Pasaron un par de días antes de que Bella volviera. Estaba atardeciendo cuando ella atravesó la puerta de madera, caminó lentamente por la librería
- Estoy de vuelta- Le dijo a Edward al verlo de pie concentrado en un libro
Al verla él solo cerró fuertemente el libro y sin decir nada la rodeó con sus brazos
Estuvieron así unos minutos hasta que Dimitri apareció en el lugar.
De apoco volvieron a la rutina, Bella con su investigación, Dimitri se entrenaba todas las mañanas tras la puerta de madera pero ella no sabía que sucedía ahí.
- ¿Que eres?- Le volvió a preguntar
- Ya te dije...
- Un muerto pero... ¿Por que no...
- ¿Estoy del otro lado?
- Exacto
- Simple... No soy merecedor de ese lugar. Cometí un pecado imperdonable Bella y ahora estoy condenado a vagar por la tierra para toda la eternidad, mi existencia no termina nunca
- ¿Puedo saber?
- Me crié en el centro de Petrograd, en aquel momento era la capital de Rusia. Tenía una familia de origen noble pero estabámos devastados economicamente. Mi padre, mi madre y mi hermano mayor. Por su parte mis padres se esforzaban por mantener las apariencias, mi hermano era el unico cable a tierra, trabajaba mucho para que yo pudiese estudiar, por eso cuando terminé la primaria comencé mi entrenamiento en el servicio militar, sabía que de esa forma tendría un trabajo seguro y mi hermano no tendría que volver a preocuparse por mi.
Me entrenaron como si de un animal se tratara, de apoco fui perdiendo mi humanidad, me volví reacio, insensible. Para mis catorce años ya era un robot. No tenía un sentido propio en mi vida, solo hacía lo que se me ordenaba.
" ¿Soldado puede ayudarme?"
Una tarde de verano una joven me pidió ayuda para mover unas cajas, estabamos en el mercado. Ella debía tener unos dieciciete años, de cabello castaño y ojos azul brillante, su piel clara como la luna.
"- Eres joven soldado
- Si señorita, comencé mi entrenamiento antes que el promedio
- Ya veo, muchas gracias por sus servicios y su ayuda
- Por nada- Y sin mas solo me fui
Pase semanas yendo al mismo lugar pero no la pude ver. Me tomó un mes volver a verla pero una vez que la encontré, por primera vez tenía una extraña sensación en mi pecho.
"- ¡Soldado!- Me reconoció en seguida- Ha pasado tiempo..."
Conversamos esa tarde y muchas otras, me gustaba su compañía, no tenía que mostrarme como un noble ante ella, no tenía que ser un buen hijo, un buen hermano, solo era yo.
Anya era una joven muy animada como graciosa, era coqueta para su edad pero era libre y eso quería ser yo, ser libre y estar con ella.
"- Voy a casarme"
Me dijo una tarde y yo creía que el mundo se partía a mis pies
"- El es noble y nadie puede saberlo"
Esa sonrisa... La odié, esa luz en sus ojos iluminó mi oscuridad, ese tono dulce en su voz me asqueó.
"- Nos vamos a fugar mañana en la noche"
Mi corazón se partió en el miedo y la desesperación. Sin meditarlo ni medio segundo contraté a un hombre para que hiciera desaparecer a su prometido. Yo realmente la amaba y estaba seguro de que era yo el indicado para ella, que era a mi lado y solo a mi lado su lugar. Pero a veces el amor no es suficiente, y otros sentimientos igual de depredadores se adueñan de nosotros, y de apoco comienzan a devorarnos. Esa noche su prometido murió por mi causa.
Sabes... La vida tiene una forma tan misteriosa como sorprendente en su actuar, ese hombre que ella realmente amaba, por quien estaba dispuesta a dejarlo todo... Era mi hermano mayor.
Yo asesiné a mi hermano, la persona que estaba dispuesta a todo para protegerme.
Al cometer tal pecado fui castigado a deambular por la tierra sin tener lugar a dónde ir.
- Y como a Caín, Dimitri también fue castigado por su traición- Interrumpe Edward
- ¿Querías saber algo mas? Ustedes los humanos son muy curiosos
- Lo siento
- No te disculpes, ven conmigo Bella quiero mostrarte algo- Edward habló
Despues de que Bella tomó su cartera ambos salieron, al atravesar la puerta la brisa calida de un proximo verano les acarició la piel. Caminaron por un largo tiempo en un silencio bastante cómodo, ella caminaba por el borde de la carretera y se sostenía en el hombro de él.
- Aquí es- Le dijo Edward y tomando su mano la llevó a un gran descampado
- Es un bonito lugar
- Estas sola, de noche y en un gran descampado con un demonio, ¿No tienes miedo?
- Mmm.. No, nunca te he tenido miedo Edward
- Deberías- El intentó sonar misterioso y aterrador pero ella lo ignoró
- ¿Que hacemos aquí?
- Quería mostrarte un cielo estrellado- Le respondió elevando las manos
- Wow... Es hermoso
- En el libro La Divina Comedia expresan que esas luces son las almas que llegaron al Paraiso
- Oh ya veo
- Es una estupidez
- ¿Que?
- Me escuchaste, es una estupidez, tu no necesitas estar ahí para brillar así, para mi tu eres el ser mas brillante que he visto por que también tienes oscuridad y la aceptas, entiendes que hay personas que no son del todo buenas y eso esta bien. Escuchaste la historia de Dimitri y tu rostro no cambió ni una sola vez. No eres como el resto de los humanos que juegan o aparentan ser heroes, tu haces lo que te dicta tu propia naturaleza y por eso Isabella, tu brillas. Pero si llegado el momento aún quieres cruzar pues yo mismo te llevaré hasta ahí, lo prometo
- ¿Cómo harías tal cosa?
- Yo puedo, tu confía en mi. Pero hasta que el momento llegue... ¿Te quedarás con los rechazados por el paraíso?
- Edward..- Susurró, lentamente acortó la distancia entre ellos y suavemente apoyó sus labios sobre los de él
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Y corte! ajajajaj Que les pareció? Han leído la divina comedia? Yo enseño literatura y me encanta trabajar con ese libro! Pero no de manera aburrida jaja
Comenten que les pareció!
Con Cariño- Oli

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Donde tu estes ...
FanficElla, una humana que no puede recordar El, un demonio que sobrevive por los recuerdos Cuando el destino los vuelva a juntar... Isabella luchará por su memoria y Edward por mantenerla lejos En una vieja y olvidada librería ellos se perdieron ahor...