Shiratorizawa is Coming 2

2° - 8# Revolviendo Las Cosas

Mi corazón palpitaba con fuerza, todo era mi culpa, me lo repetía una y otra vez en la cabeza, me vestí rápido, tomé mis cosas y salí corriendo a la academia, mi tiritaban las manos. Cuando llegué corrí al gimnasio, y allí estaban todos los chicos sentados en las bancas junto con el entrenador, tenían la mirada clavada en el suelo, me acerqué a ellos y pregunté qué pasaba. El entrenador me fulmino con la mirada y volvió a mirarlos a ellos.

-piensen en frío su decisión, se acercan las finales de cada partido, y estarán distintos caza talentos, no se retiren, no expongan su futuro - habló el entrenador, pero nadie respondio, todos estaban sumidos en sus mundos -se suspende el entrenamiento de hoy, pueden irse -

Se retiró y los chicos se levantaron para retirarse, comencé a llorar, no aguantaba tanto frustración, ushijima entró al gimnasio y todos voltearon a verlo.

- Que hacen - les cuestionó pero ninguno quiso responderle-

-No le responderé a alguien que nos traicionó a todos - esta vez fue Semi quien rompió el silencio-

-No me gusta esto -hablé y todos me miraron - No soy un objeto, admito que fui una egoísta y quise tenerlos a todos, pero lo lamento, no quiero ser yo quien los separe, no quiero verlos así, quiero verlos como antes, como un equipo - no paraba de llorar, me dolía el cuerpo, me dolía verlos separados-

- Admítelo princesa, no hay forma de que volvamos a ser un equipo - Tendou se acercó a mí y dio golpecitos en mi cabeza-

- Deja de llorar, no es culpa tuya, aparte chillas, no lloras - y aquí iba el intento nada útil de Semi para calmar mi llanto-

- Pero si es mi culpa, los estoy separando, ademas ya tome una decisión, voy a cambiarme de academia, así que no tendrán que mirarme todos los días y así podrán entrenar juntos -me ardían los ojos, no podía parar de llorar-

sentí una mano caer en mi hombro, era Ohira.

-es un poco apresurado tomar decisiones cuando ninguno de nosotros ha tocado el tema, ahora que estamos todos reunidos deberíamos conversarlo, ¿no? Ushijima -

-Olvídalo yo me voy - Semi tomó su bolso deportivo y se dispuso a retirarse, pero Shirabu lo detuvo-

-¡Si de verdad les importara el voleibol no lo dejarían, ni por mi, ni por nadie, hace dos días eran un equipo, ahora son siete fracasados! - Grité, mi corazón se sentía destrozado, tenía tanta frustración-

-Que dijiste, repitelo - Semi se me acercó, su ceño estaba fruncido y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo-

-Si eres tan hombre, te quedaras a hablar con ellos, yo me harté de ustedes, tropa de idiotas - tome mis cosas y azote la puerta del gimnasio-

Corrí, no fui a clases, lo último que escuché fue el grito de la directora pidiéndome que me detuviera, llegué a un pequeño parque y me senté en el pasto que estaba recién cortado, siempre la naturaleza calmaba un poquito mis demonios internos, pero las lágrimas no dejaban de caer, quería estar sola, se me apretaba el corazón y apenas podía gesticular una palabra.

-Oya? -

¿Oya? Levante la cabeza y vi a Bokuto, abrió los ojos como platos, seguramente al ver mi cara roja por llorar tanto.

-HEY, que sucede - se acercó y se sentó a mí lado, no le respondí, no podía hablar- por qué lloras, te ves mal, muy mal -

Solo logró que llorara aún más, estaba atragantandome con mis lágrimas.

- AH ya veo, un chico, fuiste rechazada, pero hey, hay muuuchos mas, yo por ejemplo -movió sus cejas de arriba a abajo y no pude evitar reir-

-Gr-gracias - le respondí y saque un pañuelo de mi bolsillo, se me estaban cayendo los mocos-

-te hice reír, ¿quieres una? Las como por que son ricas en proteínas -me extendió una barra de cereal y la acepte-

-ibas de camino a entrenar - afirme eso por que iba vestido con su ropa de equipo -

-jaja, además eres adivina, asíes, voy junto al Karasuno y el Nekoma, ¿vienes? - se levantó y me extendió la mano-

-Ah, me encantaría, pero quiero ir a casa -tome su mano para levantarme y sacudi mi ropa-

-bien, pero no llores, o le diré a Hinata, y el se preocupa mucho por ti - me sonrió y se despidió.

Camine a casa a paso lento, esperaba un mensaje de alguno de los chicos, pero ninguno me escribió, me repetía mil veces lo tonta que era. Al llegar a casa me metí a la ducha y me deje relajar, el agua caliente caía por mis hombros y cubría todo mi cuerpo, tuve que estar mucho tiempo bajo el agua para que mis dedos se pusieran como pasas, y que golpearan la puerta tan fuerte como si la fueran a derrumbar, me envolví en una toalla, y fui a abrirla.

-Mamá, tienes que llevar tus llaves cuando salgas -dije mientras abría la puerta y extendía el manojo de llaves de mamá

-¿Mamá? - era Semi, se apresuró y entró a la casa y cerró la puerta-

-que haces aquí -mi boca tembló al hablar y quería llorar nuevamente-

-jugaremos todos juntos las finales, no lo hacemos por ti, lo hacemos por nosotros -me tomo de la cintura y me apego a la puerta-

-esta bien, pero, que tengo que ver yo, ¿podrías soltarme? -cómo solo llevaba envuelta la toalla, iba desnuda y mi piel hacía contacto con la suya, mi temperatura estaba aumentando-

-Cuando te vi llorar, quería abrazarte y besarte, pero no pude, eres la niña más linda que he visto - susurro en mi oído causandome cosquillas-

-Semi, de que hablas, yo-

No pude terminar la oración cuando tomó de mi rostro y me besó, su lengua se abrió paso uniéndose con la mía, era mucho más alto que yo, envolvió mi cintura con sus grandes manos y su pierna se posicionó entre las mías, la toalla que me cubría se estaba cayendo, pero como egoísta que soy, no lo detuve, seguí con el beso y enrede mis dedos en su cabello atrayendolo más aún, haciendo del beso aún más profundo, baje mis manos a la liga de sus shorts deportivos, y levante su remera, toque todo su torso y un leve gemido escapó el. Estaba cometiendo la locura más grande de toda mi vida, y aún necesitaba más.

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Hola preciosuras 💕