15 - Mereces todo y más

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•Piper•

Toda la noche estuve sintiendo ansiedad por tener a Alex tan cerca de mí.
Es como cuando sabes que tienes un delicioso pastel en el refrigerador y mueres por ir a comer una rebanada. De la misma manera estaba ansiando comerme una rebanada de Alex.

Con mi dedo índice temblando acaricio su hombro y me aseguro de bajar el tirante de su blusón de seda. Su hombro desnudo me hace morder mi labio, y no estoy segura si ya puedo hacer lo que pretendo, o si debo esperar alguna medida de tiempo para ello, pero no quiero pensar en eso.

*Piper: -Alex...- Susurro pero ella ni siquiera se mueve. -¿Está bien que te haga el amor justo ahora? Se supone que debo ir al trabajo en...- Volteo hacia el reloj de su mesita. -Una hora y media...- Sigue sin haber respuesta y creo que me lo tomaré como un sí.

Acaricio su espalda en un suave masaje y su piel se eriza sintiendo mi tacto.
Beso su hombro de nuevo y luego su mejilla, mientras mi mano va en caída libre hasta su trasero.
Lo palpo con gusto y sin un gramo de pudor, aunque estoy segura de que debo estar muy sonrojada. La sensación de tocarla es increíble. No me había dado cuenta de cuánto la deseaba hasta ahora que estoy acariciándola así. Sintiéndola mía.
Doy un apretón leve y ella se mueve solo para darle una nueva ubicación a su pierna que se flexiona un poco, haciendo que su trasero se levanté más.
Acaricio su muslo despacio sintiendo la suavidad de su preciosa piel de porcelana y luego vuelvo a su trasero, acercándome más a ella para mordisquear su hombro.
De pronto sus ojos adormilados me miran con burla.

*Alex: -Buenos días, señorita traviesa...- Saluda.

*Piper: -Buenos días, novia...- Me muerdo el labio y ella se gira sobre su costado para estar frente a frente, pero mi mano se niega a despegarse de su trasero.

*Alex: -Eso suena increíble...- Ronronea y se acerca más a mí mirando mis labios con detenimiento.

*Piper: -Te amo tanto, Al...- Suspiro y mi mano sube un poco a rasguñar su cadera.

*Alex: -Yo también te amo... Pero estoy impaciente de lo que sé que pretendes hacerme...-

Ni siquiera tengo idea de cómo empezar, solamente creo que me sentí valiente de inmediato y ahora estoy casi temblando por no saber qué hacer.
Ella me mira con impaciencia y en cuanto su mano va a acariciar mi mejilla comienzo a calmarme un poco.
Acaricio su costado hasta la altura de sus pechos y entonces los observo un poco para luego volver los ojos a los de Alex, que sonríe aún con la burla pintada en su rostro.

*Alex: -Puedes tocarlos, sé que también te extrañan...- Una sonrisilla sale de mí pero en seguida ambas manos están pegadas a sus pechos amasando y presionando, mientras la respiración de Alex se agita y ella se remueve un poco desesperada por mi toque.

Me acerco más y la hago recostar sobre su espalda, para luego subir sobre ella y levantar la fina tela de seda que la cubre, lentamente y tratando de acariciarla conforme la levanto.
La saco por su cabeza y aquí está, su torso desnudo me vuelve loca, es perfectamente hermosa y mis manos ansían por recorrer cada centímetro. Y así lo hago, mientras la beso en los labios, mis manos hacen recorridos por su abdomen y sus pechos deleitándose con la suavidad de su perfecta piel pálida.
Beso su barbilla y voy a su cuello con hambre, lamo y succiono un poco su pulso. El sonido que sale de su boca me hace mirarla con asombro.

*Piper: -¿Estás bien?- Ni siquiera responde. Sus manos se aferran a mí atrayéndome de nuevo a ella. Mis labios se deshacen bajando por su garganta hasta su esternón, y luego paseo la lengua por sus clavículas.

INEVITABLE CONEXIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora