Nadie preparo a el pequeño pueblo para afrontar a un asesino en serie entre ellos.
El pueblo Yoshika es bastante pequeño para alguien como Yuju, también algo aburrido, rutinario junto a sus amigos, pero todo cambio cuando graves asesinatos comenzaro...
[Recuerden votar! Me esfuerzo mucho por escribir y he visto que no muchos votan 😔.]
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Minho:
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¿Que era aquel dolor en el pecho que sentía en ese momento?
Algunos dirían que es dolor, otros angustia, pero yo lo definiría más bien, como un corazón roto.
Aquella repentina falta de aire, ganas de gritar para que pare, aquella sensación de deriva, de estar aturdido sin saber que hacer después, y sin olvidar el peor y el más difícil de sacarse de encima, el vacío dentro de uno mismo, sintiendo como si fuese un terrible dolor, que no tiene ni siquiera lugar de donde provenga, sino más bien, en la mente, en las emociones, en los sentimientos. Un dolor, que no se siente físicamente, sino emocionalmente, sin manera de encontrar algo que lo calme, ni siquiera pastillas o alcohol pueden apaciguar el dolor de un corazón roto. Un dolor completamente invisible.
-¿Lino?-Dijo Yuju a mi lado.
Parecía estar algo entristecida y por alguna razón sabía que aquello no era nada bueno. Los últimos días no hemos hablado y tampoco hemos estado juntos de manera alguna, por lo que no sentía más que distancia entre ambos.
Solté un suspiro y la mire. Su cabello se movía junto a la leve brisa de primavera, la cual había llegado hace unos días.-Creo que se lo que sucede Yuju.
-Solo, no quiero hacer esto más difícil de lo que es para mi, porque se lo que te sucede.-Hablo mientras tomo mi mano reconfortándome y yo la observaba asintiendo.
Todos lo sabían, hasta ella lo había notado. Finalmente había caído por ella, por Yuju. Era algo loco de decir, pero no lo podía negar. Se notaba demasiado y ya ni siquiera lo ocultaba porque no sentía vergüenza alguna por quererla tanto.
Y pensar que mis intenciones con Yuju al principio sólo eran para molestar a Jinnie. ¿Que tan rápido cambiaron las cosas en solo unos meses?
¿Quien diría que lo que comenzó como un juego para mi, terminó siendo mi perdición?
