Capítulo 4

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Lo observó desde el suelo, me siento tan pequeña, este tipo es tan alto; mide al menos 1

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Lo observó desde el suelo, me siento tan pequeña, este tipo es tan alto; mide al menos 1.80  y yo aquí pareciendo pitufa con mis 1.65.

Y por otro lado, que yo no sabía hacer más que caerme de trasero cuando el aparece, lo peor del caso es que no está Sabrina para que le de sus putazos.

Como puedo me levanto y me pongo de pie el esta a una distancia cercana de mi, pero no la suficiente como para incomodarme.

- Haber, niña ¿Qué no te puedes fijas por una vez en tu vida por donde vas?- espetó con fastidio.

- Que tu no puedes ser una jodida persona normal y ser amable?

- Nah, no es lo mío y menos con alguien como tu ¿Cuanto mides 1.60?

- ¡¡¡Mido 1.65!!! Idiota - dije exasperada.

- No me digas idiota, niña retrasada.

- No soy una jodida niña, ni soy retrasada; tengo 18 y soy la mejor alumna de mi generación.

- Umm interesante, para ser lo que dices eres de entendimiento retardado.

- ¿Qué culpa tengo yo de que tu parezcas poste de luz eléctrica?

- Que dijiste?

- Poste de...

No pude terminar la oración ya que sentí una boca sobre la mía y se lo que pensarán si fue este idiota. Intente apartarme, pero este me atrapaba con sus grandes y fuertes brazos, después de un rato dejé de pelear.

Disfrute el beso, era intenso y a la vez dulce ¿Como? Ni me pregunten este tipo sabe lo que hace.

Se separó.

Yo me quedé pasmada.
 
Luego él comenzó a reír muy fuerte.

- ¿De que te ríes? - dije frunciendo el ceño.

- Te di un simple besó y pusiste cara de retrasada, luego dices que no lo eres - contestó rodando los ojos.

- ¡Por favor! Si no reaccione es porque seguro y tiene algún virus, quien sabe pueda que me haya contagiado de algo grave - hice un leve encogimiento de hombros.

- Mira niñita ese beso que te di es lo mejor que vas a recibir en toda tu vida, una persona como yo jamás podría andar con alguien de tu clase, pronto me casare y mi - me vio de pies a cabeza - Será mejor que eso - concluyó.

La irá comenzaba a recorrer mi cuerpo, me las tenía que desquitar pero... ¿Como?

Observe cada punto a mi alrededor, para buscar algo, solo algo que pudiera ayudarme. Vi un policía.

¡Bingo!

Tome al idiota ese de la camisa, y el quería apartarme.

- ¡Déjame ir! - gritaba.

- ¡No me pegues más! ¡Ya no aguantó!

- ¿Que mierda te pasá? - preguntó el desconocido confundido.

- ¡Déjame ya no quiero que abuses más de mi! - empecé a llorar falsamente.

El idiota me aparto, uso mucha fuerza o eso sentí yo, porque caí al suelo.

El policía vino de prisa por mi auxilio. Me tendió la mano y me ayudó a levantarme  del suelo.

- Gracias - dije haciendo una mueca de dolor.

- Este hombre la está molestando? - preguntó el policía dándole una mala mirada al desconocido.

- Si - lloré de nuevo - Este tipo me persigue, me acosa y me pega si me ve hablando con personas ¡Ya no aguantó - lloré más fuerte.

Yo era una excelente actriz.

- ¿Qué yo que?  Pero si ni la conozco oficial - alegó esté.

El policía me veía con lástima y al desconocido idiota con reproche.

- Eso se lo tendrá que aclarar al juez, a mi no - seguido de esto el policía le puso esposas - Vamos - le dijo empujandolo.

- ¡¡¡Te vas a arrepentir de esto!!!

- Oficial me va a hacer daño - fingi miedo.

- Tranquila señorita, no la volverá a tocar, quedece tranquila - me regaló una sonrisa reconfortante.

- Y tu camina - empujó el policía al desconocido.

Reprimí mi risa lo más que pude, creo que me pasé, por otro lado jamás alguien se pudo haber desquitado mejor.

Moraleja: Nunca te metas con Valeria Zuniga.

La patrulla pasó frente a mi, con el desconocido en la parte trasera, el me vio y yo le sonreí, luego le saque el dedo de enmedio.

Que bonito es lo bonito ¿Verdad?

Camine muy feliz hasta mi casa, sabía que al llegar sería todo un desastre pero ahora, nadie me quitaba esta satisfacción que llevaba.

Una Herencia Nos UnióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora