Bajo la misma luna 🌓

Un día diferente

Faltaba un día para navidad, recuerdo estar en mi cuarto, éramos de clase baja y era una fecha especial para muchas familias y también para mí, recordé que mi madre amaba las rosas como a ningún otra cosa, revisé mis ahorros y tenía la cantidad exacta para darle ese regalo que la haría tan feliz, corrí donde vendían aquellas enormes rosas y las admiraba tanto, rosas con su aroma tan suave y puro, tomé la rosa feliz y pude pagarla, solo pensaba en mi madre, y también en aquella muchacha, no quería que esta navidad fuera como las anteriores, quería comprarle esa Rosa a mi madre, terminé de pagar y el señor de la tienda me regaló una enorme sonrisa, corrí de regreso a casa, sabía que todo estaba bien, y que así sería, que mi día a pesar de no ser igual a los demás haría seguramente feliz a mi mamá, pensaba en la reacción de mi madre, esperaba con ansias obsérvala feliz. Era de noche, y me acosté tarde para poder decorar un arbolito con luces que encontré en la calle, no era la mejor navidad y quizá otros jóvenes y niños tenían grandes regalos, pero el mejor regalo para mí era hacer feliz a mi madre, al final logré darle un regalo no tan costoso, pero si con bastante amor, esa hermosa rosa tenía un gran significado para mí y era un regalo simple para muchos, pero era una gran muestra de mi amor por ella, ese regalo provocó lágrimas de felicidad en su rostro, la abracé, y me sentía orgulloso de tener a una madre como ella. Posiblemente esa era y sería una de mis mejores navidades.