Capítulo 25

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Álex: Habrá más tardes así, verdad?

Yo: Habrá tardes mucho mejores- respondí sonriendo

Álex: Esa es la actitud- rio

Yo: Han llegado todos hace un rato, me lo acaba de decir Bati- dije mirando el móvil- Parece que ya va siendo hora de que vuelva a mi habitación

Álex: Quédate aquí conmigo esta noche- dijo acercandome más a él

Yo: Es que está Ro y no la quiero dejar sola con Bati toda la noche, por si está incómoda

Álex: Porfi- dijo poniendo cara de niño bueno

Yo: Ahh no, eso no te va a funcionar- dije incorporandome mientras le daba la espalda

Álex: Ya verás como sí- apoyó su barbilla en mi hombro y me dio un beso en el cuello que hizo que se me pusiera la piel de gallina y él, al notarlo, pasó su manó por mis brazos- Te quedas?

Yo: Vaale, contigo no se puede eh- respondí riendo- pero déjame ir a por unas cosas

Álex: Aquí te espero

Me dirigí a la puerta y en cuanto abrí vi en el pasillo a Pol y a Rocío. Me salió una sonrisa instantánea y cerré la puerta antes de que pudiieran darse cuenta

Yo: Pol y Ro!- grité poniendome después las manos en la boca

Álex: NO!- exclamó

Yo: SIIIIIII- dije dando saltitos de alegría

Álex: Pero estaban...?- no acabó la pregunta pero yo lo entendí

Yo: Hablando, pero solos y no precisamente alejados. Que bien!

Álex: No salgas ahora y les cortes el rollo

Yo: Pero tengo que ir a mi habitación

Álex: A por qué?

Yo: Umm pues no sé chico...si me quedo a dormir tendrá que ser para coger mi pijama no crees?

Álex: Pero por eso no te preocupes- se levantó y cogió una camiseta suya- Esta te quedará como un pijama

Yo: O como una bata. Eres enorme y yo soy un tapón, esta camiseta me la podría poner yo de vestido

Álex: No te quejes, así no se te ve nada- dijo con media sonrisa

Yo: Eso seguro- reí- si no hay más remedio me la pondré

Fui al baño, me recogí el pelo en una trenza y me puse la camiseta de Álex. En cuanto me la puse, no pude evitar olerla. Olía tan bien que me podría tirar horas oliendola, pero me acordé de que él estaba esperandome, y entonces salí

Álex: Te queda mejor que a mí- dijo sonriente

Yo: No lo creo, a ti todo te queda muy muy bien

Álex: Si tú lo dices- rio- Vamos a pedir algo para cenar vale?- yo asentí varias veces porque tenía más hambre de lo que pensaba- La pizza te gustaba no?- y me lanzó una sonrisa Márquez

Yo: Por supuesto- respondí bajando un poco la mirada, esa sonrisa hacía que me pusiera nerviosa

Al rato, ya habían traído la cena y estábamos comiendo. Durante este rato él me estuvo preguntando varias cosas sobre mi pasado y lo que quería hacer en un futuro

Álex: Y por qué dejaste los estudios?

Yo: Necesitaba tiempo para...encontrarme. No quiero dejarme llevar por lo que la gente crea que es mejor

Álex: Te pasaba eso anteriormente?

Yo: Sí, siempre he obedecido todo lo que me decían. Por eso no tuve el valor de decirle a mi madre que quería estar con mi hermano. Pero cuando murió pensé las cosas dos veces y no me iba a dejar manipular por nadie nunca

Álex: Eres una chica fuerte, se nota- dijo dando un último trago a su bebida

Yo: Eso ahora. Por cierto, no se supone que tú deberías seguir una dieta ya planificada?

Álex: Se supone, pero por una vez no pasa nada, no?

Yo: Ahh a mí no me preguntes, yo no sé nada

Eran las 12 y nos metimos los dos en la cama. Estaba bastante cómoda creo que por el hecho de llevar solo camiseta jaja y él sólo llevaba pantalones.

Álex: Buenas noches, bonita

Yo: Buenas noches, precioso

Fue cerrar los ojos y empezar un ruido que venía desde el pasillo. Los abrí de inmediato

Yo: Cada vez que duermo contigo pasa algo

Entonces escuché la voz de Bati

Álvaro: Pero qué cojones te pasa a ti?! Que pareces imbécil tío. Tú no eres nadie para decir eso y si tienes valor lo dices otra vez

Yo: Pero qué ocurre ahí?

Álex: Espera que salgo, quédate aquí

Yo: Noo no, ni en broma. Yo salgo también

Álex: Cabezota eres

Cuando salí ví a mi hermano y a Jorge uno frente a otro, con la mirada llena de rabia

Yo: Eiii eii fieras qué pasa aquí?- dije poniendome en medio

Jorge: Tu hermano que es un exagerado, y tú que ligerita de ropa vienes no?- dijo mirandome de arriba a abajo

Yo: Y eso a qué viene ahora?- no estaba entendiendo nada

De repente...golpe en la cara. De mi hermano a Jorge. Pero qué...? No me dio tiempo a reaccionar ni de buenas ni de malas. Álex me agarró desde detrás por la cintura, levantandome del suelo y me llevó a la habitación.

Álex: Te esperas aquí, vale? Porque tú no controlas

Yo: No, Álex, es mi...

Álex: Ariadna por favor, quédate, ahora vengo

Yo no estaba entendiendo nada, y algo en mi interior decía que sería mejor quedarme donde estaba. Haría un esfuerzo por quedarme, pero yo muchas veces no puedo evitar hacer lo que me viene a la cabeza sin pensarlo

Querido Pistolas (Álex Márquez)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora