Alas en Libertad (EN PAUSA)

XI

Apenas abrí los ojos me encontré con varías miradas puestas sobre mi, pero hubo una en especial, Aru me estaba tomando de la mano mientras sentía que uno de esos deseos apartaba cabellos de mi cara.
Sonreí levemente, ahora que me daba cuenta estaba tirada en esa mesa, la primera vez que desperté aquí.

- ¿Estás bien?- Pregunto Eren acercándose.

- Si.. Solo me mareé- Contesté enderezando me.

- Vaya que me hiciste que Levi se comiera sus palabras- Río Hanji.

Sonreí, eso quería decir que me quedo.

- A propósito, ¿Dónde está el?- Pregunté mientras bajaba de la mesa.

- Sigue tirado en el campo de entrenamiento, no quiso que lo levantarán de hay- Contesto Erwin quien entraba a la sala.

- Creo que iré con el- Solté algo culpable.

- ¿Te acompaño?- Pregunto Amaru.

- No yo puedo ir sola- Contesté.

Salí del lugar hacía el campo de entrenamiento, mientras caminaba por los pasillos no puede evitar robarme las miradas de algunos cadetes que en encontraba por hay. Algunos murmuraban cosas que no podía evitar escuchar, “Escuche que ella fue la que le partió el trasero al capitán Levi”, “Dicen que hay que tenerle miedo”, “Sabias que esa chica le ganó al soldado más fuerte de la humanidad” y más mierda de esa.

Al llegar al campo de entrenamiento, o más precisamente donde peleé con Levi, lo encontré hay tirado, se me formó una sonrisa.

- ¿Todavía sigue aquí?- Elevé la voz caminando hacía el.

- ¿Que esperabas de la golpiza que me diste?¿Que me parará y fuera correr, saltando, brincando o algo por el estilo?- Pregunto sarcástico mientras me miraba de reojo.

- Ya que lo menciona de esa forma, no sería mala idea- Me paré al lado de el.

- Tsk.. Mocosa- Gruño molesto.

- Vamos levante se, no fue para tanto- Me incliné hasta su altura con una sonrisa.

- Quiero ver la noche- Contestó el.

Mire hacía arriba, de alguna forma me daba alegría pero por otro lado, me causaba un nudo en la garganta.

- Entonces yo también la veré- Me acosté a un lado de el.

- No estás obligada hacerlo- Reclamó con fastidió.

- ¿Hay algún problema en que YO quiera hacerlo?- Pregunté acomodando me de lado para verlo de perfil.

- Me hace sentir que lo haces para molestarme- Contestó sin apartar su mirada del cielo.

- Siempre tan terco- Pensé.

- Aparté, no es malo tener compañía- Contesté.

- No me gusta la compañía, suficiente tengo con la cuatro ojos y cejotas- Reclamo.

- No te vas a volver más débil porque tengas compañía- Contesté enderezando me.

- Tu si lo hiciste..- Escuché una voz en mi oído.

Tragué hondo, conteniendo unas ganas de llorar inmensas, detestaba que esa voz siguiera hay después de tanto que ocurrió...

- ¿Te encuentras bien?- Preguntó esa grave voz.

- Si.. Es solo que quiero ir a descansar, mañana será un día pesado- Contesté levantando me.

Más que descansar necesitaba desahogarme, ahora necesitaba un abrazo de ese animal, lastima que perdí esa campana si no el estuviera ya aquí.

- Descansa cadete- Dijo el.

- ¿Eso quiere decir que le golpiza te ayudo a darme el puesto?- Pregunté burlona.

- ¡Ya lárgate a dormir!- Reclamó.

No puede evitar reír, me fui a mi habitación, al entrar lo primero que ví fue a Aru tirado sobre la cama con un libro en las manos.
Apenas me vio entrar apartó su vista de su lectura pero yo lo ignore, solo... Me acosté, no sé si tenía ganas de llorar o de sonreír.

- ¿Que pasó?- Preguntó el.

- Me voy a volver loca, eso es lo que pasa- Me pase las manos por la cara.

- Dime algo que no sepa- Dijo sarcástico.

Me enderece para apoyarme en un brazo y voltear a verlo con cara de pocos amigos.

- Oye descuida... Tienes a Eren, Mikasa, Armin, Hanji, Erwin y no menos importante me tienes a mi- Dijo dejando el libro de lado para acercarse y tomar mi mano.

- Eso... Eso lo sé, pero es que... Su voz, si maldita voz es lo que me atormenta...- Exclamé con una notable preocupación.

- Yo sé que tú lo lograrás- Me rodeó con sus brazos para confortar me.

Simplemente cedí, unas cuantas lágrimas... Bajaron por mis mejillas, poco a poco nos fuimos dejando caer hacía atrás, no me di cuenta de en que momento me dejé llevar y terminé dormida.