Capitulo 13

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Ya habian pasado 3 dias desde eso. Adrien y Marinnete no se habian podido ver despues de eso. Tenian mucho trabajo, los bocetos de su colaboracion y los de españa.
Tenian una semana para terminar al menos la.mitad.
Marinnete, decidió trabajar desde casa dos dias. Despues de todo ya le faltaba poco para culminar sus bocetos.

Mientras tanto Adrien no podia dejar de pensar en ella, todos los dias la veia con su traje formal, sus faldas de tubo que resaltaban su hermosa figura.
Siempre la veia en las horas del almuerzo. Solo es esas veces lograba ver sus hermosos zafiros.

Se dió cuenta que ella trabajaria dos dias desde su casa. Sonrió y su cabeza le dió una gran idea.

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- Por fin en casa.... - suspiró y se recostó en el sofá.
Despues de unos minutos estaba en su bañera, relajada.
Fue a su habitacion y se cambió de ropa, optó por algo simple, unos shorts grises y una camisa de tiras blanca. Fue a la cocina y destapó una botella de champaña. Una copa, tomó su lapiz, computadora y libreta y empezó a trabajar.

Dos horas despues se habia quedado dormida, cuando escucho el timbre se cayó del sofa. Adolorida, se levantó del suelo.
Al abrir se llevó una gran sorpresa.

- Adrien...

El rubio llevaba una sonrisa en sus labios unos chocolates en sus manos al igual que un ramo de rosas.
Dió un paso adelante para quedar frente a frente con la azabache.

- Princesa...

- que haces aqui?

- no me vas a dejar entrar? - sonrió travieso

- Tonto... Entra

Una vez a dentro, marinnete cerro la puerta no muy convencida de lo que adrien tenia en mente.

- bien aho- sintió unos fuertes brazos agarrandola de la cintura y unos labios en los de ella. Correspondió a su beso y adrien rió en el.

- vine a verte- dijo con una pequeña sonrisa en su rostro. Ella enarcó una ceja no muy convencida de sus palabras.

- bien... Puede que... Me quede contigo dos dias...- musitó mientras bajaba sus besos en el cuello de marinnete.

- que? Te vas a quedar?

- si...

- y..... Como por que? - pregunto con una mirada picara.

- Te extrañe- solto las rosas y los chocolates para cargarla, ella enrosco sus piernas en las caderas del rubio.

- Mucho o poquito?

- Demasiado...- se dejó caer en el sofa dejando a Marinnete a horcadas de el. Le robó un beso de sus hermosos carmesíes. Ella correspondió a su beso.
Tomó las mejillas del rubio para profundizar el beso. El mientras tanto el la rodeaba por la cintura, la muchacha empezó a mecerse cosa, que despertó al rubio. El gimió en el beso. Al separarse sonrienron traviesos. Desvió su mirada y pudo ver la computadora, y los bocetos de marinnete.

- que haces?

- trabagando- dijo mientras hacia un puchero y se bajaba del rubio.
El bufó y se hizo a su lado. Empezó a respartir besos en su cuello y caricias en sus brazos y piernas.

- adrien... No....

- um? - siguió con aquellos roces. Marinnete se mordia el labio inferior ansiosa.- no que?

- para... Tengo que.... A-ah - gimió al sentir como el rubio metia sus manos dentro del short y empezar a estimular su sexo por encima de sus bragas.

- estas mojada....

- tu estas duro...- dijo mientras tocaba el miembro del agreste. Este sonrió al instante tomó a la azabache para que quedara de nuevo a horcadas de el. De nuevo sus labios se encontraron en un intenso beso.
Adrien le quitó la pequeña blusa, dejando expuestos sus pechos apenas cubiertos por la prenda.

Empezó a masajearlos, marinnete jadeó y le quito la camiseta al rubio. Sus caderas se movian libremente, y adrien lo disfrutaba.
Tomó las caderas de la muchacha que tan loco lo traia. La despojo de su short y ella le quitó juguetonamente el cinturon.
Marinnete empezó a masturbar a adrien. Mientras el amasaba sus gluteos con cierta pilleria.

- a-ah... Princesa .... Mas...

Ella sonrió juguetona y empezó a dirigir la cabeza del miembro a su intimidad.

- a-ah... Que niña tan.... Caliente...

-a-ah a si me quieres....

Empezó a moverse de arriba a abajo y adrien disfrutaba de aquel momentos con su princesa.

- Ma..... Marinnete...- echo la.cabeza hacia atras mientras sus caderas se sincronizaban con las de ella.

- Adrien.... A-ah. Mas....

- ung.... Que princesa tan insaciable.... - una fuerte embestida hizo que marinnete soltara un fuerte gemido.

- a-ah me encanta...

Adrien la.beso con fuerza, sentia su liberacion cerca.

- estas.... Muy estrecha.... Joder!- echo la cabeza hacia atras de nuevo. Sintiendo como los musculos de la muchacha se estrechaban cada vez mas.

sus frentes se unieron y ambos sonrieron.

- Te amo...

- Yo tambien Te amo...

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Ya era de noche y marinnete estaba en su cama terminando los ultimos detalles de su viaje a Barcelona con Adrien.
Mientras tanto el rubio se encontraba en la cocina preparandole la cena a su hermosa princesa.
Pidió una pizza y unas hamburguesas.
Subió al segundo piso encontrandose con el trasero de la azabache y sus piernas al aire. Se veia concentrada en su trabajo. Sonrió al verla tan normal.
Tenian demasiado trabajo y el solo habia hecho la mitad o algo parecido.

Se tiró a la cama sintiendo como Marinnete saltaba del susto.

-Tonto! Casi me matas!

- pero no lo hice. Que haces? - se acomodo a su lado con una fresa en sus labios.

- trabajando... Dame...- abrió la.boca y adrien sonrió malicioso.

- por donde? - dijo en tono juegueton. Ella enarcó una ceja fingiendo seriedad. Se metió la fresa a sus labios y dejo una parte afuera.
Marinnete entendió lo que debia hacer, a si que unió sus labios con los de el y se besaron hasta no dejar ningun rastro de fresas en sus bocas.

- que aburrida...

- si claro... Tu ya terminaste?

- um? No... Voy en la mitad y tu?

- solo me faltan los accesorios y algunas ropas para Invierno y de verano.... Zapatos y.... Vestidos.

- y España?

- hice algunas cosas....  El resto lo quiero hacer cuando estemos alla. - se acurruco en el pecho del mayor.

- Pedi pizza y hambuerguesas...

- enserio....?

- Sip.

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Despues de comer las hamburguesas, otra seccion de sexo en la sala, besos y muchos mimos ambos estaban recostados en la cama.
Acababan de hacer el amor, totalmente desnudos ambos estaban haciendose caricias uno al otro.
Marinnete fue la primera en dormirse, adrien podia sentir su respiracion.
Sonrió al verla tan hermosa, siempre seria a si no la dejaria ir de nuevo. No otra vez.

【Lᴀ Hɪsᴛᴏʀɪᴀ Cᴏɴᴛɪɴᴜ́ᴀ】 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora