Al cruzar el umbral, aquel mundo te recibe y te asfixia, te envuelve como una manta fina y delgada intentando inútilmente guarnecerte del frío y la tempestad.
El miedo se siembra en los corazones, sienten la pérdida cerca, los que habitan el lugar se cubren de acero para no sentir, no llorar, como autómatas van de un lado a otro con sus batas blancas, pero la asfixia los atrapa y sin pensar en ello continúan su día sin vacilación, ella nos mira, ella es vigilante, espera con paciencia un soplo de debilidad para llevarnos al oscuro abismo y allí en su reino, dormir por la eternidad.
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Monstruos a la Luz
AcakUna hermosa y disonante reunión de escritos que describe un mundo plagado de seres míticos y fantásticos; dioses, ángeles y héroes en un mundo en el que el tiempo distorsiona las formas y colores, creando un vacío, hasta el punto de llevarte a forma...