Tanjiro no era precisamente feliz con su vida, su padre perdió la vida cuando su hermana menor Nezuko solo tenia meses de a ver nacido, su madre trato de llenar ese hueco en su vida de ella, intentando llenarlo de diferentes maneras pero aunque no era su intención dañaba a su pequeño Tanjiro, aun así frente a esto Tanjiro nunca dejo de sonreír para su madre o para Nezuko, pero detrás de esa sonrisa que ilumina como el sol tanto como esos pequeños ojos que iluminaba cualquier corazón ocultaba un oscuro secreto, Tanjiro desconfía normalmente de el constantemente y sufrió en algún momento un abuso que le dejo una marca que nunca borraría pero era incapaz de hacer que su madre sintiera culpa o se culpara por lo sucedido aunque, el piensa que ella sospecho en su momento evidente en el cuando era mas joven, el solo era un niño mas que había sufrido un abuso de alguien y por desgracia nadie hizo nada para evitarlo y nadie sabia mas que el mismo y el abusador, sin embargo el cree firmemente que en sus vidas presentes todo se paga y ningún pecado es perdonada, aun así Tanjiro no deja de sonreír, llego un momento de su vida que a alguien nuevo llego a su hogar al pasar el tiempo que tuvo que llamarlo "padre" aunque no era su padre y mucho menos para Nezuko, después de lo que le paso Tanjiro cuida mucho a Nezuko, el daría su vida por defender a su pequeña hermana, pero al paso del tiempo la joven pareja de su madre se gano la confianza y el respeto de los dos hermanos, incluso decidió tomar el apellido de los niño, Eso era un alivio para Tanjiro o eso piensa el, ya que pese a todo la pareja de su madre bebe mucho, el incapaz de hacerle algo a Tanjiro, mucho menos a Nezuko, pero eso no evita que haya peleas frecuentes por la pareja de adultos, Tanjiro cada vez que presencia eso toma a Nezuko y juega con ella o le ayuda con su tarea en su habitación de ella que es la mas lejana en el segundo piso, Tanjiro carga desde muy joven un gran peso en sus hombros, aun así nunca reflejo nada y incluso el siente que ni su misma madre sabe de el o lo conoce como debería hacerlo a Tanjiro no le molesta, siente que así no sera un problema para su madre, no sera un peso muerto o una preocupación mas para ella, incluso el tomo desde muy joven la responsabilidad de la panadería, la preparación del pan entre otras cosas que encargarse de ese pequeño negocio que a lo largo del tiempo fue creciendo.
Tanjiro venia con su pequeña mochila en sus hombros mientras subía la pendiente, al llegar con la manga de su uniforme quito las gotas de sudor que estaban reposando sobre su frente, respiro profundamente para entrar al pequeño negocio con esa "cálida" sonrisa que para el no era sincera, el sabia que le costaba mantener esa sonrisa desde que perdió a su padre, aun así siente la responsabilidad de mantenerla por su madre y Nezuko, entro al local empujando la puerta haciendo sonar una pequeña campana que alertaba que llegaba un cliente, Tanjiro apresurado entro detrás del mostrador para avisar a su madre que ya había llegado de su escuela, el solo consiguió un "si hijo" de parte de su madre que pensó que había llegado un cliente pero al ver a su pequeño solo sonrió, para después pasar a lo que el llama "hogar" dejando sus pequeños zapatos en su lugar para continuar su camino, subiendo a su habitación se encontró con su pequeña hermana que corrió abrazarlo y darle la bienvenida a su hogar, Tanjiro sentía calidez por parte de Nezuko y podía oler la alegría que Nezuko impartía al momento que veía a su hermano llegar, después de hablar un poco con su hermana de como le había ido en la escuela decidió dejar sus cosas en su habitación y cambiarse el uniforme por ropa mas cómoda para iniciar su labor en la panadería, tomo un pequeño delatar de color azul pastel para ponérselo sobre su ropa para evitar ensuciarse mientras preparaba el pan, Nezuko seguía a Tanjiro por toda la casa desde que el llegaba así que no era de sorprenderse que ella se sentara a un lado de la puerta de donde preparaban el pan mientras hablaba con Tanjiro ya que el le había prohibido entrar a esa habitación por su seguridad, mas cuando un día a Nezuko casi le caen los frascos de vidrio que se encontraban en un repisa mal puesta por suerte Tanjiro la logro salvar pero por consecuencia el tubo una herida en su frente provocando el llanto lleno de culpa de Nezuko, ese día Tanjiro tardo mucho calmar a Nezuko y también un regaño de su madre por permitir que Nezuko lo siguiera, aunque ese día Tanjiro no olio enojo de su madre sino Culpa, eso le comía el alma a Tanjiro que otras personas sintieran esas cosas por el, el se sentía culpable y mal consigo mismo, desde ese día hablo con Nezuko que ella no debía mantenerse en esa zona y llegaron a un acuerdo Tanjiro le coloco una pequeña mesa y una silla a un lado de la puerta sin estorbar a nadie para que ella pudiera estar cerca de el en todo momento, esto aliviaba a Tanjiro sentía que así podía tener a Nezuko mas tiempo con el y de paso podía protegerla mas tiempo.
