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《Here》

La vida en el palacio de la familia Jeon siempre era muy ajetreada. Constantemente entraban y salían personas y, el más joven de la familia, tenía todo los días una larga lista de actividades para realizar. Solía estar con su padre aprendiendo del oficio, firmando documentos o en múltiples reuniones, y cuando no estaba haciendo estas tareas, permanecía en el palacio entrenando físicamente, también tomaba clases de aprendizaje, y básicamente cualquier cosa que aumentara su conocimiento y desarrollo como príncipe de Corea del Sur. Sin embargo, lo que más le gustaba al príncipe Jungkook era, definitivamente, salir por la ciudad para recibir y entregar recados importantes.

Nunca salía solo, él estaba rodeado de un montón de caballeros que se encargaban de cuidarlo, asegurar su vida, pero para Jungkook se sentía como un alivio cuando podía abandonar el palacio y disfrutar del día, las calles y las personas; el ruido del exterior. Era una actividad sencilla, que le transmitía calma, y lo alejaba de toda la rutina diaria que muchas veces resultaba asfixiante. Era casi tan placentero como escribir. Al príncipe también le encantaba esta actividad.

-Príncipe Jungkook, ¿en qué piensa? -Le preguntó su caballero SeokJin-. No ha firmado los papeles

El recién nombrado parpadeo, regresando a la realidad, y se estiró en su asiento. Tomó nuevamente la pluma y comenzó a firmar algunos papeles de asuntos pendientes.

-En la cena de ayer padre mencionó que hoy llegaría alguien al palacio -El príncipe mordió su labio inferior-. La habitación está lista y todos están esperándolo, pero no tengo idea de quién se trata. ¿Tú tienes a alguien en mente? -Le preguntó el jovencito a su caballero.

-Se escuchaban rumores de que era alguien perteneciente a la familia Kim de la ciudad de Daegu -Respondió el caballero-. ¿Y si se trata de la princesa Jennie?

-Pero todavía no he cumplido la mayoría de edad -Respondió el príncipe-. Faltan meses para que Jennie venga, además no tiene sentido que me oculten esa noticia, en el que caso que de verdad se trate de ella

-Quizás quisieron adelantar todo, dejar que ella se adapte al palacio antes del compromiso -El caballero SeokJin se encogió de hombros mientras opinaba sobre el asunto y las posibilidades.

-¿Qué tan cierto pueden ser esos rumores? -Preguntó el joven, entrecerrando los ojos, pensativo.

-Existe un alto porcentaje, la mayoría del tiempo aciertan con lo que dicen -Respondió el caballero.

-Bien, igual debemos esperar -El príncipe acomodó la pila de hojas y se levantó del asiento-. Por favor SeokJin, lleva todo esto con el señor Lee

-Enseguida, mi príncipe -El caballero asintió y tomó los papeles-. ¿Quiere algo más?

El príncipe negó y comenzó a caminar por la habitación designada para sus actividades. El caballero abandonó el lugar después de una corta reverencia y entonces el joven se quedó solo. Se detuvo en la ventana que dejaba ver los extensos jardines y notó como la tarde estaba cayendo, como las áreas verdes comenzaban a opacarse por la falta de luz. En ese momento pensó en las posibilidades de que la persona que estaba por llegar se tratara de la princesa Jennie. No supo descifrar cómo se sentía al respecto, pero, de una forma u otra, estaba ansioso.

Un cuarto de hora después el joven príncipe se encontraba nuevamente sentado en el gran escritorio, tomando una taza de té y leyendo un poco. Su tranquilidad fue perturbada cuando el caballero SeokJin solicitó entrar a la habitación.

-El carruaje ya se puede apreciar y, los rumores son ciertos, se ven las banderas de Daegu, así que se trata de algún miembro de la familia Kim -Explicó SeokJin-. Probablemente estén aquí en 5 minutos