La pelea

220 25 81
                                    

Habían pasado unas 2 semanas desde que estuve en el hospital, la ruptura de mi brazo derecho no era tan grave como todos imaginaban asi que sali del hospital solo con indicaciones de no hacer mucho esfuerzo con este, ahora por las noches no podre pensar en Simón... Ahre, ¿Pensaban que me la jalaba pensando en Monchi? no, es que escribo poemas para Simón...Sí...Poemas...¿En que estaba?, asi mis rupturas, la que si era un poco más grave era la de mis costillas, no podría correr, practicar deporte, caminar largas distancias, etc, hasta dentro de 6 u 8 semanas, no estaba tan mal después de todo, Podria hacerme el enfermito en mi casa y mi mami me consentirá como el rey que soy, ok no me pase de verga, hoy 20 de octubre del 2019 regresare al colegio, a ver si los pendejos de mi salon me nota, espero que no.

Simón pasaría por mi para llevarme al colegio, se que se estarán preguntando, ¿Villa, que pasó después de que se besaron?, bueno, la respuesta es fácil, no nos volvimos a besar, todo siguió siendo igual, solo que ya había sentido los dulces labios de Simón contra los míos, jejeje, bueno, aunque Simón había comenzado a ponerme dulces apodos.

De repente mi celular sonó, era una notificación de Whatsapp, abrí la notificación y eran dos mensajes, uno de mi tia con una de sus cadenas "de que si no pasas esto a 30000 personas vendría shrek a jalarte las patas" y otro del amor de mi vida Monchito mi amor. Por supuesto abrí el mensaje y lo leí.

~Crushito BB~

─Buenos dias, mi bello solesito, mi niño hermoso, mi razon de ser y no ser, mi hermoso Juan Pablo Villamil Cortés.❤❤❤

jeje, buenos dias Monchito, ¿Ya llegaste a mi casa?─

─Asómate pequeño.🥰

Me asomé por la ventana de mi cuarto que daba a la calle y ahí estaba él, apoyado en su auto azul marino, mirando hacia su celular con una sonrisa en su rostro y con las mejillas levemente sonrojadas.Rápidamente tome mi mochila, baje las escaleras, y salí de mi casa rápidamente, Simón levantó la vista y sonrió alegremente.

─Mi pequeño.-camino hacia mi y me cargo, para luego darme una vuelta en el aire.

─Monchi.-rei inocentemente.

─¿Como amaneciste hoy?, claro aparte de hermoso.-preguntó dejando de cargarme.

Yo me sonroje por su comentario y rei un poco antes de contestar.

─Muy bien Monchi, ¿Y usted, como amanecio?

─Con ganas tremendas de abrazarlo.-dijo y seguidamente me abrazo fuertemente.

─jaja Monchi, que tierno es usted.-correspondi su abrazo.

─Bueno.-se separa del abrazo.-vamos ya al colegio.

─Me parece muy bien Monchi.

Nos subimos al auto mientras hablábamos de las cosas del hospital.

─¿Recuerda a la tipa que me intentó ligar?.-pregunte riendo.

─Si, la recuerdo.-dijo Simón encendiendo el auto.-Creo que después de lo que dije se salió de trabajar.-rió por lo bajo.

─Hay Moncho.-negué con la cabeza.-¿Estás marcando territorio o que?

Simón no contestó, pero al mirarlo note que estaba muy sonrojado, cuando noto que lo mire negó con la cabeza riendo.

Causa Perdida || Original VersiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora