PODRIA AYUDARLES

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-Ella era de las niñas que quería ser diferentes a los demás –murmure mirando a una esquina de la sala en donde me encontraba. – solo que su manera de hacerlo, a veces, no era la correcta.

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Romina POV

-Oye, ¿y tú hermano? –pregunte a Samu, mientras los dos estudiábamos. –

-En el cuarto, ¿por?

-Como siempre suele haber gente y ahora estaos tan solo –conteste simplemente. –

Comenzaron a sonar las notificaciones de un celular llamando nuestra atención, ni yo recibía tantos mensajes así de seguidos

-¿Es tuyo?

-No, de mi hermano –se levantó de la silla y fue a mirar el celular. – ¿Qué es esto?

-Samu, ¿Qué pasa? –me levanté para ponerme a su lado. –

-No me lo puedo creer... le están enviando matrículas –camino molesto llamándolo. – ¡Nano!

-¿Qué pasa? –pregunta mirándolo. –

-¿Qué es esto? ¿Quién te está enviando matrículas?

-¿Qué cojones haces con mi teléfono? –Se lo quita mirándolo molesto. –

-¿Cómo puedes ser tan imbécil de volver a robar coches cuando tienes la condicional? Si te pillan, vas a volver a la cárcel

-Samu, déjame en paz. Hola Romina

-Nano, dentro de la cárcel está la gente a la que le debes pasta

-Quizá, yo podría ayudarles –decidí meterme. –

-No, tú mantente fuera de esto –me mira un poco molesto. –

-Mira, vamos a hacer una cosa... a partir de ahora, te metes en tu puta vida

Los dos terminaron la discusión y la verdad es que no sabía qué hacer, así que solo atine a abrazar a Samu, tratando de tranquilizarlo un poco. Una vez que lo vi tranquilo, regrese a mi casa.












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Cuando llegue a las encinas Lu ya me estaba esperando, caminamos juntas y conversamos un poco, veo que se queda mirando por el pasillo, dirijo mi mirada a donde ella ve y me encuentro con Samu, Marina y Nadia, ella se acerca sonriente a ellos, sabía que nada bueno saldría de esto.

-¡Ostia, el velo!

-Tranquila, no voy a decir nada del velo –comenta Lu frente a ellos. – al contrario, ya me acostumbre a toda esta diversidad folclórica. Nadia, es en serio, deberíamos quedar las tres –toma mi mano al decir eso. – para intercambiar ideas, nos sorprenderíamos mucho las tres. ¿Qué te parece esta tarde en el cumpleaños de Guzmán? No le han invitado, ¿no?

-Lu

-Perdón, es que como quieres ser tan amiga de él después de que mi mejor amiga termino con él, juraba que si irías –sonrió mirándola. – igual es algo íntimo, ¿no, Marina? Buen día

-Lu, espera... necesito hablar un momento con Samu –murmure mirándola con una sonrisa de disculpa. – ¿podrías esperarme solo unos minutos?

-Solo porque te quiero, voy a hacerlo –sin más que decir camina unos pasos adelante, dándome privacidad. –

Mire cómo tomó asiento en uno de los silloncitos que se encontraban, esperando por mí, voltee a verlo y ellos solo la miraban

INEFABLE/ ELITEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora