Sᴡᴇᴇᴛ Cᴏғғᴇᴇ || SᴀɴWᴏᴏ

✦✧✧ ϲαριτυℓο 2 ραяτє 2 ✧✧✦

(Preparen los auriculares que los van a necesitar, perdón si no anda el link)

Wooyoung llegó cansado a su casa. Estaba exhausto, corrió las diez cuadras que separan el café de su casa.
Saco lo más rápido posible la llave para abrir la puerta. No le importo tirar todo en el sillón de la entrada, necesitaba apurarse.
Corrió a buscar un toalla y su ropa interior para ir a ducharse.
Reviso su celular para ver la hora. Tenía 20 minutos para arreglarse por completo o llegaría tarde.

Le quedaban 10 minutos, se baño en tiempo récord, necesitaba estar listo.
Camino lo más rápido que pudo hasta el armario para buscar ropa. Decidió vestirse con una remera negra, unos jeans rasgados del mismo color, sus Vans clásicas y su suéter preferido, oscuro con toques blancos.
Volvió al baño para peinarse, secarse el pelo, y maquillarse. Si, Wooyoung usa maquillaje. No sé siente del 100% cómodo con si mismo, pero se pone lo más simple, la base y una sombra muy tenue.
Reviso la hora en su celular, quedaban 5 minutos. Lo justo y necesario para ponerse perfume, preparar su mochila y salir hacia la puerta del edificio.

Al salir del ascensor, lo vió en el capo de su auto, un KIA gris, para hacer exactos.
San estaba vestido súper bien, hizo bien en darle su número. Traía una bolsa transparente en la que se distinguía un paquete de peperos, pero no había rastro de que traía bebidas.
Y se acordó...

- ¡¡LOS CAFÉS!! - se autopalmeo en la frente - ¿CÓMO TE VAS A OLVIDAR? ¿SERÁS O TE HACES EL ESTÚPIDO? - se dijo en voz alta.

Con un poco de vergüenza abrió la puerta de vidrio del edificio y se acerco a San caminando cabizbajo.

- Hola hyung - dice tratando de hacer contacto visual - yo... Me ... Me olvidé de... -

- ¿Te olvidaste de los cafés? No importa, compré bebidas, están dentro - dice con una sonrisa.

- Perdón San, lo olvide - comenta triste.

- Ya te dije que no importa, no es que nos vamos a morir o que va a ser la peor cita de todos los tiempos - con su mano derecha lo agarra del mentón y le levanta la cabeza para que lo mire - mírame a los ojos cuando te hablo, si no voy a pensar que no te importo o que no quieres escucharme -

Inmediatamente el menor levanta la cabeza para mirarlo, no quiera que el pelinegro se enojara con él

- Vamos, subamos - agrega el mayor.

Wooyoung le hizo caso y rodeo el auto para subirse, estaba tan nervioso que casi tropieza cuando bajaba el cordón de la vereda.
El viaje fue corto, pero se mantuvieron en silencio hasta llegar al parque.
Estaban todos los bancos ocupados, pero San se adelantó a eso y se trajo su propia manta para dejarla en el piso y sentarse sobre ella.

Acomodaron todo, abrieron los bocadillos y se dispusieron a mirar al lago.
El pelimorado cada tanto agarraba alguna que otra cosa, pero iba de a poco.

San lo vio tan lindo, con solo que él haga la acción de respirar, ya era feliz.
Saco su teléfono, abrió la cámara y apunto hacía Wooyoung.

- ¿Me estás tratando de sacar una foto? - pregunto el menor.

- No... Jamás - le responde el mayor.

Wooyoung le saca su celular, se acomoda en el pasto y toma un selfie.

- La próxima pídela, no hagas lo mismo que con mi número - se manifestó el pelimorado.

- Lo siento si soy un poco tímido o tonto, pocas veces salgo a citas. Hace mucho que no salgo a decir verdad - contesta el pelinegro.

- ¿Un poco? - ríe Wooyoung - no importa, yo también hace mucho que no salgo. Es sano de ves en cuando tomarse un respiro de la vida cotidiana ¿no? - pregunta en menor.