❝ᴡɪsʜ ʏᴏᴜ ᴡᴇʀᴇ sᴏʙᴇʀ❞ // sᴛᴇɴʙʀᴏᴜɢʜ //

ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ ᴠɪɪɪ: sᴇɴᴛɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ʏ ғɪɴᴀʟᴇs.

Stan se detuvo mirando al suelo, parecía nervioso.

Pero Bill sabía muy bien bien que no lo estaba, Stan estaba avergonzado. Sus mejillas rosadas y su postura encorvada lo delataban, parecía un niño que hizo algo malo.

- ¿P-por qué?

- ¿Qué? ¿De qué hablas?

- ¿P-por qué no me hablaste? ¿Por qué n-no quisiste que E-eddie dijera? ¿Por qué me i-ignoraste Stan? Sólo q-quería hablar contigo.

Stan se relamio los labios con miedo de hablar. Se habían secado.

- Vergüenza.

- ¿Qué?

- Sentía vergüenza, y decepción, y miedo... De mí, mierda, ¿No podía ser un chico normal? Sólo algo de cerveza y hubiera tenido sexo como cualquier adolescente de diecinueve años. Hubiera hablado con todos, y a pesar de haber tenido que despertar con ganas de morir al menos habría podido tener una noche normal.

Bill frunció el ceño, y Stan no se molestó, en parte sentía que se lo merecía.

- ¿No estás e-e-enojado conmigo?

Stanley soltó una carcajada y eso terminó por confundir más a Bill.

- Claro que no, te eché de mi casa porque... Tenía vergüenza de lo que pasó, pensé que te acordarías y eso me asustó.

- ¿Y si me acordaba? D-de todas formas ya sabes que estoy c-completamente enamorado de ti, y solo me hubiera gustado ir a d-disculparme...

- Estaba asustado, ¿Sí? Me dolió verte borracho y haciendo eso, ¿De acuerdo? Era extraño, nunca había visto a alguien así y que viniera de ti solo me alteró más.

Bill se sintió bastante mal por eso, prefería mil veces que Stan estuviera enojado con él antes de que él hubiera sido la causa para que el judío se sintiera así de asustado.

Él sólo quería que su amado se sintiera bien y confiado, no que por su culpa estuviera nervioso.

- Pudiste haberme dicho que no bebiera, y así no te hubiera hecho daño.

- Sería egoísta de mi parte, pues después de todo yo no soy tuyo y tú no eres mío.

Pero Bill quería ser de Stan.

Y Stan quería ser de Bill.

El sentimiento era viejo, pero no era débil.

- ¿Stan?

- ¿Sí?

- ¿Te puedo besar? ¡Y-ya no estoy borracho! ¡No voy a c-c-cometer otra locura!

Bill se estaba empezando a avergonzar, pero no quería retirar la pregunta.

- No quiero que te decepciones si beso mal...

- Ahí vamos de nuevo, ¿D-decepción? ¿Vergüenza? ¿P-por qué lo estaría?

- Lo haré mal, Bill, no confío en poder hacerlo bien, ¡Sólo he besado a alguien una vez! ¡Y fuiste tú borracho! Será extraño...

A Bill le hubiera gustado hablar de lo hermoso que ese chico era, y como si lo amaba de verdad, no le importaría si besa mal.

Cómo en las noches soñaba despierto en todas y cada una de las sensaciones que tendría al besar al judío, al tocar sus rosados labios, al tener su cara tan cerca que sus respiraciones se juntaran.

Pero Stan no lo dejó, pues plantó en sus labios un tierno y corto beso que lo dejó callado.

- Pero antes necesito tu opinión. Ahora, ¿Qué tal? ¿Fue malo?