° El Soldado Fantasma °

Un demonio disfrazado de Ángel.

" Narra Izuku "

Después de presentarme a la clase, el profesor llamado Aizawa Shota, héroe profesional denominado como Eraser Head, me indicó donde sentarme. Me senté atrás de una chica peliceniza, se parecía un poco a un chico arrogante que casi le doy una paliza hace años.

Después de unas 3 horas enteras sin hacer nada, la campana sonó indicando que era la hora del receso. Salí del salón y me dirigí a la azotea, en el camino vi a un chico bicolor junto a una chica peliverde con pecas y expresión jodidamente adorable, pasé al lado de ellos y vi como el bicolor me volteó a ver.

Hayate: Eh, ¿tienen un momento? – interrumpí su camino mientras que ellos se dirigían a mí. - ¿En dónde está la azotea? – pregunté con una sonrisa amigable

¿¿??: Está doblando la esquina que está por allá – señalando la dirección.

Hayate: Bueno, muchísimas gracias. – agradecí con una leve reverencia

" Narro Yo "

Después de eso izuku fue hacia la azotea, se encontró con la misma chica peliceniza, ella lo vio y bufó levemente, él se sentó un poco lejos de ella, sacó de su bolso su libreta donde tenía las letras de sus canciones, un sentimiento de nostalgia llegó a él y sacó un lápiz de su bolsillo. Empezó a escribir a una velocidad increíble una canción que tenía en mente desde hace unos días.

La chica peliceniza veía con algo de confusión al castaño, éste tenía una sonrisa gentil en su rostro, pero con la velocidad en la que escribía pensaba que estaba molesto, se acercó sigilosamente detrás de él y vio como tenía una página llena de unas letras de una... ¿canción?, hayate terminó de escribir y guardó su libreta, vio al cielo y una sonrisa se formó en sus labios, el volteó a ver para atrás y vio a la chica hipnotizada pero salió de su trance al ver como izuku le sonreía amablemente.

Hayate: Mi nombre es Hayate Fujimoto, ¿cuál es el tuyo? – se presentó con una sonrisa

¿¿??: M-Mi nombre es Mitsumi Bakugo. – contestó un poco nerviosa

Hayate: Un gusto mitsumi-san, pero yo ya me retiro. – dijo mientras se levantaba y salía de ahí

Izuku: - Ese nombre lo he escuchado antes. - - pensó sin expresión alguna

Hayate caminaba con las manos en los bolsillos y una sonrisa como la de "Adán" uno de sus personajes favoritos del libro que leyó hace años, iba a la cafetería pero en eso tropezó con alguien que iba distraído, hayate sintió en su rostro dos grandes cosas realmente suaves. Alzó la mirada viendo a una mujer peliazul oscuro, sin decir nada se levantó limpiándose un poco el pantalón.

Hayate: Discúlpeme, no estuve atento al camino. – dijo fingiendo estar apenado

¿¿??: No te preocupes, sólo ve a tu clase o haz lo que quieras. – habló la persona sin darle mucha importancia a lo que acaba de pasar

Hayate: Está bien, discúlpeme. – se disculpó denuevo haciendo una leve reverencia

Hayate siguió su camino pero esta vez tenía una mirada fría como un glaciar, esa mirada se borró y cambió a una más calmada al entrar a la cafetería, la atención fue dirigida al pelicastaño que no le prestó mucha atención y con una sonrisa fue a buscar algo para comer.

Hayate después de agarrar una bandeja y un poco de comida, se sentó un poco lejos de los demás, su expresión cambió a una gentil, se quedó mirando por la ventana con una mirada calmada como el mar ( JSajdasjdasjd, no debí ver Shuumatsu ) una chica de cabello color ceniza se sentó en la mesa del pelicastaño, éste con una sonrisa le habló normalmente