Hazme tuya

reencuentro (parte 2)

Mi interior ardía, como una llamarada que recorría mi cuerpo y terminaba en mi vientre, la deseaba con locura y ella a mi, con gran habilidad llevó sus manos a mis senos, busco mis pesones y jugueteo con ellos mientras introducía su habida lengua por mi boca, estaba sorprendida de lo mucho que había mejorado sus caricias, una parte de mi estaba celosa de no haberle enseñado yo, pero también aprendí un par de trucos; metí mi mano por debajo de su vestido masajeando su culo, ella gemia en mi boca, y apreté su glúteo con fuerza dejando mi dedo peligrosamente cerca de la entrada de su sexo, lentamente mi dedo se deslizó dentro de ella, estaba muy húmeda fui metiendo un segundo dedo aumentando la velocidad, Charlotte hecho la cabeza hacia atrás tratando de contener un gemido

La giré contra un Mercedes-Benz negro que teníamos detrás, la levante del suelo ayudándome del auto, ella me sujetó con fuerza de mi cuello mientras sus piernas se adherian a mi cadera, la sostenía de la cadera mientras mis impacientes dedos se introducían agilmente en su cálida y ya extremadamente húmeda vagina.

-¡no te detengas! - me suplico

Le sonreí triunfante y continúe, Charlotte seguía besándome con desenfreno, sin notarlo desanudo la parte de arriba de mi vestido, alejo un poco su cuerpo del mío y me contempló unos segundos al bajar la mirada y para fortuna de ambas no llevaba sostén de inmediato introdujo uno de mis senos a su boca, y succiono con fuerza haciéndome gruñir, e introduje aún más mis dedos en su interior.

En aquel solitario estacionamiento, a la luz de las tenues lámparas, dos chicas se demostraban de la única manera en que sabían todo el amor que alguna vez sintieron la una por la otra, o así lo pensé.

De pronto una sensación cálida y mojada se deslizaba por mis manos, y un grito dulce se escapaba de sus delegados labios color carmín, con la respiración agitada me incline sobre su pecho y ella acariciaba mi cabello de modo tierno peinandome con sus dedos.

-te amo - susurro, besandome la frente

Abrí los ojos y fui bajandola lentamente para incorporarnos, la tomé del cabello y la bese con dulzura, me acomode el vestido y camine a paso decidió al interior del auditorio, pérdida en esa palabra que para mi ya no significaba nada.

-¿a donde vas? - me gritó desesperada

- a new jersey - dije distraída

-¿ahora?- dijo desconcertada

- si, quiero estar lo más lejos de aquí, ¡cuanto antes!

-espera - me tomó del brazo, girandome para mirarla- ¿por que te quieres ir?

-no quiero quedarme a escuchar tus palabras vacías, ya no funcionan en mi, antes habría hecho un esfuerzo para que te quedarás pero ahora me e probado a mi misma que no me causas el mismo efecto

- entonces... ¿todo esto que a sido para ti? - dijo con los ojos abiertos y anhelantes

- la despedida...

-yo no quiero que te vallas, creí que esto significaba que me perdonabas

-eso es, te perdonó pero no significa que vallamos a volver, ahora hemos terminado sin resentimiento, seremos amigas si así lo quieres pero nunca seremos una pareja, siempre te recordaré abrazada de stephanie en su piscina mirándola con los mismos ojos de amor con los que me miraste alguna vez

- lamento tanto que nos hayas visto de esa forma, ahora entiendo lo que te molesta

- ah ¿enserio? ¿y que entiendes? - dije irritada

- crees que amaba a steph tanto como a ti... estas celosa - susurro agachando la cabeza

-reí - entonces no lo sabes - me acerqué a su rostro furiosa- nunca lo vas a entender, me enferma, ¡no!, me mata que seas tan tonta, tan ingenua, eso no me importa, me molesta como te burlaste de las dos como jugaste, te dejé vivir conmigo por que creí que nos amabamos mientras te revolcabas con steph, y que me quitaras a mi mejor amiga a la única que siempre estuvo a mi lado dejándome más sola y pérdida de lo que ya estaba y ahora ¿crees que estoy celosa? Por favor abre los ojos no todo se trata de ti, tienes que madurar. - me giré furiosa