( 🌷 ) ; Johᥒᥒყ

936 19 0
                                    

Sabías que estabas en problemas al ver la hora en que llegabas, las calles estaban casi vacías y la oscuridad se extendía por toda la ciudad. Si tenías suerte al llegar a casa, tu novio estaría durmiendo y podrías salvarte.

A Johnny jamás le agradó del todo tu amigo Lucas, según él, sus intenciones eran claras contigo. Pero ¿qué podías hacer? Eran amigos desde la infancia y no arruinarías una amistad de años solo porque tu novio era un celoso de primera.

Sin embargo, cuando recibiste una llamada de Lucas donde te pedía que fueras a su casa, no dudaste en ir corriendo sin siquiera avisar que no estarías por un par de horas.
Johnny por otro lado, lo único que deseaba era salir del maldito trabajo y acurrucarse con su hermosa novia mientras miraban unas películas.
Que sorpresa se llevó al llegar al apartamento y encontrarlo completamente vacío.

Por eso, cuando llegaste a las diez de la noche con los nervios a flor de piel encontrándolo sentado en el sillón de la sala, tus piernas temblaron.
Sabías que tu comportamiento no había sido el más adecuado.

—¿Dónde estabas?— Su voz sonaba grave y ronca, su seño se encontraba fruncido y mantenía los ojos clavados en los tuyos.
—Cariño yo, de verdad siento no haberte avisado que saldría— Tu voz salió temblorosa y maldijiste mentalmente por ello, no querías que notara lo nerviosa que estabas.

—Acércate— Hiciste caso a su orden y a pasos lentos e inseguros fuiste hacia él.
Cuando estuviste lo suficientemente cerca, tomó tu muñeca y te obligó a sentarte sobre su regazo con tus piernas una a cada lado.

—No respondiste la pregunta—

No tuviste otra opción que asumir las consecuencias y decir la verdad —Estaba con Lucas— respiras te profundo antes de seguir hablando —Sé que hice mal al no avisarte y llegar tan tarde, pero, él estaba enfermo y necesitaba mi ayuda—

Te exaltaste al sentir como tu cuerpo fue recostado contra el sofá de una manera brusca —Mierda ¿no crees que ya está bastante grandecito para necesitar ayuda?—
Abrió tus piernas colocándose entre ellas mientras presiona su miembro contra tu intimidad. Leves jadeos abandonaban tu boca, mientras tu pecho subía y bajaba por tu respiración agitada.

—Ese idiota solo quiere tu atención— Simuló una penetración, logrando que soltaras un gemido bastante alto —Dejame recordarte quién es el único que te merece—

—Ese idiota solo quiere tu atención— Simuló una penetración, logrando que soltaras un gemido bastante alto —Dejame recordarte quién es el único que te merece—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Solamente podías soltar gemidos mientras tu cuerpo se movía con brusquedad por las fuertes embestidas que recibías.
Tu espalda estaba arqueada, de tus ojos brotaban pequeñas lágrimas por el inmenso placer al que estabas siendo sometida.

Te estaba destrozando, ralentizaba sus penetraciones cuando veía que estabas cerca de llegar, sonriendo al escuchar salir lloriqueos e insultos de tu boca.
Tus manos se encontraban sobre tu cabeza, amarradas con una corbata, no te permitiría tocarlo, debías ser castigada por darle tu atención a otro.

Tu cuello estaba lleno de chupones, no pudo evitar marcar tu piel para hacerle saber a todos que no estabas sola, y quizás también era un mensaje claro para Lucas. No podías quejarte, sentir sus labios recorrer tu cuello para luego morderlo y succionarlo te había hecho sentir tan bien. Incluso hiciste tu cabeza a un lado para darle más acceso, haciendo que sonriera por ello.

—Que buena chica eres, bebé—

Tus gemidos eran cada vez más fuertes, estabas cerca y Johnny lo sabía —Pídelo— susurró en tu oído, erizando toda tu piel.

—A-ah Johnny p-porfavor— ambos estaban agitados, no durarían mucho más.

Con una mano te obligó a mirarlo mientras se enterraba duro y rápido en tu interior.
—¿De quién eres bebé? ¿A quién le perteneces? Dilo, quiero escucharte— chillaste al sentir un azote en tu nalga derecha cuando no respondiste.

—T-tuya, s-solo tuya—

Sentiste tu cuerpo tensarse para segundos después gritar su nombre en un fuerte gemido. Tus paredes se contraían al rededor de su pene y eso bastó para que se corriera dentro tuyo. Gruesas tiras de semen brotaban de tu entrada hasta escurrirse por tus piernas, dándole una vista increíblemente caliente a tu novio.

Con cuidado fuiste limpiada, mientras recibías pequeños besos en los labios. Puede que Johnny sea un salvaje cuando esté enojado y celoso, pero al final siempre terminaría siendo ese dulce chico del que te enamoraste.

·  ·  · ·  ·  ·  ·  ·↫ [★] ↬ ·  ·  · ·  ·  ·  · 

Realmente espero que esta historia sea de su agrado ♥

NCT Shots +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora