Doce

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No puedo describir lo que realmente siento cuando lo veo. Él es el ser más perfecto de la tierra y no exagero. Y es que todo él es una preciosura que no puedo dejar de ver.

Sus ojos tienen un brillo especial y cuando sonríe ¡Dios mío, esa sonrisa! hace que mis piernas tiemblen con tan solo verla.

Me tiene cautivada por completo y en persona ni siquiera hemos cruzado más de dos palabras. Sin embargo, sé que lo mejor para ambos es ver y callar. Él no es para mí, es imposible que una persona como él se fije en una persona como yo.

No espero más, de hecho, no espero nada, únicamente mirarlo de lejos, recibir sus "Hola" en las mañanas y sus sonrisas cálidas por la tarde.

No espero más, sólo las conversaciones casuales y no tan constantes que tenemos por mensajes.

No espero demostraciones de afecto, no espero conversaciones continuas, no espero largas charlas en persona, no espero nada. Porque seamos honestos, él jamás jamás se fijaría en alguien como yo.

Todo lo que escribí mientras él no me mirabaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora