No me mal interpreten, no soy una acosadora solo me llamaba la atención la hermosa relación que sostenían unas vecinas mías, ellas vivían juntas, y siempre se les veía por ahí abrazadas, no eran de esas parejas homosexuales que se ocultan ante el mundo, lo de ellas era algo formal, además era imposible que ocultasen eso que para mí era amor.
Yo nunca hablé con ellas, la verdad es que soy tímida, pero me habría encantado.
La última vez que las vi juntas fue un martes, y la verdad quiero recordarlas así; felices, riendo.
Me gusta pensar que todo sigue igual que ese día, porque ni ellas ni yo sabíamos que el jueves por la tarde encontrarían a una de ellas abusada y despedazada en una caja. "Marimacho" le escribieron en el pecho.
