Hermione estaba estresada. Hacía más de dos meses que el Ministerio estaba percibiendo una actividad extraña en los callejones, y llegaban reportes de magos que traficaban criaturas mágicas. Y esos casos solían resolverlos rápidamente, con Kingsley Shacklebolt como el nuevo ministro, su administración organizada y sus fieles seguidores en el el Ministerio, todo parecía ir bien. Si había criminales que encerrar, lo hacían en una nueva prisión, cuyos guardias eran magos y no dementores, porque Azkaban había dejado de funcionar para siempre. O por lo menos, no volverían a usar la isla como prisión mientras Shacklebolt y los suyos estuvieran en el ministerio.La mayor parte de los rencores se habían dejado atrás, al menos dentro del ministerio, y todo tipo de magos y brujas trabajaban en armonía para mantener un equilibrio en el mundo mágico.
Ella había tomado la iniciativa de contactarse con Draco porque más allá de lo buen alquimista que pudiera ser, había conocido a magos oscuros, sabía como funcionaban esas prganizaciones, y sabía de posibles lugares de reuniones habituales. Malfoy se había mostrado un poco reticente a colaborar al principio, pero terminó aceptando.
Y a pesar de los prejuicios que manejaban al principio, Malfoy y Granger habían logrado congeniar y ahora eran un dúo dinámico bastante polémico en el ministerio. Además habían forjado una buena amistad, al descubrir las cosas que tenían en común, por lo que no era raro verlos pasar el rato juntos, más allá de lo laboral.
Era evidente que iban a correr los rumores pero no les dieron importancia hasta que Harry les preguntó directamente por su supuesto amorío.
—¿Hermione? ¿Estás ahí?— le preguntó Draco, causando que ella despertara de su ensoñación. Vio unos pergaminos ante ella, en el escritorio, y se acercó rápidamente a mirarlos.
—S-sí, perdón, ¿qué pasó?
—Te estuve hablando y no parecías estar escuchándome, ¿estás bien?
—Sí, ¿qué me decías? —preguntó.
—¿Recuerdas la pista que creímos que sería la clave para revelar el misterio?— ella asintió rápidamente, impaciente porque Draco siguiera hablando —bueno, o no era real y fue para confundirnos o es algo mucho más complejo de lo que pensé. Los reportes dicen de criaturas mágicas en particular, lo que mueve a estas personas no es sólo el valor que puede tener un animal por estar en peligro de extinción, sino algo más.
—Así que no es por dinero. Quizás... ¿El prestigio que puede traer una criatura indomesticable?
Draco no alejó la vista de los papeles en su escritorio mientras le respondía.
—Quizás...
—No encontramos nada sobre los vendedores, así que supongo que deberíamos cambiar de técnica, ¿hay algo sobre los compradores?
—¿Algo como qué?
—No sé, alguna pista de quiénes puedan ser... O algo que nos ayude a encontrar los lugares donde se reúnen.
—El último reporte fue de hace una semana, la actividad debe haber sido muy fuerte, porque el Ministerio percibió mucha concentración de magia oscura en algún punto del callejón Knockturn. Pero no pueden descubrir exactamente dónde fue. Los aurores estuvieron revisando locales, pero no encontraron nada.
—Draco, estoy enterada del movimiento de los aurores, y ya sabía lo de la magia oscura. Últimamente estás un poco distraído, ¿sucede algo?
—Nada, Hermione. Estoy cansado, como tú. Quiero terminar con esto de una vez por todas y no puedo brindar nada de información útil porque ya perdí todo tipo de contacto con gente peligrosa, que es por lo que me involucraron en este caso. No es que tenga algo contra ti, sabes que ya dejé los prejuicios atrás, pero... No quiero seguir siendo el títere del Ministerio para siempre.
—No es para siempre, simplemente tenemos que llegar al fondo de esto, y nos lo encargaron a ambos. No eres el único títere aquí —casi sin darse cuenta, estaba levantando la voz.
—Puede ser, pero entre los dos, si no logramos nada, el que va a perder el empleo y el poco prestigio que tiene, soy yo.
—⭕—
Harry había seguido el consejo de Hermione, y había citado a una vieja amiga a un pub para retomar relaciones.
La reconoció apenas entró. Estaba impecable, como siempre. Tenía un poco de maquillaje suave en el rostro que hacía que sus rasgos se vieran perfectamente equilibrados. Su paso seguro hizo que Harry se sintiera intimidado e inseguro.
—Hola, Harry —lo saludó ella, con una tranquilidad que Harry no logró imitar, aunque su voz sonó bastante tranquila cuando le respondió.
—Cho, ¿cómo estás?
Se sentó frente en la silla frente a él y pidieron unas bebidas suaves. Se pasaron el rato en una amena conversación, como si se estuvieran conociendo otra vez, como si todo lo que había pasado enyre ellos durante su adolescencia hubiera quedado en el pasado, cosa que Harry agradeció internamente. Entonces Cho guió la conversación, volviéndola un poco más seria.
—Harry, no es que no la esté pasando bien, pero tengo que preguntar, ¿por qué querías que habláramos ahora?
—Te extrañé un poco —dijo después de un breve momento de silencio— quería recuperar antiguas relaciones, y tú fuiste una de las personas más importantes para mí en Hogwarts.
—Oh, bueno —ella no parecía saber qué decir —yo estuve tratando de dejar mi adolescencia atrás —suspiró —y tú eres parte de ella.
En ese momento Harry se odió a sí mismo. Cho había perdido a su novio y había sido ignorada por el propio Potter, que no había tomado la , por tratar de averiguar qué le había pasado. Y ella le había hecho el favor de ir hasta un pub medio escondido en el que a él nunca lo reconocerían, sólo para escucharlo decir que quería recuperarla como si su voluntad no le importara en lo más mínimo.
—Lo siento —se disculpó rápidamente, pero ya era tarde; ella ya se levantaba de la mesa y se despedía—. Lo lamento, en serio. No había pensado... No lo había pensado en absoluto.
—No te preocupes, me caes bien, Harry. El problema no eres tú, sino todo lo que nuestra relación significó en ese momento para mí. Nos vemos.
Y dicho y hecho, se desapareció. Debía haberse sentido muy mal para no haber salido por la puerta.
Harry se quedó entonces solo otra vez, pagó por las bebidas de ambos y salió del local. Otra vez, lo había arruinado todo.
—⭕—
Voy a dejar esto por aquí y me voy a ir lentamente a terminar un trabajo de química.
Publiqué una especie de oneshot(?) Wolfstar, si se pasan por ahí no me ofendo.
Estoy tratando de darle algún sentido a esta historia. No sé si lo lograré.
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Nuevas Oportunidades || Drarry/Harco
Fiksi PenggemarAños después de la guerra, Ron y Harry deciden mudarse al mundo muggle. Empezarán una nueva vida, abriendo sus mentes a nuevas oportunidades, y ¿por qué no? sus corazones.