The Demonic King Chases His Wife [Parte 2] [Trad. al español]

Capítulo 219: Haciendo trucos al chico guapo (7)

Capítulo 219: Haciendo trucos al chico guapo (7)

Su Luo ya se había ido antes, naturalmente, ella no sabía acerca de la genial idea de Hou San que él ideó más tarde para recuperar sus pérdidas. Si lo hubiera sabido, muy probablemente se reiría hasta que su cuerpo se balanceara de un lado a otro. Porque podía predecir por completo que después de que todas las apuestas se hicieran y se cortaran todas las piedras origen, la cara de Hou San sería como una paleta de colores.

Este mercado de materias primas era enorme. Sin embargo, esta fue la primera vez que Su Luo había estado allí. Como no estaba familiarizada con el diseño, solo podía dejarlo a su suerte.

Solo que desde el punto de vista de Su Luo y desde su experiencia, cada profesión tendría su propio círculo y regulaciones.

Como las piedras de juego, si no tuviera una referencia de personas en la profesión, no sabría dónde se encuentran las pocas tiendas ocultas de expertos. A pesar de que tenía el pequeño dragón divino que podía sentir piedras de cristal en su espacio; si ni siquiera se le permitíera entrar a su tienda, entonces todavía era inútil.

Justo cuando Su Luo estaba preocupado mientras caminaba, de repente, dos niños pequeños corrieron hacia ella, tratando de alcanzarla.

Sin embargo, Su Luo estaba en guardia y se volvió hacia un lado para evitarlos.

Esos dos niños pequeños no esperaban que Su Luo reaccionara de esa manera, tenían una expresión algo aturdida, pero muy rápidamente, sus expresiones se restablecieron. Peleaban y jugaban ruidosamente, y continuaron corriendo hasta que estuvieron lejos.

La esquina de la boca de Su Luo se convirtió en una sonrisa superficial. Incluso si hubiera terminado en la antigüedad, todavía estaba tan orgullosa como antes de su preciso sexto sentido.

Justo ahora, sentía que los dos niños pequeños que jugaban ruidosamente a pelear eran sospechosos, por lo que se volvió hacia un lado para evitarlos. Poco después, su reacción confirmó de todo corazón su sospecha.

Esos dos niños pequeños fingían deliberadamente luchar juguetonamente para acercarse a su lado y robarle el bolso.

Como era de esperar, tendría que tener cuidado en todas partes en este mercado de materias primas. Si no prestaba mucha atención, entonces no podría proteger su bolso. Incluso esos niños pequeños sabían formar grupos para robar. Su Luo solo sonrió y procedió a caminar hacia adelante. Solo que no dio más de unos pocos pasos antes de que su figura se detuviera.

Esto se debió a que un niño con ropa pasada de moda, que estaba limpia y bien lavada, se paró frente a ella. Con un tono serio y letal, comenzó a hablar con ella.

"Muy noble señorita, ¿necesita un guía? No me mires así solo por ser joven, mi casa está a solo diez metros de este mercado. Desde que era pequeño, crecí en este mercado de piedras de juego. Estoy familiarizado con todo lo que hay aquí, cualquier información que necesites, podría contarte todo. Además, también podría llevarte a las tiendas escondidas."

La ropa del niño estaba pasada de moda y sus apropiados pantalones habían sido usados ​​hasta que la mayoría se estaban desgarrando. Los zapatos hechos de tela estaban desgastados, con un agujero que dejaba al descubierto su dedo gordo.

Al ver la mirada de Su Luo barrer su par de zapatos en mal estado, estaba algo ansioso y movió su pie hacia atrás. Sin embargo, no importaba cómo se moviera, debajo de los pantalones cortos, no podía ocultar su dedo gordo.

La mirada de Su Luo una vez más aterrizó en la cara del niño. Mirando su edad, este niño definitivamente no era mayor de diez años.

¿Quién hubiera pensado que este pobre y avergonzado niño podría tener una cara tan rosa que parecía tallada en jade? Simplemente debido a experimentar una vida de sufrimiento y dificultades, esta carita se tensó en una expresión seria y firme. Tenía un aspecto adulto y maduro.

Sin embargo, esto fue similar a cuando una persona somnolienta recibía una almohada, justo a tiempo para satisfacer sus necesidades.

Hace solo un momento, Su Luo había estado pensando cómo hacer que una persona familiarizada con este mercado pudiera llevarla a las tiendas ocultas en la parte interior del mercado. La razón era que con frecuencia, solo esas tiendas habrían almacenado materias primas de buena calidad durante mucho tiempo. Esas otras pequeñas tiendas pequeñas no pudieron entrar por sus ojos y consideró que no valían la pena.

En este momento, sucedió que el niño se había entregado a su puerta.

Sin embargo, Su Luo tampoco era alguien que daría la bienvenida a cualquiera. Ella miró indiferente a ese niño y le preguntó a la ligera: "¿Por qué no te uniste a esos dos? Mirando su apariencia, viven una vida mucho mejor que la tuya".

Su Luo se refería a esos dos pequeños ladrones que habían intentado toparse con ella antes.