Quédate

Capítulo 11

Pov de Natsu

Esto no pude estar pasándome a mí, me quede mirando el anillo, y los papeles, los puse ambos encima de la mesa, y tome la ropa de Lissana, estoy hecho una furia, como pude ser tan estúpido, yo mismo arruine mi matrimonio, subí las escaleras, y le lance su ropa a Lissana.

Natsu: Vístete.

Lissana: Pero, si podemos disfrutar un poquito más, mira que la estábamos pasando muy bien.

Natsu: Vístete Lissana.

Lissana: Ven, déjame darte un poco de placer.

Natsu: QUE TE VISTAS JODER, que no lo entiendes, crees que si hubiese sido por mi propia voluntad me hubiera acostado contigo, crees eso? No, eso no hubiera pasado, ahora perdí al amor de mi vida, perdí a la persona que de verdad amo, y todo eso por tu culpa, que no te basto, por Dios, tienes un hijo Lisanna, tienes un jodido hijo, entiendes la gravedad de ese asunto, acabas de arruinar mi vida, cuando la tuya va perfecta, a caso no te das cuenta? tienes todo lo que alguien quisiera tener, tienes un buen empleo, un hombre que te ama, un hijo, lo tienes todo Lissana.

Lissana: Pero no te tengo a ti -una lágrima cayó de sus ojos- pero no te tengo a ti.-volvió a decir-

Natsu: Lissana, hace tiempo me perdiste, hace tiempo nos perdimos, ya no hay un nosotros, yo amo a otra persona y ese amor nunca va a cambiar, nada, ni nadie lo va a hacer cambiar, porque aún Lucy muriendo, mi corazón se iría con ella a su tumba, porque ella es mi vida.

Lissana: Qué tiene ella que no tenga yo?

Natsu: Ella es autentica, única, su forma de ser no se compara, es sensible pero al mismo tiempo es la persona más fuerte que conozco, le dan miedo muchas cosas, sin embargo, es la persona más valiente que he visto, y ella simplemente me hace querer ser mejor, porque yo no la merezco, sin embargo, ella me eligió a mí, pero ya ella se ha ido, y tendré que aprender a vivir con ello, ahora por favor, te voy a pedir que te marches, necesito pensar.

Lissana se fue hecha un mar de lagrimas, mientras salia por la puerta me susurro:

Lissana: Espero que algún día puedas perdonarme.

Natsu: Ya te perdone Lissana, Ya te perdone.

Baje al Gimnasio que Lucy y yo habiamos instalado para tener más privacidad, me puse frente al saco de box, y empece a golpearlo, empece despacio, pero luego la furia me invadió, esa furia se mezclo con lagrimas, y empece a golpearlo más fuerte, sentí como mis nudillos eran lastimados, pero eso no se comparaba con el dolor que estaba sintiendo en mi corazón, hasta que llego Gray y me abrazo por la espalda para contenerme, no pude hacer otra cosa que abrazar mis piernas y llorar como niño, mientras mi mejor amigo estaba ahí, ese día la deje ir, deje ir al amor de mi vida, y con ella yo también me fui.

Luego de un momento, ya más calmado le conté todo lo que paso a Gray, el solo asentía y se quedaba callado, analizando todo lo que le estaba diciendo.

Gray: Entonces esto fue lo último que Lucy te dejo? -tomando el sobre y abriéndolo-

Natsu: Si.

Gray se quedo callado un largo tiempo, mientras miraba el sobre y me miraba a mi, no sabia que contenia ese sobre, pero por la cara de Gray sabía que no era algo bueno.

Gray: Natsu creo que tienes que ver esto, estaré en el patio por si me necesitas.

Tome el sobre en mis manos y saque su contenido, era una carta escrita de una forma muy infantil, la observe bien, y empece a leerla.

Papito, si como lo oyes en 6 meses más estaremos juntos tu y yo, mamá me ha dicho que eres muy guapo, y que espera que yo saque tus ojos, ya sabes como es mamá, papá te amo desde ya, espero que tu también nos ames a mi madre y a mí, espero verte pronto papá.

Y esa noche lloré, lloré porque los perdí a ambos, recuerdo las palabras de Lucy, olvídate que existimos, ni siquiera sé a donde se fue, ella se fue, y cuando se fue dejo un vació grande dentro de mi.

Pov de Lucy

Azafata: Pasajeros con destino a México, ajusten sus cinturones en poco tiempo estaremos llegando a su destino.

Hogar dulce hogar, aborde el primer vuelo con destino a México, era lo mejor para mi, y para el bebe, me encargare de criarlo sola, y de suplirle todo lo que le haga falta, nada le hará falta a mi bebe, haré las cosas como tuvieron que ser desde el principio, sin Natsu presente, y yo sola con ayuda de mi madre, que nunca me ha abandonado en ninguna de las etapas de mi vida.

Tome un taxi, y llegue directo a casa de mis padres, gracias a Dios mamá era la única que estaba en la casa, no estaba lista para enfrentar a mi padre y a mi hermano, irían a Buenos Aires, y castrarían a Natsu.

Layla: Lucy, mi niña.

Mamá me dio un abrazo, uno de esos abrazos que te dicen que todo va a estar bien, que nada se va a salir de control, y sabía que a su lado todo iba a estar bien.