Capitulo 4

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Los días continuaron con tal fluidez que daban esa sensación de jamás terminar, Bella seguía con su rutina y cada día un hueco se formaba en su pecho pero lo ignoraba o por lo menos lo intentaba...

- Tengo una rara sensación- Le dijo una tarde al doctor mientras tomaban un café

- ¿Te duele algo?

- No, no... Es aquí-Le respondió llevando su mano al pecho- Es como si pesara...

- Sientes presión- Dice y coloca su mano directamente entre las clavículas de ella, Bella no se mueve ante tal gesto- Puedo revisarte si lo prefieres pero no creo que sea algo físico- El habló sin dar importancia alguna sobre el lugar donde su mano se encontraba

- Creo... que tienes razón- Le respondió ella prácticamente en un susurro

Volvieron al café como si eso no hubiese sido un momento, ella se prometió no pensar en él y él sabía que su pequeña travesura tendría consecuencias pues Bella jamás estaba sola.

Caminaron juntos un par de cuadras hasta que ella continuó sola

- ¿Te divertiste?- La voz profunda de Edward hizo reír a Hariel

- No se de que hablas, me pediste que la cuidara y como medico es mi deber revisar su estado físico

- Se te pidió que la cuidara pero no te pases de listo

- Edward- Le llamó con voz seria- No fue a ti a quien le prometí cuidarla, yo sere su guardian y la protegeré de ti así que no confundas las cosas

- Se muy bien que yo soy el problema

- Y yo la solución, que ella este conmigo es lo mejor, pronto habrá superado todo y no quedarán rastros de ti en su mente, de apoco me ganaré su corazón y no hay nada que puedas hacer al respecto

- ¡Basta!- Le respondió enfurecido y tómandolo por el cuello lo arrojó hacía un callejón

- ¿Que haces?- Le preguntó poniendose de pie

- Te alejaras de ella- Sus ojos se oscurecieron

- No lo haré, ella es mi destino

- Si lo harás- Le respondió pateandolo contra el muro, lo levantó tomando el cuello de su abrigo y volvió a tirarlo lejos, lentamente caminó hasta él pero

- ¡Basta!- Bella estaba de pie frente a él y con una mirada furiosa

- Quitate- Le dijo Edward tratando de asustarla

- No! No me interesa que sea un ladrón

- No soy un ladrón- Intentaba sonar amenazante- Soy mucho peor

Con cada palabra él se acercaba un poco mas a ella y ella se alejaba como respuesta

- Me tiene miedo señorita- Su siniestra risa la alteraba

- No le temo

- Claro que si, si no es así entonces no se mueva

El se acercó un poco mas y esta vez ella no se movió, solo lo miró directamente y él se detuvo

- ¿Se asustó señor?- Esta vez ella era la cínica

- No me provoques

- No se que estas buscando, si es dinero yo te lo daré pero golpear a un hombre que se dedica a ayudar a los demás me parece despreciable

Ante estas palabras Edward solo se quedó inmovíl, no podía soportar que ella pensara así, no es que estuviese equivocada pero tal vez si escuchara toda la historia, no eso no funcionó en el pasado... No cambiaría ahora

- ¿Que puedo decir? Soy despreciable

- Odio cuando hablas así, parece que sientes pena de ti mismo- Dijo el doctor- Isabella estoy bien

El habló dulcemente mientras se puso de pie y continuó

- Tranquila, él es mi hermano

- ¡Eh! ¿Tu hermano?

- Así es, él es mi hermano menor

- Oh, disculpa... Mucho gusto- Su voz salió tan suave de sus labios que Edward no pudo evitar enfurecer- Tu nombre es...

- Olvidalo, no me voy a presentar- Sin decir nada mas solo se marchó

- ¿En serio es tu hermano?- La pregunta se le escapó tan rapido que no lo pudo controlar

- Jajaja Si así es

- No se parecen en nada

- Es complicado- Le dijo él pasado su brazo por los hombros de ella

Si algo sabía Bella por su trabajo era cuando alguien no quería hablar de su familia y lo entendía a la perfección.

- ¿Que haces aquí por cierto?

- Me dejaste tu bufanda y como esta empezando a nevar me pareció lo mejor devolvertela no quiero que te enfermes por mi culpa, supuse que no te habrías ido muy lejos por lo que vine a buscarte, creí que estabas en problemas por eso me metí

- Bella- Le dijo tan suave que ella no supo responder y él lentamente tomó las dos puntas de la bufanda negra, tiró levente de estas y estando muy cerca de ella dijo- Se supone que yo debo cuidar de ti y sin embargo hoy tu me salvaste de mi hermano

Ella solo lo miraba sin emitir sonido alguno

- Voy a cuidar siempre de ti, voy a protegerte así que por favor... Enamorate de mi Bella- Diciendo esto ultimo dio un tirón mas y apoyó sus labios sobre los de ella pero con calma, sutil, como un pequeño mensaje de como se sentía él respecto a ella.

Mirando hacía atrás no se si él la amaba o si necesitaba hacerlo pero ese momento es algo que jamás olvidará porque él no lo sabía en ese momento pero habría dado el primer paso para que grandes puertas se abrieran y en un punto todos lo lamentarían.

Ella apenas y movió sus labios una vez que él se alejó lento, como si costara alejarse

- No tienes que responder nada, nada va a cambiar entre nosotros. No te preocupes por favor, solo tómate tiempo para pensar en nosotros

Y sin esperar respuesta solo se marchó.

Bella volvió lentamente a su casa, no podía dejar de pensar en la situación, fue algo inpensado, incluso parecía sacado de uno de sus libros, nadie la había besado con tanta ternura y por un momento pensó en la última vez que fue besada, fue ahí donde algo cambió

"- ¡No voy a dejarte nunca!- La voz de un hombre apareció en su mente

- ¿Eres tan tonto como para quedarte?

- Sí si tu eres tan tonta como para amarme

Las imagenes fragmentadas comenzaron a aparecer en su mente

-Isabella" 

Su voz se escuchó con tanta claridad que ella realmente volteó y en ese instante vio como el castaño tomando su rostro hundía sus labios en los de ella. 

Las imagenes y las voces iban y venían hasta que reconoció el lugar donde se hallaban esas imagenes

"La librería" Y sin dudar salió corriendo en busca de él 

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Capitulo 4! Por favor comenten!!! Así puedo saber que les parece 

Con Cariño- Oli 


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