En el pasado se esperaba de mí que me casara joven, siguiera con la tradición, tuviera hijos, formara una familia, fuera el hombre de la casa mientras mi amada de hacía cargo de los que haceres.
Ahora en el presente, la vida es diferente. Hay coches, microondas, celulares, el baño está dentro de la casa, el hielo ya no se toma de las montañas, la sal se usa para condimentar la carne, no para evitar que se pudra y las tradiciones cambiaron, el mundo en sí fue evolucionando.
Pero aún quedan cosas que nunca cambian.
La magia era una de ellas. En la actualidad no todos creen en esta fuerza. Ahora las personas pueden vivir una vida normal, nadie le teme a las brujas, nadie las quiere quemar, incluso algunos las imitan para celebraciones o películas.
Yo por mi parte, odio la magia, odio a las brujas, odio que mi corazón haya sido roto por una de ellas y lo peor, por mi propia madre.
Fuí confinado hace años a estar encerrado, prisionero de una caja, sin comida, sin aire, sin ver, sin oler, sin tocar, sólo escuchar si es que había sonidos.
Pero una luz llegó con su hermosura, con su bello cabello rojo como el fuego, una mirada divertida, pero seria, elegante tanto en su vestimenta como en la forma de su andar y alimentarse y me regresó la vida.
Ella me enseñó a apreciar las bonitas cosas de la vida como un amanecer, esos colores que en el pasado había visto tantas veces y que lo único que hacían era taparme los ojos para que el sol no me diera, ahora se transformaron en esos pequeños detalles que te hacen amar, amarte y amar a alguien más.
Vaneditt se convirtió en mi mundo con su pasión, su timidez, su belleza y su locura porque es loca ¿Por qué alguien querría zapatos altos e incómodos todos los días?
La hacían ver alta y sexy, sus piernas se veían más largas y eso me encendía, lo admito, pero ¿Para qué tanto esfuerzo? Ponte unas medias, sí, aprendí esa palabra, o anda descalza, las personas sonreirán cuando les digas: "Mis pies no querían lastimarse hoy".
Esa era mi Vaneditt, loca, hermosa, inteligente, apasionada y tímida. Esa es la Vaneditt que amo y que por mi culpa ya no la he vuelto a ver.
PRONTO...
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Muñeca sexual 2 (+18)
Roman d'amour"Desde el momento en que dicen ciertas palabras y abren la caja, me convierto en su amante, mi cuerpo no tiene contról" Así era yo antes, un muñeco, pero no cualquier muñeco. Yo complacía los deseos de las mujeres, las hacía gritar de placer, pero n...
