i met a god; pjm 🌱

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Toda la casa se encontraba rodeada de policías, patrullas, bomberos y sirenas, cintas de restricción, yo me encontraba inconsciente en la parte de abajo del gran árbol que yacía más de 100 años en frente de casa, todo paso tan rápido.

Se preguntarán ¿porqué si se supone que estás inconsciente nos cuentas todos esto?, bien comenzaré a relatar todo lo que ha pasado a mis cortos 17 años.

Choi Van chica de 17 años nacida en Busan, desde los 15 años comencé con problemas de asma, si soy una chica asmática, no creen que es algo sorprendente!, tan joven y tan enferma, tengo a mamá y a papá y mi hermano mayor Choi YeonJun, ellos se preocupan tanto por mi, a veces siento que soy solo una molestia más, una que debería dejar de estorbarles, mi hermano tiene un gran futuro y no espero que cargue con una chica asmática como su hermana toda su vida.
Desde hace poco comencé un tratamiento y creo que hasta ahora todo va muy bien controlado, realmente espero seguir así de bien.

Ahora regresemos al futuro... veamos, me encontraba sentada en una de las ramas de aquel árbol que había sido testigo de muchas cosas junto a mi hermano y conmigo, aquel que nos había brindado tanto calor en todos este tiempo.
Estaba completamente relajada oyendo cómo los pajarillos cantaban, como el aire chocaba contra mi cara siento este tan refrescante, observaba como el sol iba perdiendo su brillo para brindárselo a la pequeña luna, una relación tan linda, una que me hacía querer llorar por el simple hecho de querer tener un amor tan puro, uno que me brindara su luz cuando yo la necesitara, un amor de ensueño, pero claro que ilusa IBA A MORIR EN POCO TIEMPO y tanto me gastaba el tiempo en pensar esas tonterías.

Estaba tan sumergida en mis pensamientos que no me di cuenta que la rama en la que me encontraba sentada no era lo suficientemente resistente para aguantar mi peso, tal vez aquella daba señales de que pronto se rompería, pero claro yo nunca los escuché, cuando me retiraba por fin de mi lugar la rama comenzó a hacerse más inestable y ahí el miedo me inundó, con un salto podría morir si me quedaba ahí igual moriría, en un movimiento rápido y delicado retrocedí apoyándome en un hueco al igual de inestable y viejo que todo el árbol, y ahí es donde todo comenzó a hacerse oscuro, mis gritos hacían ecos en las paredes del hueco árbol.