El tiempo ¿cura todo?

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Seis meses después

-¡Diosss hace más de cuatro horas que llevamos dando vueltas aquí! ¿Puedes recordarme por qué salgo a hacer las compras navideñas contigo?- preguntó irritado

-¡¡¡Porque me amas!!! Tan simple como eso- contestó burlón.

-¡¡¡A veces debería odiarte!! Juro que esta será la última vez que salgo de compras por Navidad contigo- soltó con un bufido.

-Eso lo dices cada año, y aquí estás haciendo esto conmigo, deja de quejarte, prometo recompensarte cuando lleguemos a casa- comentó con ternura mirando a su acompañante.

-Eres tan irritante-

-¡Asi me amas!-

-Lamentablemente si- contestó con una pequeña sonrisa mientras tomaba la mano del otro y lo arrastraba al patio de comidas del centro comercial. -Ahora alimentame sino realmente no volveré a salir contigo de compras.

-Esta bien, vamos donde quieras-

Se sentaron en unas bonitas mesas debajo de una gran decoración navideña, con sus bandejas cargadas de comida.

-¿Ya vas a dejar de quejarte? Aún me faltan dos regalos, luego podremos irnos-

-¿En serio? ¿Todavía faltan dos?, ¡por que me haces esto Tae?, ¡de verdad estoy cansado!-

-Mira todavía recuerdo que me obligaste a actuar de árbol en el acto final de la escuela donde trabajas así que deja de quejarte, ¡me lo debes Park Jimin!-

Ambos se miraron y comenzaron a reír a carcajadas, aquel recuerdo era lo más gracioso que habían vivido, Tae debía actuar de un árbol sabio que hablaba con los animalitos del bosque representados por los alumnos de Jimin. Nunca lo olvidarian.

-Esta bien- dijo entre risas, - solo porque estoy pensando en realizar una obra donde necesitaré un camarón gigante para el fondo del mar- soltó con gracia.

-Oh Dios ¿por qué siempre tengo que ser tu actor principal?- gimió haciendo reír a su amigo.

-Come de una vez así terminamos con esto que quiero ir a nuestro sillón y acurrucarnos para ver películas de Santa- habló Jimin arqueando las cejas como si la propuesta fuese la más pervertida.

-Oh Park Jimin ¿acaso estas coqueteando conmigo?-

-¿Quién sabe? quizás sea tu noche bebé-

-Oh sabes como me pone Santa bebé-

Las carcajadas volvieron sin parar, solo ellos podían entenderse de esa manera.

-Oye hablando en serio, ¿de veras te quedarás solo para Navidad? Es decir sabes que puedes venir conmigo y mi familia a Daegu, todos allí te aman incluso más que a mi- bufó.

-Lo sé Tae, se que me aman más que a ti, eso es lógico- sonrío al hablar mientras su amigo rodaba los ojos.
-Pero en serio debo quedarme, el director me pidió hacer la primer guardia después del 25 y no pude negarme ya que luego podré descansar más días que mis compañeros.

-mmm creo que eres un consentido de tu director, ¿dime está bueno?-

-¡Tae el tipo tiene como setenta años y además soy amigo de su nieto!-

-mmm ¿ y el nieto está bueno?-

-Pues él si- río al responder.

-Lo sabía, sabía que te estabas acostando con alguien-

-Basta Tae no es lo que piensas-

-Osea que no es nada serio, no son pareja, es solo sexo, y ahora tendrás sexo de Navidad en una escuela vacía pervertidoo-

Despedida De SolteroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora