s i e t e

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Las pocas navidades que Yeonjun había festejado con su familia, no habían sido tan gratas como él lo hubiese querido desde un principio, todavía lo recuerda, la simple emoción de poder recibir un regalo siempre estaba presente desde que era muy pequeño.

Sus padres casi nunca se encontraban en casa, pero cuando eran fechas cercanas a la navidad, ellos estaban allí con él, parecía que lo hacían más a fuerza que por gusto propio, su tía venía y celebraba con ellos, siempre era grato ver el árbol de navidad con regalos, pero para la gran sorpresa y decepción de Yeonjun, los regalos que recibía ni siquiera eran aunque sea una bolsa de canicas.

Ropa, ropa y más ropa, odiaba que le dieran eso, sus padres era lo que más le compraban para navidad, y al ver de nuevo playeras, calcetines e inclusive boxers, le daba más que decepción. En la escuela, podía escuchar a sus amigos presumir de sus nuevos juguetes que sus padres les habían regalado para navidad, y eso a él lo ponía más que triste.

Nunca en su vida había recibido un obsequio de alguien y que le llegase a gustar tanto como para realmente amar a esa persona por tomarse tanta molestia en escoger algo que sabía que le gustaría, suspiró al de nueva cuenta tener esos recuerdos algo amargos de sus navidades pasadas, no culpaba a sus padres, pero hubiera sido mejor que le dieran un abrazo y una caja de cartón  para poder hacer un carro simulado, en lugar de ropa interior.

Sus pasos de nueva cuenta lo guiaron por el camino que ya había pasado hace un día, y por fin llegó a la tienda de juguetes, y sonrió al percatarse de que aún seguía allí aquel peluche de oso que tanto había llamado la atención de Beomgyu, esperaba que le gustase.

Entró a la tienda, percatándose de algunos niños que corrían y gritaban a sus padres que les gustaba aquel u otro juguete que más llamaba su atención, sonrió al ver aquello, a él y a duras penas sus padres lo hacían pasar por jugueterías. 

- ¡Buenos días!- un chico se acercó a él- ¿En qué puedo ayudarte?

- Hola, ¿aún tienen peluches de kumamon?

El chico con una amable sonrisa dio un asentimiento.

- ¡Por supuesto!- respondió animado- ¿Desea algún modelo en específico? Tenemos muchos de donde escoger.

- De hecho, me encantaría uno como el que está en exhibición.

- Enseguida se lo traigo, ¿gusta que lo envolvamos?

- Me encantaría.

Yeonjun miró de nuevo hacia el peluche que se encontraba en exhibición, suspiró, recordar a Beomgyu era fascinante en aquel momento, no sabía si la reacción de Beomgyu sería algo exagerada, pero lo que más le gustaría ver, sería su hermosa sonrisa y tal vez un beso no estaría nada mal.


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Sí, algo que le gustaba a Beomgyu, era envolver regalos, le gustaba pasarse por lo menos un buen tiempo organizando todo y escogiendo las envolturas de cada regalo que daría, casi para los regalos de sus primos no daba tanto esfuerzo como para los que le da a su madre, pero esta vez haría su mayor esfuerzo con todos y cada uno de los presentes que iba a entregar.

Dejó la cinta adhesiva en su pequeña mesa de trabajo, y miró las envolturas, todas las haría de uno mismo, pero con un pequeño detalle que identificara a la perfección a cada uno, miró sus regalos, no le gustaba mucho regalar ropa, pero era lo mejor, además su madre se había interesado bastante en algunas prendas de ropa que inclusive para él había sido difícil escoger la indicada para su madre, pero lo había logrado.

Suspiró para luego comenzar a envolver cada regalo, tal vez había exagerado un poco, pero estaba feliz de poder hacer todo a su modo, un pequeño detalle para todos, aunque quería ponerle al regalo de su primo Seungcheol que se fuera a la mierda, pero era navidad, así que no podía hacer algo como aquello, sería como darle las gracias por fastidiarlo, además de que su tía lo vería con mala cara, así que debía evitarlo.

- Beomgyu, ¿y Yeonjun?- su madre abrió la puerta de su habitación sorprendiéndolo un poco.

- Salió- respondió Beomgyu mientras agarraba las tijeras-, ¿pasa algo con él?

- Bueno- su madre entró por completo a su habitación-, no es por molestar o algo por el estilo, pero - suspiró-, ¿sabes qué le podría dar para regalo?

Su madre siempre había sido un persona que adora regalar cosas, sobretodo si se trataba de familiares y amigos, Beomgyu se había acostumbrado tanto a la forma de pensar de su madre que se sentía sumamente feliz al saber que cada vez estaba más cerca la navidad, su madre a veces preparaba demasiada comida, y como su padre viajaba por el extranjero, no se daba el lujo de estar con ellos, así que casi siempre hacían alguna video - llamada para poder estar en contacto en navidad, pero a Beomgyu en verdad le encantaría que estuviera allí con ellos compartiendo la celebración.

- Te diría ropa, pero creo que no querría- Beomgyu sonrió hacia su madre, y luego miró hacia el regalo que tenía para Yeonjun, sabía que Yeonjun siempre cargaba con su guitarra, y que no tenía una funda para portarla, por eso había decidido comprarle una, para que así pusiera evitar dañarla-, ¿por qué no le das algo que creas tú que le guste?

- No lo conozco muy bien, cariño - su madre soltó una suave risa-, es curioso, pero... parece que eres tú lo que él querría.

- ¿Me regalarías con un chico que apenas conoces?

- Lo conoces, Beomgyu, es mejor que nada, y como has decidido que se quedase, eso significa que tienen la suficiente confianza como para convivir juntos, ¿tan cercanos son?

- Un poco- mencionó Beomgyu, aunque la realidad era otra, apenas  y se hablaban en la universidad, se la pasaban casi todo el tiempo trabajando, y apenas estaban aprendiendo cosas el uno del otro, así que era una novedad para ambos, pero era una buena idea conocerse, era agradable-. Dale unos dulces, le gustan los de sabor uva, es lo único dulce que tolera, los demás los detesta.

- Me recuerda a alguien.

Por supuesto, a Beomgyu también le recordaba a alguien.


𝒞𝒽𝓇𝒾𝓈𝓉𝓂𝒶𝓈 𝐵𝑜𝓎𝒻𝓇𝒾𝑒𝓃𝒹 💙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora