Espadas y hechicería: nada de mineral

Capítulo 71: Ser el adulto

Ser el adulto

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Las cosas en el castillo se calmaron a medida que se acercaba el final del año. El regreso de Dumbledore fue parte de eso, pero los exámenes de fin de año también se cernían sobre los estudiantes. A principios de junio, no había tiempo para travesuras cuando tenía que meter todo lo que podía en la cabeza antes de tener que tirarlo a un pedazo de pergamino.

Shirou salió de su última clase del día, Encantos con Slytherin, y tomó nota de los grupos de estudiantes de Slytherin que habían comenzado a agruparse en grandes alcobas y aulas vacías cercanas.

Había habido una broma importante, si se podía llamar así, desde que Dumbledore regresó. Alguien, o algo, había destrozado los muebles de la sala común de Slytherin y los había apilado en su propia chimenea encendida. El aspecto más confuso del crimen fue que se había producido a altas horas de la noche en la sala común de Slytherin, mientras que los miembros de último año de la Casa Slytherin estaban realmente presentes. A pesar de eso, ninguno de ellos se dio cuenta de lo que estaba sucediendo hasta que alguien notó el aumento significativo de la temperatura ambiente. El culpable aún era desconocido, pero los estudiantes de Slytherin tuvieron que lidiar con una grave falta de asientos y espacio en la mesa en su propia sala común hasta que se pudieran encargar más durante el verano. Por lo tanto, tuvieron que formar grupos de estudio donde había sillas y mesas disponibles.

Al ver a sus compañeros de estudios enfocarse en sus exámenes, Shirou sacó la guía de estudio que Rin y Hermione habían preparado y la examinaron mientras se abría paso por los pasillos. Él también se estaba reuniendo con otros para estudiar para la final.

En realidad no necesitaba estudiar mucho en este momento. El haber pasado por el sistema escolar japonés le dio una ventaja definitiva sobre muchos de los estudiantes en Hogwarts. Incluso si no tenía absolutamente ninguna base en su magia o historia, era muy practicado en el arte de estudiar y memorizar. En muchos sentidos, la educación obligatoria le enseñó cómo aprender, o al menos cómo aprender cosas de una manera que podría regurgitar fácilmente en un examen estandarizado.

Hogwarts era una escuela de magia, pero todavía era una escuela, y aunque el material podría ser diferente, todas las pruebas se parecían a las que había tomado en la escuela secundaria. Estaba más que acostumbrado a prepararse para las pruebas estandarizadas en este punto, por lo que su participación en las sesiones de estudio fue más tutoría que estudiar. No fue muy útil para él, pero disfrutó ser útil para sus amigos; y si él obtenía alguna satisfacción satisfecha de ver una versión más joven de Rin, a regañadientes, le agradecía por señalarle los lugares en los que estaba equivocada, entonces ciertamente no era algo que iba a admitir a nadie.

Sus labios se torcieron en una sonrisa triste mientras caminaba por la escuela hacia el salón de clases que él y sus amigos solían usar. En el camino, pasó junto a grupos de estudiantes que conversaban en voz baja entre ellos a través de minucias en el aula, así como a innumerables estudiantes con sus caras escondidas en un libro u otro.

Cuando llegó al aula que estarían usando, notó que Rin de esta dimensión se acercaba desde la otra dirección.

Ella entrecerró los ojos tan pronto como lo vio. "¿De qué estás sonriendo?"

La acusación en su tono era clara y Shirou rápidamente controló su expresión para ocultar su creciente alegría y creciente nostalgia. "Nada importante."

"Sheesh, ¿quién te enseñó a ser tan reservado todo el tiempo?"

Los labios de Shirou se arquearon en una pequeña sonrisa antes de que pudiera detenerse. Siempre había sido algo reservado, con el hecho de tener que ocultar el hecho de que podía hacer magia. Sin embargo, el que realmente había aprendido esa lección en casa no había sido otro que el Rin Tohsaka de su dimensión.