Señor Alegría Y Señorita Amargura (actualizaciones lentas)

6. ¿Qué mierda paso ayer?

No pude evitar cerrar los ojos al segundo de abrirlos, jamás me había dolido tanto la cabeza como hoy, sentía el martilleo en mi cabeza como si me pegaran con un martillo en mi cráneo, y me dolía el estómago, además ¿Qué era ese horrible olor? Lentamente abrí mis ojos y con mis manos evite que entrara la luz

-perdón, las cerré pero se sigue filtrando la luz- aunque la voz era baja me hizo estremecer, se sentía como gritos

Lentamente me acomode en mi cama, todo mi cuerpo palpitaba y sentía el dolor correr por mis venas, me frote los ojos y mire a mi derecha, allí, en mi mesita de noche, había una bandeja con un vaso con jugo de naranja y una pastilla, a mi izquierda estaba Carter con la misma ropa de ayer mirándome preocupado, ¿Qué diablos había pasado y por qué no recuerdo nada?

-¿Estas bien?- me preguntó preocupado, negué con la cabeza reposando esta contra el marco de la cama

-¿Qué paso?- pregunte lentamente, inclusive hablar me dolía

-bueno, alguien puso algo en tu agua y te volviste loca

No, dios mío, por favor que no haya cometido ninguna estupidez

-dime que no la cague- susurre tapándome la cara con las manos

-ahora no importa- me tranquilizo acariciando mi hombro, pero una pregunta no me dejaba estar tranquila, rondando por mi cabeza- mejor tomate la aspirina, aunque no lo creas hace milagros

-¿Qué haces aquí?- pregunte tratando de ser suave pero creo que mi tono de voz salió muy fuerte

Carter sonrió y me señalo la pastilla con la cabeza, rendida, al notar que él no hablaría hasta comerme la condenada pastilla, la tome y con un sorbo de jugo me la pase

-¿Y bien?- dije mirándolo, mi expresión seria tratando de verme impotente pero él parecía divertido

-enloquecerás- afirmó levantándose de la cama, lo mire con una ceja levantada, esto no era divertido

Pensaba levantarme e ir detrás de él pero el dolor era demasiado fuerte, cerré los ojos y una imagen apareció en mi cabeza, como un flasback, de mí bailando en una mesa con varias personas a mí alrededor.

Abrí tapidamente los ojos, y me acomode de golpe nuevamente, cosa de la que me lamente al sentir el dolor palpitar

-¿Carter, qué diablos haces aquí?- pregunte cuando entró con un sándwich y una taza de chocolate

-Dylan me dijo que estabas del pedo, y sería mejor llevarte a casa pero que no sabía dónde vivías y era imposible razonar contigo- tome la comida y lentamente comí ¿Él ya habría desayunado? Hum, no me importaba, no le pedí que viniera- tu mama o estaba muy feliz o…temó por ti querida

-oh no- susurre y como si hubiéramos convocado al diablo la puerta se abrió de golpe y ahí estaba, la mujer que me pario

-hola linda- dijo con voz extremadamente dulce, sus ojos tenían maldad en ellos y ahora estaba preocupada- Carter, cariño, gracias por acompañar a Jamie toda la noche y cuidarla pero es mejor que vayas a casa, tus papas deben estar preocupados

¿Él se había quedado toda la noche? Eso…wow…eso era lo más lindo que jamás habían hecho por mí, jamás me había sentido tan mal por tratar a una persona como lo hago, tal vez él no merecía mi odio, tal vez él no era tan hijo de puta como los demás seres humanos. Vi, en la expresión de Carter aparecer una sombra de dolor cuando mama menciono a sus padres, pero rápidamente se borro

-está bien señora Halls- dijo él levantándose, no quería que se fuera porque si se iba tendría que aguantar a mama sola y, muy en el fondo, quería hablar con él un rato, darle las gracias por todo- nos vemos mañana Jamie