El olor del pan recién hecho se podía presenciar por todo el local y los hermosos panes con su mejor presentación se podían apreciar atravez del cristal, Tanjiro había terminado de preparar algunos bocadillos así que se encontraba acomodándolos en los exhibidores mientras que Nezuko estaba sentada en una silla atrás del mostrador frente a la caja mirando como su hermano mayor acomodaba los pequeños panes mientras que ella movía sus pequeños pies de adelante hacia atrás, después de unos minutos la campana sonó alertando a los dos niños que estaban encargados en ese momento ya que la señora Kamado se encontraba cocinando, ella confiaba mucho en sus hijos así que los dejo a cargo del negocio, Tanjiro al momento que sonó la campana y se abrió aquella puerta, a su pequeña nariz le llego un agradable aroma que incluso para el apocaba el aroma del pan y hacia brincar su corazón, era como si el tiempo se detuviera sentía que ese aroma ya lo conocía, le provocaba nostalgia, el pensó que sus ojos le traicionarían y empezarían a llorar, ese aroma le provocaba tantas emociones que se juntaban y querían salir todas a la misma vez, tan rápido pudo regreso la mirada dirigida hacia la pequeña puerta de cristal para encontrar unos ojos azules como el océano, un joven serio que poseía un cabello largo y azabache atado con una liga, tal vez era mayor que el por 3 o 4 años, Tanjiro al mirarlo sus ojos brillaron mas que nunca como si de ellos fuera a salir fuego podía jurar el mismo niño que sus lagrimas saldría pero no entendía la razón, su corazón latía tan rápido que sentía que tenia dos opciones o bien su corazón explotaría o saldría corrido de su pequeño pecho, cuando sus miradas cruzaron Tanjiro quedo paralizado pensó que podía mirar el océano que tanto le habían hablado o incluso mirado en fotografías, en ese momento el pensó que había conocido el mar por primera vez y para su corazón y sus ojos era totalmente hermoso, para Tanjiro los segundos habían sido eternos y querían que fuera así mucho mas tiempo, un estruendo del cielo despertó al pequeño de su trance en aquellos ojos que lo ahogaban en su color azul para después de unos segundo mover su cabeza y saludar con educación al joven que había entrado a su negocio.
-B-bienvenido, pase por favor en seguida lo atenderé -con ojos brillantes y una sonrisa cálida le dijo al joven de ojos azules que solo le devolvió el saludo y un gracias algo frió y cortante, Tanjiro de inmediato termino de acomodar todo y fue detrás del mostrador, después de que el joven llevara una charola con unos cuantos bocadillos para que fueran empaquetados por Tanjiro, este de inmediato lo hizo aunque algo torpemente, incluso pensó que el joven diría que era un principiante, después de pagar la lluvia empezó a caer, la tormenta comenzó en ese momento, Tanjiro observo la lluvia caer y miro al chico después, "no trae paraguas" en su pequeña cabeza de Tanjiro resonó su pensamiento y de el emano preocupación, el joven al terminar de pagar solo suspiro al escuchar la lluvia para después dar las gracias y salir del local sin darle tiempo a Tanjiro de decir "gracias por venir" o algo por el estilo Tanjiro corrió lo mas que pudo buscando una paraguas, encontrando una no tardo en salir del local sin antes decirle a su hermana que ahí se quedara que no tardaría en volver, salio corriendo con el paraguas cubriéndole la cabeza y sin zapatos salpicando su pequeño pantalón, por alguna razón era un niño en medio de la lluvia corriendo sin zapatos con un paraguas rojo salpicando por todos lados, ¿como sabia por donde ir?, su olfato lo guiaba, Tanjiro sentía que no había tardado mucho en salir del negocio pero a su radio de visión no encontró al joven, pero al bajar la pendiente encontró al joven que caminaba tranquilo y como si la lluvia no le molestara o incluso como si no existiera en ese momento, Tanjiro al mirarlo solo pudo gritarle
-¡ESPERA! -esto alerto al joven que regreso a mirar atrás y miro sorprendido al niño de la panadería todo empapado con un paraguas en la mano - E-esta lloviendo mucho, toma - se paro en puntas de los pies y extendió el paraguas rojo cubriendo un poco al joven de ojos azules que por reflejo acepto el paraguas -Gracias por tu compra, vuelve pronto -dijo el niño de ojos como el fuego con una alegría y felicidad para después salir corriendo de ahí sin dejar que el joven dijera algo así como el anteriormente había hecho, el joven de cabello azabache solo miro al pequeño niño que radiaba calidez irse y desaparecer se su vista en ese día lluvioso.
ESTÁS LEYENDO
Quiero mas tiempo a tu lado
RomansaAdvertencia esta historia tiene contenido yaoi (hombrexhombre) Esta inspirada la historia en el anime/manga kimetsu no ya iba Giyutan (giyu x tanjiro) Las personalidades de los personajes en esta historia no coinciden con los del anime o del manga...