E l e g i d o s [NamGi]

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Narra;; Kim SeokJin

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Años atrás...

       Las personas cometen errores a veces ¿No?, también toman decisiones o toman iniciativas de hacer cosas, o de emprender sueños. Sin embargo, ésta sociedad crítica y destruye los deseos y la libre expresión, y gustos personales. Simplemente mierda. Solo quieren que seamos como ellos, quieren que seamos "perfectos", que no tengamos defectos, y, eso está mal, los errores son nuestro complemento, es nuestra naturaleza equivocarnos, es normal tener ideas distintas.

       La gente idiota no entiende que está bien ser diferente, no acepta las verdaderas personalidades de cada individuo. Eso me frustra. Y puedo decir que también me enferma. Solo mierda disfrazada con brillantina, si, eso mismo. La mayoría de las personas son así, mierda con una máscara de brillantina. ¿Y por qué estoy tan rencoroso por ello? Bien, siendo sincero, a veces pensar no me hace bien, pero, ¿qué más debo hacer?, estoy en todo mi derecho de estar enojado con ellos, enojado con la vida, enojado con todo lo que tenía que ver con ésta realidad tan... Cruel. Tan demacrada.

       Tampoco es como si fuera a echarme a llorar y arrevolcarme en el suelo y descargar el resentimiento, no, soy una persona madura capaz de pensar, racionar y actuar. No soy como ellos, no soy como esas personas tan ciegas. Me compadezco de ellos por no poder ver que la felicidad va por delante de cualquier cosa. A mi me quitaron el derecho de ser felíz, solo por pensar diferente y ser diferente al resto.

       Yo no soy un muchacho que resalte entre mi comunidad, sin embargo... Era de una familia adinerada y reconocida, a pesar de eso, yo era un fantasma entre mi familia. Era el hijo del medio, casi un don nadie a quien no le prestaban atención en lo absoluto. Admito que soy guapo. Las chicas trataban de hacerse ver cuando pasaba frente a los grupos de ellas por casualidad, alguna de ellas chocaba conmigo "accidentalmente" y luego se disculpaba para luego regresar a su grupo de amigas y contarles como ocurrió aquello. Eran tan infantiles e ilusas, si hubieran sabido que soy homosexual.

       Mi familia me prestaba atención solo cuando les convenía. Como cuando el director de mi instituto llamaba a mis padres para felicitarme por mis buenas calificaciones. Y luego de eso, todo volvía a lo de antes. Para ser sincero, no me importaba mucho que mis padres no me prestaran atención, porque después de todo, solo eran personas superficiales e interesadas por el dinero.

       Mis hermanos. Un dolor en el culo. Siempre burlándose porque al parecer, ser el hijo favorito de nuestros padres era tan importante que ameritaba que, en cada momento me trataran como la mismísima escoria. A la única que quería era a DaeYung, mi hermana menor, la niña más dulce del mundo, la más hermosa y amable, sin dudas, la mejor del mundo.

»»————-　Flash Back　————-««

       Aunque todo estuviera oscuro, podía escuchar, escuchar los sollozos ahogados de mi hermanita, mi linda hermanita. A pasos suaves me acerqué a la cama de ella y me senté en ésta. Me rompía el corazón escucharla de esa manera. Tan triste y temblando. Me aventuré, me acerqué al centro de su cama con delicadeza y tantee el cuerpo de mi bebita, ella se encontraba hipando, en silencio. La abracé atrayendola a mi pecho y luego acariciando su cabello y también solté feromonas con aroma a Avellanas, haciendo el intento de poder calmarla un poco.