No puedo parar de llorar.
No sé cómo hacerlo.
Por ahí,
si entendiera porqué duele tanto,
podría.
Pero tu ausencia me destruye,
de a poco,
desde adentro.
Primero con lágrimas,
después con dolor.
Le sigue el miedo,
y termina en la fatalidad
de volver arrastrada
a llorarte que te necesito,
cuando en realidad lo que necesito
es quererme
y dejar de llenar bañaderas con mi llanto.
No vaya a ser
que me termine ahogando en mis problemas.

ESTÁS LEYENDO
Sempiterno
PoetryII Colección de poesía. No es perfecta y por ahí tiene errores. Te quiero si decidís leerla, y sino también. Las críticas constructivas, opiniones, sentimientos, pensamientos y demases son aceptados y bienvenidos.