Espadas y hechicería: nada de mineral

Capítulo 76: Descarga de equipaje

Descarga de equipaje

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A medida que transcurrían los eventos de fin de año, el viaje en tren de regreso a Londres tendía a ser bastante anticlimático. Había sido así el primer año y lo fue aún más el segundo año.

Iris había sido silenciosamente consciente de la inminente separación y cambio que traería el verano, pero la realidad de la situación no se había establecido hasta que el taxista la ayudó a ella y a Shirou a cargar su equipaje en el maletero.

Ahora que todas las bromas estaban detrás de ellos, el primero de los cambios obvios estaba teniendo lugar con Shirou haciendo la transición de su personaje de estudiante a tiempo parcial a su personaje de investigador a tiempo completo. Mientras su automóvil navegaba por las calles de Londres, él ya estaba leyendo un libro sobre varias formas de transporte mágico y todas las formas en que violaban casualmente la física.

Esto le quedaba bien a Iris mientras se sentaba en silencio en la parte trasera del auto. La despedida en la estación de King's Cross la había dejado melancólica y amargada.

Ver a la familia de cada persona salir de la multitud para abrazar a su hijo y llevárselos fue quizás uno de los momentos más solitarios en la vida de Iris. Nada condujo a su estado de huérfana a su hogar, como tener a cada persona que conocía encerrada en un amor familiar, dejándola esperar a padres que nunca llegarían.

Claro, los padres de sus amigos eran amables con ella, pero realmente, realmente no era lo mismo. Y de alguna manera simplemente condujo el cuchillo más profundo.

La madre de Hermione había atraído a Iris para un abrazo, un beso en la mejilla y una promesa de invitarla pronto. El padre de Hermione extendió la mano para revolverle el cabello, una acción que transmitía tanta familiaridad y afecto como los esfuerzos más íntimos de su esposa. Pero, cuando todo estuvo dicho y hecho, dejaron la estación y la dejaron atrás.

Los padres de Rin y Sakura la saludaron y le agradecieron por cuidar a sus hijas. Sin embargo, cada palabra que decían tenía un tono formal algo distante, similar al que Rin había empleado antes de que un desayuno tradicional japonés la atrajera a sus desventuras.

Luna les presentó a todos a su padre, Xenophilius Lovegood, a quien Iris solo había conocido por correspondencia antes. Él era ... exactamente como Iris lo había imaginado al leer sus artículos y cartas. Viejo y excéntrico. De hecho, parecía mucho, mucho más viejo de lo que sugeriría su edad. Parecía que podría tener poco menos de la edad de Dumbledore, cuando en realidad solo era un poco mayor que los padres de Hermione.

Su excentricidad lo hacía parecer distante, incluso con su propia hija. Sin embargo, las sonrisas de complicidad que compartieron y el balbuceo casi indescifrable que solían hablar entre sí mostraron la cercanía de su relación, incluso si Xenophilius olvidó en qué año estaba Luna.

Hizo una serie de ofertas para publicar artículos para ella nuevamente, pero Iris estaba bastante segura de que estaba motivada más por las cifras de ventas que por el afecto por la amiga de su hija.

La llegada de los padres de Illya había sido un tipo de experiencia diferente al resto.

Irisviel había llegado en una ráfaga de movimiento y se apresuró a atrapar a Iris e Illya en un fuerte abrazo. Mientras todavía los sostenía a los dos, se quejó lastimosamente de que Shirou esquivaba su intento de abrazarlos a todos.

Mientras todavía los sostenía, se volvió hacia Iris y soltó casualmente palabras que habían puesto todo al revés.

"¡Iris!" Sus ojos prácticamente brillaban con honestidad y entusiasmo mientras hablaba. "Si no tienes planes, ¿quieres venir a quedarte con nosotros para el verano? ¿O tal vez para siempre?" Ella dejó escapar un ruido excitado y los abrazó más cerca. "¡Ustedes dos son tan lindos!" Ella jadeó y los liberó a ambos del abrazo para poder aplaudir frente a su cara. "¡Lo sé! ¡Deberíamos ir de compras juntas! Ustedes dos—" Kiritsugu la cortó poniendo su mano sobre su hombro.