La mente maestra

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La historia pertenece a Sablesilverrain en AO3. Los personajes son de JK Rowling. La traducción es mía.

Historia con contenido explícito, proceda con responsabilidad.

*.*.*

Harry terminó de leer la nota de Tom y sonrió, doblándola y deslizándola en su bolsillo. Se puso de pie y caminó hacia el lugar donde los gemelos estaban sentados a unos pocos metros y se inclinó entre ellos para hablar a ambos a la vez. —Después de la cena, ustedes dos y Lee necesitan reunirse conmigo en la Sala de los Menesteres —les susurró.

Ambos asintieron de acuerdo, y Harry les dio una palmada en el hombro.

—Buenos chicos. Agradable charla. Los veo allí —terminó con ligereza, luego regresó a su asiento. Se encontró con la mirada de Neville y sonrió—. Tú y Draco necesitan venir conmigo a la Sala de los Menesteres después de la cena.

Draco sonrió. —¿Noticias de Tom? —preguntó suavemente.

—¡Shh! —chistó—. ¡No todo el mundo necesita saber eso! —siseó Harry.

Draco puso los ojos en blanco. —Sí, ahora le preocupa ser escuchado — murmuró con acidez.

Neville se rió suavemente. —Estaremos ahí.

Ginny dejó su papel sobre la mesa y se levantó.

—¡No lo puedo creer, Harry! —exclamó—. ¡Sabías lo que sentía por ti, y nunca me dijiste que estabas incluso pensando en aparearte! ¡Pensé que éramos amigos! —Ella gritó a varios metros de distancia.

Harry la miró confundido.

—Um, bueno, realmente no lo somos —dijo vacilante, sabiendo que no había forma discreta de darle la noticia—. Sé que te enamoraste de mí, y realmente nunca desapareció, pero sólo Ron y los gemelos son amigos míos. ¿Por qué te diría con quién planeo estar? —Sacudió la cabeza—. No eres mi amiga, ni mi madre, ni mi guardián. Eres una chica con un enamoramiento, y si le das tiempo, pasará. Si lo permites —dijo suavemente—. En el fondo, tenías que saber que nunca íbamos a terminar juntos porque sabías que soy un Omega. Siempre estuve obligado a elegir un Alfa.

La cara de Ginny se arrugó y salió corriendo del Gran Comedor, llorando en voz alta todo el camino.

Ron suspiró, sacudiendo la cabeza. —Ella lo superará eventualmente. No te preocupes, no es una amenaza —murmuró.

—¡Sin resentimientos, Harry! —Fred gritó.

—Sí, nunca la alentamos de ninguna manera, y es mejor así —agregó George.

—Ella podría evitarte para siempre después de enterarse de la noticia y de la manera en que se puso —Fred agregó en un tono esperanzador.

Harry se rió entre dientes. —Bueno, en cualquier caso, he terminado. —Miró a sus amigos a su alrededor—. ¿Ya hemos terminado?

Draco, Neville y Ron se pusieron de pie, asintiendo.

—Entonces, ¿qué decía la carta? —Ron preguntó mientras el grupo se dirigía a clase.

—Debo reunir los Omegas que espero que ayuden a Tom y a mí a presionar por los derechos Omega y hacerles saber quién es el cerebro detrás de los planes. Obliviarlos si no pueden manejarlo. —Harry se encogió de hombros.

Ron asintió. —Sabes —señaló amablemente—, creo que los gemelos te sorprenderán. Son buenas personas, por lo que no les gustaría la tortura y el caos —bueno, no la parte de la tortura—, pero en lo que respecta al plan para ayudar a Omegas, creo que estarán bien ayudándolo. Si juega bien sus cartas, incluso puede obtener dos nuevos seguidores leales. Dependiendo de cuál sea su el juego final, por supuesto.

CruzadaWhere stories live. Discover now