CAPITULO 12

5 0 0
                                    

    Los días pasaban y teníamos que hacer acto de presencia en las reuniones, comidas, cenas y fiesta con los altos mandos, nuestros proyectos he ideas funcionaban muy bien, tomando renombre cada vez más, el grupo  estaba muy contento de todo lo y...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Los días pasaban y teníamos que hacer acto de presencia en las reuniones, comidas, cenas y fiesta con los altos mandos, nuestros proyectos he ideas funcionaban muy bien, tomando renombre cada vez más, el grupo estaba muy contento de todo lo ya logrado puesto que iríamos por más.
Era tanta la carga de trabajo y realización de proyectos que de vez en vez, Nam y yo nos dedicábamos una sonrisa o una mirada diciéndonos cuánto nos amábamos.
Estaba disfrutando de la mirada de mi hombre cuando sentí a Elian tras de mí con toda su erección pegada a mi trasero, Nam al darse cuenta se levanta lanzando una mirada de rabia, me incorporo todavía pegada a su erección preguntándole entre dientes: Te gusta lo que estás haciendo, esto te excita?
- Me encantas Daí y quisiera hacerte el amor, me vuelves loco cada vez que te veo.
- Ah, sí, pues más loco vas a quedar pequeño bastardo, - diestramente y con delicadeza, tomo su paquete con mi mano retorciendo asta fracturar su miembro, para después alejarme de él, éste sólo me veía con ojos perdidos tratando de disimular el gran dolor que sentía.
- En tu perra vida te me vuelvas a acercar infeliz, para la próxima te dejo sin huevos, si es que hay una próxima, encaminándome al tocador de damas para lavarme las manos, el hecho de haber sentido aquel bulto me provocaba náuseas, desconocía lo que pasaba en ese momento en el tocador de los hombres.
- Linda amor, estás bien? - lo miro con una risa burlona.
- Yo estoy perfecta, pero no puedo decir lo mismo de ese infeliz.
- Ese Elian se va a ir a la mierda desde ahora, no voy a permitir que te siga molestando. - su cara estaba encendida de rabia, estaba hecho un energúmeno.
Mientras yo estaba en el tocador, Nam ya había descargado su rabia propinándole una mega golpisa en el baño al pobre infeliz de Elian, le había roto la nariz junto con las costillas, tumbandole unos cuantos dientes, lastimando severamente su hígado y remató pateándole las bolas, eso era poco conociendo a Nam.
Se tomaron cartas en el asunto y fue llevado a la corte por acoso y hostigamiento, en el caso salieron más víctimas incluyendo a Inna. Semanas después nos enteramos del fallecimiento de Elian.

El arquitecto Elian Nielsen acusado de acoso y hostigamiento fue encontrado en su celda sin vida, con desprendimiento de sus miembros superiores, teniendo las piernas destrozadas, casi le desprenden la cabeza del cuello, mutilandole sus partes nobles y extrayendo sus globos oculares, al parecer no hay testigos.
Se sigue la investigación.


- Linda, regresa, en qué piensas?
- Me pregunto si todo esto es casualidad o justicia divina?,- recostándome a su lado.

  - Linda, regresa, en qué piensas?  - Me pregunto si todo esto es casualidad o justicia divina?,- recostándome a su lado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
FIREFLYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora