♡~El Día Que T/N Se Calle Le Saldrán Subtítulos~♡ JJK. [COMPLETA]

22

Hombres del mundo: Cuando les pregunto «¿qué dijiste?» no es porque no los haya escuchado, es para comprobar si tienen huevos de repetirlo.

Rose, The man-hater

Es viernes y el día transcurre sin problemas.

No me separo del móvil, por si acaso mi querido Mr. Jueputa la cagaba de nuevo, pero nada hace presagiar que vaya a ser así, por lo que, van pasando las horas, me voy tranquilizando.

Tanto es así, que a las ocho de la tarde Jen me pregunta si salimos a dar una vuelta.

—No tengo muchas ganas —le contesto, mientras Fenrir mordisquea mi zapatilla.

En ese momento aparece Marcia en el salón y el cachorro corre hacia ella, que le tiene pánico, y comienza a gritar como loca.

—¡Dios santo, el demonio quiere comerme! —exclama aterrorizada, subiéndose en una silla, mientras Jen y yo lloramos de risa.

Me levanto y tómo a Fenrir en brazos.

—Marcia, ¿no ves que es un perrito inofensivo? —pregunto con él lobito en mi regazo y poniendo cara de pena.

—¡Ese bicho de perro no tiene nada! ¡A mí no me engañas! —protesta a la vez que se marcha a la cocina a toda prisa.

—¿Qué se supone que es? —me pregunta Jen, tomándolo en brazos.

—Es un lobo —le cuento.

Ella se parte de risa.

—Sí, está claro, y además por las noches se transforma en un elefante — se mofa, porque es evidente que no me cree.

—Me lo trajo JB la otra noche —le comento.

—¡Entonces menos me trago que sea un lobo! El bobo de JB jamás haría algo así —añade entre risas.

—Se presentó en la cristalera del porche en plena noche, dando golpes al cristal, para regalarme el cachorrito y pedirme que volviera a la empresa.

—¡¿JB?!

—Sí, era él. — capaz lo soñé, porque a mí también me extrañó un montón que actuara de esa manera.

—¡Qué romántico! —me provoca.

—¡Mucho! —bromeo.

En ese momento suena el teléfono.

—Hablando del rey de Roma —comento al ver su nombre en la pantalla del móvil—. ¿Sí?

—Buenas noches, preciosa —es la voz de JB —. Te llamo porque esta noche hay una gala benéfica en Sunset Boulevard y tus padres no pueden asistir, me han pedido que acudamos nosotros en su lugar. ¿Estás ocupada?

Pongo los ojos en blanco.

—Estaba por salir con mi hermana… «¡Mentirosa!», vocaliza Jen sin voz para que lea sus labios, y yo hago una señal con el dedo como si le cortara el cuello para que se quede calladita.

—Esta gala es bastante importante, t/n, no puedes faltar —insiste.

—Ya no tengo nada que ver con la empresa —me defiendo.

—Pero sí con tus padres. Vamos, este gesto servirá para que se reconcilien, no seas rencorosa. Te paso a buscar en media hora.

Y cuelga antes de que pueda negarme con más rotundidad.

—La concha de su madre —me quejo, mirando el móvil.

—¡T/N!— me grita Marcia alterada.— Últimamente estás muy ordinaria, mas de lo normal, dejas mucho que desear.— me reprocha como si fuera mi madre.