El piso se encontraba manchado de sangre, tanto de seca como reciente y un cuerpo que parecía más un despojo humano, se haya tirado con la espalda marcada y con sangre aún saliendo de las heridas. No tenía más lágrimas que derramar después de una semana se maltrato y encierro no puede moverse del todo bien. La oscuridad se vuelva más y más grande conforme pasa el tiempo, el tormento soportado ya es suficiente, los golpes, la electricidad corriendo por el cuerpo y más estando mojado, lo que más odio y asco provoca fue el constante daño realizado a su miembro. Las marcas de un látigo desgarrando la piel para dejarla al rojo vivo sangrante, junto a quemaduras de cigarro son de las que por más que tarde el tiempo jamás desaparecerán y que se llevan en la mente el recuerdo vivido.
La causante de todo regresa con una nueva herramienta filosa para tortura, un cuchillo que hacerca a los pectorales ya marcados por cigarros y en última instancia se detiene para bajar la vista notando su objetivo. Estaba tan cansado de todo, mi cuerpo se encontraba en muy malas condiciones, había perdido mucha sangre, mi garganta estaba seca y adolorida de tantos gritos, junto a súplicas inservibles que esperaba al fin dejar todo atrás y reencontrarme con mis seres queridos; hasta que me llegó la imágen de mi muy amado ángel recordando la promesa de estar con ella en el baile, no pude evitar soltar un lágrima solitaria que aún me quedaba ante tal belleza y luz, la oscuridad se disipaba mostrando un destello de esperanza para evitar caer todavía. En ese momento saque fuerza y sostuve sus muñecas, logré que soltará en cuchillo y cayera para después con toda la fuerza salir mientras ella batallaba en volver a ponerse de pie debido a la sangre en el suelo. Cerré la puerta y tambaleando mi cuerpo casi muerto, encontré el celular de Precia gracias a que estaba sonando y el número era de un tipo llamado Jail Scaglietti a quién no le tome importancia, colgué esa llamada y con una apenas audible llame a emergencias pidiendo ayuda de mi propia madre solo para caer después inconsciente dejándome guiar por la oscuridad.
Todo estaba muy confuso y la verdad mi cuerpo se sentía fatal, pero debía abrir los ojos que estaban algo sensibles a la luz hasta que pude notar la silueta, no pude verla bien durante un momento pero si que podía escuchar su voz —Esta despertando, ¿Cómo se encuentra?— me movía un poco tratando de hablar pero no podía, me dolía la garganta y la persona a mi lado me pasó un vaso con agua del que di unos cuantos sorbos —Tranquilo, estás en en el hospital...— me comentaba hasta que la puerta se abrió dando paso a lo que me pareció ver una doctora —De acuerdo, veo que al fin despertaste, me tenías muy preocupada— la doctora siguió conversando con la enfermera para después realizarme un chequeó —Te encuentro mucho mejor que hace una semana, tus heridas están sanando bien y ya no tienes fiebre desde hace días— tal parece que mi estado estuvo peor hace unos cuantos días —¿Qué pasó con Precia?— la duda de que ocurrió después de mi desmayo es grande pero no tanta cómo mi miedo de lo que pudiera hacerme —Supongo que debes estar preguntando por la persona que se encontraba en la casa, trata de estar calmado y no esforzarte ahora— su voz y mirada eran amables, parecía ser una persona confiable —Bien, lo que se es lo siguiente: tu llamada a emergencias fue muy preocupante por lo que una patrulla llegó a la dirección que rastrearon, seguida de una ambulancia que enseguida entraron a la casa y un policía te encontró inconsciente en el piso, te llevaron inmediatamente al hospital para ser atendido, mientras que en una habitación se percataron de una mujer que tenía un cuchillo en la mano con sangre en la ropa. Fue detenida al momento y se espera que sea sometida a un juicio pronto en tanto tu estés listo para decir que fue lo que sucedió; al llegar al hospital tu estado era delicado, perdiste mucha sangre y muy maltratado, te dió temperatura durante unos 3 días, repetias una y otra vez el nombre de “Nanoha” y “ángel” casi como un delirio, hasta que la fiebre desistió hace 2 días y esperamos que despertarás pronto— así que eso es lo que paso —Te realizaron una transfusión sanguínea; no estabas en las mejores condiciones y te trasladaron de emergencia aquí en el hospital general de Uminari— no podría estar más sorprendido, me han traído a la ciudad de Uminari y por lo que se ve me he perdido la graduación junto con la cita con mi amada Nanoha. Lágrimas salieron de mis ojos al pensar en no haber cumplido con la promesa más importante, mi ángel que me ha salvado perdóname por no haber podido estar para ti.
