con lo acanelada de su piel. Aquella sábana que le obstaculizaba la vista a aquellos terrenos prohibidos. Y para mejorar, varios rasguños marcándole la piel, recordatorio de lo ocurrido en la noche pasada.

La verdad es que Meliodas pensó en que Escanor con una hacha y cualquiera pensaba que era un sexy leñador con todas las aptitudes de volverse striper.

Estiró su mano hasta llegar al pómulo del mayor, lo acaricio con suavidad, utilizando solo la yema de sus dedos. Tanteando la piel bajo su tacto, fue recorriendo hasta sus belfos; donde con timidez pasó su dedo índice. Observó atentamente esos labios y sin poder evitarlo se abalanzó hacia ellos.

Solamente chocándolos entre ellos, sin llegar a algo más, suspiro encantado por lo bien que se sentía aquello, incluso Escanor estaba recorriendo su espalda con suavidad.

Meliodas se sintió en las nubes, su mente voló pensando que parecían una pareja de enamorados que recién experimentaban la intimidad juntos. Aunque la cruda realidad fue que realmente solo fue el deseo carnal y un "castigo" por parte del pelo rojizo.

Y entonces pensó: ¿Se me hubiera llegado a comportar... estaría al lado de este hombre de la misma forma en la que estoy ahora?

No se pudo responder su pregunta mental debido a un sonido molesto de la puerta. Se alejó lentamente de aquellos labios y sonrió para luego darles una lamida de gato.