Aire

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No voy a negar que si tu no estas me falta el aire
No quiero pasar ni un minuto más sin ti

La reunión habia sido espantosa jamás se habia sentido mas incómoda por la situación que se le habia presentando enfrente de sus ojos. Nada le habia resultado mas extraño que estar comiendo con su ex mujer acompañada de otro hombre y tener que verla a ella con otra. Paulina pone sus ojos en blanco mientras avanzan por el pasillo con Alejo. Que mal le cae esa mujer, no solo por estar precisamente con el amor de su vida si no que su manera de hablar sobre las personas transgenero le ha hecho mucho ruido. Ha notado como de alguna u otra forma quisiera obtener fama a cambio de sus vivencias. Lo que le resulta sumamente despreciable. Pero ha visto que María José esta demasiado cegada con ella, hasta pareciera que realmente le gusta... a pesar de que el recuerdo de su creciente mal humor irrumpe sus pensamientos. Fue ese mismo dia cuando ella se invento que aun hablaba con Alejo. Jamás en la vida habia mentido tanto. Solo ha recurrido a el luego de haberla visto irse con Kim de aquel restaurante pero ¿a quien quiere engañar? Ella sabe muy bien que esta demasiado lejos de poder llegar a sentir algo por él. Simplemente por que a pesar de que el niño se esfuerza por ser todo un hombre cuando esta a su lado no la hace sentir nada. Cada vez que esta cerca de él se pierde en sus pensamientos que le resultan siempre mucho mas interesantes que estar alli conversando de algún asunto que probablemente no le interese. Suspira para deternerse frente al ascensor Alejo esta a su lado, es él quién ha presionado el botón para que el elevador suba o baje hasta ese piso así pueden irse. "Eres tan cabrona. Que brillante idea la de venir hasta aquí en tu auto en vez de hacer que cada uno se mueva en el suyo. Ahora esta obligada a llevarlo" piensa. Esta allí pensando aún en María José en lo guapa que se veia con esa blusa turquesa y pantalones negros anchos. Su maquillaje y su pelo rubio largo, más allá de sus hombros. Deberá de buscar algún otro abogado para poder solucionar su asunto por que evidentemente no podra obtener nada de ella.

María José se habia quedado con una sensación extraña luego de esa reunión. Se ha dado cuenta que ha exagerado sus sentimientos por Kim solo por que se sentía o mas bien siente celos, muchos, de que el crio ese estuviera allí con Paulina. Joder, realmente había creído que tomar distancia de ella, que no darle otra posibilidad la iba ayudar a separarse pero no. Se la ha pasado pensando en ella a pesar de haberse esforzado por ni siquiera cruzarla en el hotel. Ahora camina por el pasillo convencida de que tiene que pedirle disculpas por que jamás conversaron sobre el caso y por que para que negarlo la idea de que se vaya con él hace que se le revuelva el estómago. Camina lo mas rapido que sus tacones le permiten mientras que ruega que aun este allí. Al doblar la ve, esta parada a un costado de el perdida en su mente. Tan guapa. Jodida Paulina De La Mora incluso cuando debería de odiarla y dejarla atrás. Ahí está ella una vez más buscando conversar para que no se vaya con otro.

- Paulina -la ve voltear para observarla- perdona que no hayamos podido hablar de tu caso -Alejo voltea a mirarla también.

- No... -dice en un tono de voz apático que oculta el dolor que siente negando apenas con su cabeza pero aun sin mirarla- No era el momento, no te preocupes.

Joder, esto será mas difícil de lo que creyo pero tiene que intentarlo no puede dejarla ir con él. No, no se lo puede permitir.

- Si quieres mmm... podemos armar otra reunión en otra ocasión no sé... -dice viendola solo a ella que al fin voltea para cruzar sus ojos oscuros con los suyos.

- Paulina la ve a la vez que Alejo baja su mirada hacia ella en ese mismo instante en que las puertas del ascensor se abren dice - Me permites un minuto yo te alcanzó.

Se quedan ambas allí viendo como Alejo finalmente sube al ascensor murmurando que le da igual ir hacia arriba o abajo sintiéndose casi derrotado. María José se siente confundida y llena de pena mirando con cierta vergüenza hacia el suelo sin saber muy bien que decir mientras que la morocha esta llena de dolor. Haberla visto en esa reunión con esa otra mujer solo ha sido peor para ella que finalmente esta tan convencida de todo lo que siente y le pasa.

One Shoot's: Paulina De la Mora & Maria Jose RiquelmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora