𝒞𝒽𝓇𝒾𝓈𝓉𝓂𝒶𝓈 𝐵𝑜𝓎𝒻𝓇𝒾𝑒𝓃𝒹 💙

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Beomgyu no podía dejar de morder las uñas de su mano derecha, estaba sumamente nervioso, no quería que nada saliera mal, estuvo pensando, y pensando, y al fin había tomado una enorme decisión, decirle a su madre, lo cual había sido aún más complicado, llevándolo al punto de solo decirle lo mucho que la aprecia y que debía ayudarle a escoger el regalo que le daría a ella, porque no sabe qué darle.

Así que decidió irse mejor por su primer opción, encontrar a Choi Yeonjun y decirle su plan, ¿por qué a él? Porque ese chico tiene un buen aspecto (excepto por sus tatuajes, su madre se desmayará cuando los vea), además de un buen comportamiento, sabe que ese chico tendrá una apariencia rebelde, pero es educado, así que no podía perder el tiempo.

Ahora el problema era, hacer que acepte, no sabe si la posibilidad de que acepte esté más al alcance, Yeonjun es complicado, un chico muy difícil de convencer hasta para los profesores, el chico ni siquiera quiere trabajar en equipo porque se le hace una pérdida de tiempo, trataría de convencerlo.

Y allí lo vio, sentado en uno de los jardines del campus, en posición de loto y con una guitarra en su regazo, al parecer revisaba las cuerdas, tomó aire despacio y se animó a él mismo para acercarse.

Yeonjun lo odia, pero no lo odia tanto, pocas veces podían tener una conversación tranquila, y eso solo era por trabajos y tareas y esperaba que por lo menos ahora le hiciera más caso y que la conversación sirviera para convencerlo.

- ¡Yeonjun, que sorpresa encontrarte!- el mencionado levantó la mirada para poder mirarlo por escasos segundos y seguir después con sus acciones-. Un 'hola' no me vendría para nada mal, ¿sabes?

Yeonjun pasó su dedo con brusquedad por una de las cuerdas, provocando un sonido distorsionado y nada armónico, con su ceño fruncido y mirando de nueva cuenta a Beomgyu suspiró frustrado.

-¿Qué es lo que quieres?- preguntó sin muchos ánimos.

-¡Es bueno que lo preguntes! Porque...- soltó un suspiro-, necesito de tu ayuda... y como eres un chico muy genti...

- No- respondió Yeonjun interrumpiéndolo de inmediato y volviendo su mirada hacia su guitarra-, ahora deja de molestarme.

Beomgyu soltó un suspiro.

- No es como si quisiera hacerlo- Beomgyu caminó unos pasos más y se sentó justo frente a Yeonjun, en posición de loto y dejando su mochila a un lado de él-, en verdad necesito tu ayuda, es un asunto de carácter ¡urgente!

Yeonjun resopló y volvió a mirar a Beomgyu.

- ¿Y crees que me importa? Es asunto tuyo, resuélvelo solo- mencionó Yeonjun, pero al ver a Beomgyu  con esos ojos tan brillantes llenos de súplica, sintió algo extraño, siempre lo ha detestado por varios aspectos y admirado por otros, pero simplemente para Yeonjun era una molestia- ¿Qué se supone que quieres que haga?

- ¡Quiero que seas mi novio para la noche de la cena de navidad!

- ¿Qué?

Yeonjun no sabía si acaso había escuchado mal, o si acaso a Beomgyu le había picado un insecto extraño o que se había drogado bastante.

- Por favor- pidió Beomgyu juntando sus manos suplicantes-, en verdad necesito que me ayudes en esto, ¡prometo no pedirte nada más!

-¿ Y qué se supone que gano yo con eso?- preguntó Yeonjun, para él no necesitaba ayudar a Beomgyu, y más aparte, ¿por qué escogerlo a él?

- Porque eres perfecto para esto.

- Explícate- pidió Yeonjun dejando su guitarra a un lado para colocar sus manos sobre sus piernas y mirar a Beomgyu a los ojos.

- Eres atractivo y puede que seas el tipo de chico que esté más cercano a la descripción que le dí a mi familia de mi novio - dijo Beomgyu-, y en cierto modo creo que me ayudarías muy bien en mi mentira.

Yeonjun cruzó los brazos sobre su pecho, jamás creyó que Beomgyu le pediría algo como aquello, de todas las posibilidades que pudieran salir de los labios de Beomgyu, nunca pensó que algo como eso saldría primero, lo que en verdad le intriga, además ha mencionado que le parece atractivo en cierto modo y que es prácticamente su tipo ideal, eso es en cierto modo algo agradable, pero no mucho.

- ¿Atractivo dices?- preguntó Yeonjun dándole a Beomgyu una sonrisa de coquetería.

-¿Enserio? De todo lo que dije, ¿y eso es lo que preguntas?- rodó los ojos-. ¡Estoy hablando enserio!

- Y también lo hago yo, y créeme que no veo alguna clase de razón justa como para ayudarte.

- Por favor, Yeonjun... en verdad me gustaría que lo hagas.

- ¿Por qué debería?

- ¡Porque no quiero quedar como un tonto! Mi madre y mis odiosos primos creen que tengo pareja por mi estupidez y sé que dirás que fue mi culpa y que debería resolverlo solo- Yeonjun asintió, pues pensaba en eso-, pero en verdad me gustaría cerrarle por una vez la boca a ese idiota de mi primo y demostrarle que puedo tener aunque sea un novio en toda mi estúpida existencia hasta ahora...

-¡Espera! ¿No haz tenido pareja?- Beomgyu negó-. ¡Pero si tienes veinte años!

- Sí, pero... nadie se fijaría en mí ni bromeando- Yeonjun frunció el ceño-, ¿qué pasa?

- ¿Por qué no lo harían? Eres muy lindo.

Yeonjun lo decía como si no tuviera algo de importancia, y Beomgyu había sentido a su corazón latir de inmediato y a sus mejillas irse calentando lentamente hasta tornarse rojas, Yeonjun sonrió al ver aquello, no entendía cómo personas como Beomgyu caían en esas palabras, para Yeonjun  es muy distinto todo, se había declarado asexual ya hace más de cuatro años, debido a que nunca le ha atraido alguien en todo su vida, y ahora sentirse extraño con solo la presencia de ese fastidioso chico que se sonroja con solo un cumplido, lo hace sentir muy extraño, pero lo mejor es ignorar eso, por ahora.

- Te ayudaré- mencionó Yeonjun.

- ¡¿En verdad? !- Beomgyu mostró un brillo tan atento en sus ojos que hizo que Yeonjun sonriera de inmediato- ¡Gracias! ¡Estoy agradecido contigo!

- ¡Espera! No creas que lo haré gratis.

- ¿Qué?- Beomgyu pasó su lengua por sus labios-. ¿Y qué es lo que vas a querer a cambio por todo esto?

- Tranquilo, de eso hablaremos después, cariño -le dedicó un guiño a Beomgyu-, acostúmbrate a que te llame de ese modo, no puedes sonrojarte todo el tiempo por un cumplido.

- T-trataré- mencionó Beomgyu, sentía su rostro arder en demasía.