¿Es Necesario?

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-¿te gustó la sopa?

Le pregunté a Lizandro.

-Sí, está muy buena, ¿dónde aprendiste a cocinar?

-Mi madre me enseñó.

-Pues sí te enseñó bien, cocinas muy bien.

Me dijo Lizandro mientras seguía comiendo, y yo me sonroje.

-Pues muchas gracias, me alegro que te guste.

-No, gracias a ti.

Dijo mientras terminaba la sopa.

-Ya acabe, realmente muy buena, ¿donde puedo lavar el plato?

-No, dámelo, yo lo lavo.

Le dije estirando el brazo para recibirle el plato.

-De verdad, yo lo lavo, tu ya hiciste mucho por nosotros, mínimo dejame lavar el plato.

-Ok, muchas gracias Lizandro, puedes lavar el plato en ese fregadero. - señale al fregadero

-gracias

Lizandro se levantó y lavo el plato.

-Perdón, yo no lave mi plato.

Dijo Isai preocupado.

-Ay no te preocupes, a mi no me molesto lavarlos.

Le dije con una sonrisa.

-Muchas gracias, y a mi también me gustó mucho tu comida.

Me dijo sonriendo.

-Gracias Isai, eres muy lindo.

Termine por darle una caricia en su cabello.

-Y dime, ¿como se llama tu madre?

Me pregunto Lizandro sentado en la silla del comedor.

-Mi madre se llama Luz.

Dije un poco triste.

-A, perdón, mejor cambiemos de tema,¿cuánto tiempo te quedaras con tu primo?

Dijo Lizandro entendiendo mi tristeza.

-Pues...

Me quedé en silencio pensando una escusa.

-No se realmente, en mi casa esta pasando un problema, y pues yo siempre me he llevado bien con él, así que por eso me trajeron.

Dije intentando mostrar seguridad.

-Está bien, espero que todo se arregle pronto.

-Muchas gracias.

Respondí con una sonrisa que Lizandro me regreso y me sonroje.

-¿Por qué estas roja? Samay

Cuando Isai me preguntó eso me puse aún más roja,

-Aaaaa, p-p-pues, por que, recordé digo digo acorde de alguien.

Respondí nerviosa y mirando a todos lados pensando una escusa.

-¿Acaso tienes novio?

Preguntó Lizandro con una cara de decepción , me sorprendió que lo dijera así.

-No, no, no, es que me acorde de un chico que me gustaba.

Respondí nerviosa.

-Aaa, ok, que bueno.

Terminó dándome una sonrisa.

-Oigan yo estoy aburrido.

Dijo Isai cabizbajo.

Sumergida en las mentiras Donde viven las historias. Descúbrelo ahora