Después de unos días en observación me llevaron a una habitación y como ya me lo esperaba, los agentes de policía fueron a interrogar me y dar mi parte de los hechos que pasaron en el infierno que era la casa de mi madre; les terminé contando todo el maltrato y sufrimiento que estuve pasando durante 6 largos años por parte de Precia quién increíblemente para ellos era mi madre. También me comentaron que al estar grave e inconsciente durante días, tuvieron que identificarme en base a investigación que los llevo a mi escuela donde había un aviso por mi repentina desaparición, el Instituto trato de contactar con mi madre y al no hacerlo dieron un informe a la policía por mi ausencia y falta de respuesta por parte de alguien que supiera de mi. Al parecer se dió la noticia de mi situación y por supuesto Nanoha se enteró de lo que pasaba, en el otro hospital me llegó a visitar en una ocasión antes de mi traslado aquí y para mí muy mala suerte no sé que fue lo que pasó después de eso. Cuando terminaron se despidieron de mi asegurándome que mi madre no saldría en muchos años de la cárcel, lo único bueno es que al fin todo terminó, mis súplicas fueron escuchadas y mi infierno acabo para siempre.
Mi recuperación iba sin complicaciones, mi cuerpo sanaba lento, al igual que mi mente y alma trataban de dejar atrás todo el daño; la Dra. Lindy Harlaown me visitaba constantemente y era agradable tenerla cerca, siempre se acercaba a mi con tacto, cariño y sutileza para ayudarme en lo que necesitara; durante las noches de pesadillas con recuerdos que me afectaban psicológicamente, ella estaba a mi lado para abrazarme y consolarme diciendo “tranquilo, ya estás a salvó, ella ya no puede lastimarte mas”. Estando a su lado ya no me sentía tan solo, era como estar con una verdadera madre que te cuidaba y quería pero, lo que más aprecio de su compañía es que me recuerda lo que antes había perdido. Lindy es una persona maravilloso que tiene un hijo más grande que yo con 2 años, Chrono venía a ver a su madre algunos días y la encontraba conmigo haciéndome compañía que al final él también se quedaba. Mientras los días pasaban Chrono y yo nos volvíamos cada vez más unidos, cuando Lindy no estaba él y yo hablamos mucho, me habló de su padre que murió hace ya 6 años y era un oficial de policía que resultó ser el amigo de mi padre; no nos lo esperábamos y fue una noticia algo dura de saber ya que ocurrió unos meses después del comienzo de lo que para mí era el infierno.
A Lindy y Chrono no les molestó el saber de mi condición, no les daba asco ni me trataron diferente y eso para mí fue una gran alegria, me sentí aceptado, al fin había encontrado a más personas además de mi amado ángel que me quería. El daño que sufrí en mi miembro fue algo serio, durante unos días me realizaron diálisis al no poder ir al baño debido al dolor que me causaba y cuando me dieron el visto bueno mi orina venía con sangre, eso alertó mucho a los médicos que me llevaron con un urólogo para ver qué tanto daño tenía y afortunadamente estaba relativamente bien, tendría que estar tomando más medicamento del que ya me deban pero al menos me encontré más aliviado. No me faltaba mucho para que me dieran el alta del hospital pero yo me preocupe ya que no tenía a nadie con quién estar, además de que no contaba con dinero para pagar todo lo que requería el hospital y medicamentos; iba hacer un enorme problema —Buenos días Fate, no estás feliz ya casi es hora de que te den el alta— por andar tan metido en mis pensamientos no me percate en que momento había llegado Lindy —Buenos días para usted también— llegó nuestra plática matutina —No te veo muy contento, ¿Sucede algo?— no podía ocultar mis pensamientos —Ahora que lo pregunta, estaba pensando en lo que haré cuando salga y a dónde iré también— estaba en problemas —No deberías preocuparte por eso, en realidad hoy venía con la intención de proponerte formar parte de mi familia, ¿Qué me dices, aceptas ser mi hijo?— mis ojos se tornaron cristalinos, no me imaginé que me propusiera adoptar me —Claro, me gustaría ser parte de la familia, que usted sea mi mamá y Chrono mi hermano.... mayor— entre lágrimas y sollozos me envolvió en sus brazos dandome algo que no creí volver a tener, tenía una familia que me quería y aceptaba como soy.
El día de mi alta llegó y acompañado de mi nueva familia salí con uno a cada lado mío, nos dirigimos a “casa”, era algo emocionante y nuevo para mí ya que no conocía la casa donde viviría a partir de ahora con mamá y mi hermano mayor. Llegamos y al entrar había un letrero que colgaba de los extremos con letras grandes de bienvenida, así es como me sentía en estos momentos y para hacerlo mejor mamá me confirmó que la documentación estaba lista y terminada, era oficialmente un miembro más de la la familia por lo que unos abrazos más junto a una comida especial de bienvenida que para mí representaba no solo estar con mi familia, sino que es un nuevo comienzo y una nueva vida.
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Eres mi ángel (Nanofate)
FanfictionFate Testarossa es una niña dulce, tierna y timida que nace con una cierta condición que la hace diferente a su hermana gemela mayor Alicia, pero es feliz al lado de su padre hasta que un terrible accidente cambia su mundo transformandolo a uno de m...