Epílogo 2

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*Jimin*


Cinco años han pasado desde aquella navidad. Muchas cosas pasaron desde entonces. Todos nos graduamos, por supuesto. Gracias al dinero guardado, conseguimos remodelar mi apartamento para que pudieran vivir Hoseok y Taehyung en él. Ahora vivimos los cuatro allí muy felices, pues nuestras vidas van según lo habíamos planeado.

Conocimos a una pareja que nos ayudaron a encontrar un local lo suficientemente grande como para trabajar los cuatro juntos. Ellos eran Namjoon y Jin. Adorables era la palabra que mejor los describía. Namjoon era muy torpe, rompía todo a su paso. Jin lo regañaba cada dos por tres, pero sin dejar de tener ese brillo en los ojos que decía que estaba perdidamente enamorado de aquel Dios de la destrucción.

Hoseok y yo dábamos clases de baile. Él daba clases de hip-hop. Yo baile contemporáneo. Jungkook daba clases tanto de canto como de aprender a tocar instrumentos. Taehyung daba clases de interpretación. En definitiva, teníamos una academia para formar Idols. Luego se nos unieron Nam y Jin. Namjoon daba clases de inglés y de rap. Jin, que se convirtió en la mama del grupo, optó por dar clases de cocina, a demás de algunas lecciones vocales, ya que también cantaba como los mismísimos ángeles.

De a poco, nuestra academia fue creciendo. Pudimos rentar otro lugar más grande. Empresas de Idols se comunicaban con nosotros para saber si había alguien lo suficientemente bueno como para lanzarlo al estrellato. Nos hicimos famosos haciendo lo que nos gusta.

Como nuestra familia creció, tuvimos que comprar una casa como para caber los seis sin problemas. No era una mansión como las que salen en las películas, pero casi. Allí estábamos muy a gusto.

Descubrimos que el profesor Min se quedó sin trabajo, luego de que nosotros nos graduáramos. Tuvo muchas quejas por su forma de actuar. Según el resto de profesores, el director y la asociación de padres, el no era nadie para echar de su clase a los chicos solo por el hecho de que a él no le entrara por sus oídos. "Tonterías" decía él. Él me dio muchos momentos felices en sus clases. Así que hablé con los chicos y todos estuvieron de acuerdo en llamarlo y preguntarle si quería trabajar con nosotros.

Una semana después de contactarlo, aceptó. Y se añadió un integrante más a la familia, pues puede parecer frío. Pero en su interior esconde alguien cariñoso y amable. Era muy bueno en su trabajo, tenía mucha paciencia, mucha más que con nosotros. Nos dijo que intentó cambiar después de todas esas quejas, pero que no aseguraba no volver a las andadas.

En definitiva, todo iba bien.

No sé exactamente qué fue lo que pasó después de aquella cena de Navidad con Hobi y Tae. Solo sé que desde entonces eran novios. Se querían muchísimo. Y no les importaba los más mínimo lo que dijeran los demás sobre ellos. No iban a quedarse con las ganas de darse un beso simplemente por el qué dirán. Y yo los admiraba por eso. Y por qué no decirlo, también los envidiaba.

Por mi parte, a Jungkook le costaba más mostrarlo en público. Yo nunca le presioné, se presionaba él mismo. Estuvo un tiempo en el que vivía cabreado por el simple hecho de que no era capaz ni de coger mi mano delante de más personas. Yo lo entendía, por eso no le presioné ni lo más mínimo. Cuando estábamos a solas, o en su defectos con la "familia" si era cariñoso. Pero de a poco comprendió que lo que dicen los demás no te debe importar. Y menos, teniendo en cuenta que su padre nos aprobó casi desde el minuto uno. Entendió que si tenía el apoyo de su verdadera familia, los demás no importaban en absoluto.

Gracias a Jungkook he pasado de ser un chico que odiaba la navidad, a amarla como nunca. Ya que fue una navidad donde cambió su vida por completo. Una navidad que jamas podrá olvidar. Y no me refiero a la navidad donde Jungkook vino a cenar de improvisto, no. Para poneros en situación, ahora es verano, pues bien. La navidad pasada fue en compañía de todos. Fue como casi todas. Sin embargo, yo noté como el ambiente algo extraño.

¿Me amas? •KOOKMIN•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora