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Corte de cabello


La mano de Jungkook apretaba ligeramente la suya mientras mantenía su labio apresado entre sus dientes, sí, definitivamente estaba nervioso, pero sabía que no podía posponer más ese día. Puesto que no tenía nada en el trabajo o algún proyecto atrasado. Suspiró por tercera vez en lo que llevaban en el establecimiento observando lo largo de su cabello en reflejo.

"Jungkookie, tú cabello está maltratado, habrá que cortarlo para que crezca mejor" le decía Hoseok desde atrás poniendo sus manos sobre sus hombros y apretando.

"Lo sé, es solo... ya sabes, me gustaba llevarlo largo" hizo una pequeña mueca mientras suspira con desgano.

"Admito que extrañare hacerte trencitas" sonrió y depositó un beso sobre su cabeza. "Pero si lo cortas, entonces volverá a crecer y esta vez, ambos lo cuidaremos muy bien, porque voy a ayudarte" le acarició las hebras suavemente notando un ligero cambio en el rostro desganado de su esposo.

"De acuerdo" depositó un beso sobre sus labios y luego las soltó.

El pelirrojo se alejó y asintió hacía la persona que haría el trabajo, mientras él se sentaba algo lejos allí, pero aún manteniendo en su campo de visión a Jungkook que se veía menos tenso y eso le hizo sonreír, mientras formaba un corazón para que él lo viese a través del espejo, cosa que logró e imitó al poco tiempo.

Cruzó ambas piernas y se dedicó a observar como le humedecían el cabello y alisaban con un peine para luego cortar con las tijeras de manera prolija. Sabía que luego de eso Jungkook estaría un poco bajo de ánimo, debido a que se había acostumbrado al nuevo estilo y para qué mentir, le sentaba a la perfección, pero debido a las circunstancias, se tuvo que llegar a la situación actual. Lo bueno de todo eso es que Hoseok tenía un plan para cuando salieran del salón y volviesen a su hogar.

No tardaron mucho tiempo hasta que el cabello de su esposo estuvo listo, cepillado y brillante en su corte habitual. Se levantó de su lugar y dió las gracias mientras se aproximaba a Hoseok.

"¿Qué tal?" tocó ligeramente su cabello y Hoseok le acarició la mejilla cuidadosamente.

"Hermoso, como siempre" halagó viendo a Jungkook bastante satisfecho con su respuesta, entonces ambos partieron a la caja y pagaron por sus servicios, llevandose algunos chocolates de cortesía.

"Pasaremos por la tienda antes de ir a casa, ¿está bien, cariño?" lo observó y él asintió distraído con ambas manos en sus bolsillos.

Hoseok lo abrazó por un costado y recostó su cabeza contra su hombro, permaneciendo ambos en silencio, pero en una comodidad impacible. Intercambiaron un par de palabras en el camino, más por parte de Hoseok quién trataba arduamente cambiar el rostro algo decaído del más alto y claro, Jungkook por supuesto sonreía con cada intento porque su esposo lograba cambiarle el semblante a todo en pocos segundos. Después hicieron lo que había informado el pelirrojo tiempo antes, entraron a una tienda y compraron diversas golosinas, Jungkook lo vió un tanto sospechoso, pues Hoseok en realidad no es de comer tantos dulces, claro, disfruta de cierta cantidad, pero no como la que cargaba en las bolsas que le entregó el tendero, a lo mejor, querría provisiones para pasar el rato cuando se encontrara en casa y él no iba a refrutar.

No pasó mucho tiempo para que finalmente estuviesen en su hogar, Hoseok dejó las bolsas en la cocina y tomó su mano para dirigirlo a la habitación que ambos comparten.

"Quiero te pongas ropa muy cómoda y lleves alguna manta al sillón, ¿está bien?" le comentó apenas se cambio por ropa con la que solía estar en casa.

"¿Qué tienes en mente?" Jungkook sonrió, aunque estaba bastante intrigado, a lo que Hoseok sólo le guiñó un ojo y desapareció por el pasillo.

Él simplemente acató su petición poniendose un pantalón de chándal color negro y una camisa blanca de manga corta. Tomó el edredón favorito de Hoseok y suyo y caminó hasta la sala, encontrando allí a su esposo que lo esperaba con una sonrisa y varios tazones con cosas en su interior. Observó tras él y la pantalla del televisor proyectaba la imagen de uno de sus superhéroes favoritos.

Emocionado se acomodó en el sofá con Hoseok a su lado y puso la manta sobre ambos mientras tomaba un tazón con frituras.

"Pensé que no eran tus favoritas" le dijo girandose a verlo por un momento.

"Sólo no estoy tan inmerso en este universo, pero disfruto de las películas al final" puntualizó notando los ojos de Jungkook brillar como los de un pequeño niño y eso lo hizo sentir realmente contento.

"Gracias, Hoseokie, creo que debí haber hecho algo muy bueno en otra vida para que tú estés conmigo ahora" le depositó un beso sobre la frente y el chico enrojeció.

"Tú existencias es un regalo maravilloso, Kookie y eso es suficiente" dejando un beso sobre su frente finalmente dió inicio al maratón de películas.

Aquella tarde fue realmente divertida y llena de cariño, por supuesto, muchos dulces también y lo más importante, el objetivo de Hoseok se cumplió al ver a Jungkook feliz mientras compartía datos curiosos sobre las películas que veían y es que, su cosa favorita en el mundo es y será ver la sonrisa del chico que más ama en el mundo.

𝘢 𝘨𝘰𝘰𝘥 𝘭𝘪𝘧𝘦 𖥻𝗸𝗼𝗼𝗯𝗶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora