Capítulo 2 - El pato

15 3 2
                                    


Tras recoger al pato, Melion volvió a casa con su madre. Su padre y su hermana se sorprendieron al ver al pato, ya que había muy pocos en este mundo. Melion estaba muy feliz de tener uno. Solo dos niños más de su clase tenían. El pato era el único ser vivo visible al ojo humano sin incluir a las personas y las plantas de este planeta. La familia de Melion estaba convencida de que el pato ayudaría a Melion a superar su inquietud. Melion, por su parte, apenas se acordaba de su inquietud, pero seguía preocupado por si el pato no llegara a curársela. A nadie le gustaría ver criaturas que eran llamadas "animales". Si un humano de este planeta sufría una inquietud durante más de un año, es decir 400 días, ste podría llegar a tener alucinaciones y empezar a ver animales. Los animales eran criaturas que se movían y vivían, se comportaban como seres vivos. Pero en realidad, no existían. Solo si tenías una inquietud durante mucho tiempo podías llegar a verlos. Los expertos los habían clasificado en distintos tipos. Melion se seguía acordando de cuando era pequeño y vio a una señora por la calle que gritaba: "¡Ahh!, ¡un monstruo, es enorme, es súper alto, creo que me voy a morir!" Horas después salió en la tele que esta señora se había escapado del PIG y llevaba sufriendo una inquietud durante más de 600 días. Tras hablar tranquilamente con la señora, los expertos afirmaron que habían visto un animal clasificado con el nombre de jirafa. Pero ahora mismo Melion estaba más concentrado en su nuevo pato, un ser vivo muy importante en este planeta. El pato podía hacer muchas cosas, entre ellas volar, era algo mágico. Era el único ser vivo de este planeta capaz de hacerlo. Además, también era muy suave y reconfortante, se usaba para varios tratamientos como el que tenía Melion. Los pacientes con este problema abrazaban al pato como si fuera un peluche y eso les solía ayudar a superarlo. Tras pasar unas horas con el pato, Melion pensó para él un nombre, lo llamó Segismundo, le puso ese nombre porque le recordaba a Segi, uno de sus amigos y le añadió mundo porque tenía una gran pasión por el. Antes de sufrir su inquietud, solía estudiar misterios sobre su planeta y sobre el mundo, le encantaba esto y quería saber más de él. Finalmente pensó que Segimundo no quedaría muy bonito, no le veía la concordancia entre estos dos nombres; entonces, lo que hizo fue añadir una s entre las dos palabras, lo que hizo que sonase mucho mejor, le contó rápidamente el nombre que había elegido a su hermana, llamada Hilda. A su hermana le pareció súperbonito aunque dijo que le quedaría mejor Peter Pan. Hilda estaba obsesionada con ese nombre. Hacía poco que había conocido a un chico llamado así y desde entonces quería que todos se llamasen así. Melion sospechaba que Hilda estaba enamorada de Peter Pan, pero no solía decirlo mucho ya que se consideraba una falta de respeto decir que alguien estaba enamorado si no eran pareja. Solo se podía, si de verdad dos personas eran una pareja.

Tras hablar con Hilda, Melion fue directo a contárselo a sus padres. A su madre, también la pareció un nombre muy bonito apropiado para el pato, pero su padre, no le acababa de convencer ese nombre, dijo que no era un nombre feo, al contrario, le gustaba ese nombre, pero no le acababa de gustar para un pato. Finalmente como todos estaban de acuerdo con ese nombre no podría negarse ya que no serviría para nada, la mayoría ganaría y como solo era durante unos meses acepto.

Después, Hilda se fue rápidamente a su habitación a aprenderse su lección. Ella también iba a tener unos exámenes bastante importantes, no tanto como los de su hermano, pero los suyos decidirían en qué categoría de estudiantes iría. Tenía cinco años y a esa edad empezaban los estudios medios. Hasta los 5 años solo estudiaban tres cosas importantes que decidirían su nivel de estudios medios: la organización del año (días de la semana, meses...) los números y los seres vivos de este planeta (patos, humanos, microorganismos y plantas). Esto era todo lo que Hilda se tenía que saber, según la nota que sacara en el llamado "Examen básico", que era la prueba que hacían al final del curso básico. Ahora mismo estaba estudiando los días de la semana y para ello necesitaba la ayuda de su hermano, así que lo llamó y juntos empezaron a revisar. 

Una vida sin destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora